;Muerte y vida

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-¿De verdad?

Su hora de salida había pasado hacía treinta minutos, JooHeon y Jackson se encontraban en el laboratorio de ciencias experimentales, donde el último ajustaba pequeños detalles de una máquina generadora de energía que, según sus palabras, podría cambiar el concepto de la electricidad para la vida humana.

-Te lo juro -respondió Wang. -Con este aparato el ahorro en luz será mayor, y es menos contaminante, además lo he hecho de forma compacta, no estorbará para nada. Sólo necesito ponerlo a prueba.

-¿Entonces este es tu proyecto final? -preguntó con asombro el entonces castaño, acomodando las gafas que se deslizaban por su pequeña nariz. -Me fascina.

Jackson sonrió en su dirección y despeinó su cabello con cariño, causando que JooHeon riera con alegría acumulada.
El generador fue encendido y los rostros de ambos se iluminaron de expectación pura al ver que la diminuta torre de proyección comenzaba a armarse sobre la base y a crear la contención de energía en esfera; aquello ya era un logro mayor y seguro que revolucionaría toda la ciencia. Sin embargo, de pronto hubo un corto con algunos cables internos, causando que la esfera de energía se apagara y los fusibles terminaran quemándose. Jackson corrió rápidamente por un extintor mientras JooHeon se apartaba escondiéndose detrás de una de las mesas que allí había.

-¡Ay, no! -dijo cuando pudo hacer cesar las llamas. -Se arruinó todo.

El castaño asomó sus ojos detrás del mueble y salió, acercándose a su amigo para apretar su hombro en señal de apoyo. -Tranquilo, yo te ayudaré.

-¿Harías eso por mí?

-Sí. Además todavía tengo un año para comenzar con mi propio proyecto, esto me servirá de práctica.

Con un abrazo fuerte que expresaba mil sentimientos, Jackson envolvió a JooHeon y suspiró de alivio. -Gracias. No sabes lo contento que estoy por tenerte conmigo, eres el mejor... Te amo.

-Yo también te amo -murmuró Lee con su corazón palpitando rápidamente.

Talló sus ojos y tomó aire con pesadez, JooHeon había estado recordando sus tiempos con Jackson en todo el transcurso de vuelta a la casa, la presencia de ChangKyun no había conseguido distraerlo de lo que sucedió. Nada podía, en realidad. Fue cercano a Jackson durante muchos años, habían sido novios en algún punto, también, prácticamente todos sus conocimientos habían sido desarrollados al lado del otro, por lo que le era imposible mantenerse estable ahora; era como si una parte importante de su vida hubiera desaparecido.

Suspirando, apretó el dije de su collar entre su mano (aquél también había sido un regalo de Jackson cuando habían estado juntos, solía llevarlo siempre consigo, sin importar qué); la puerta de su laboratorio fue abierta entonces y el rubio se puso alerta, actuando como si no estuviera sucediendo nada. KiHyun salió de ahí y lo vio con un destello de lástima antes de acercarse y plantarse delante suyo.

W-ire  [JooKyun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora