Love is... pain? | VAUSEMAN 🖤

Capítulo 25

Piper

-Estoy obligada Pipes...

Escuché como su voz se rompía de a poco, y mi corazón con ella. Estaba furiosa, había pensado en las muchas cosas malas. No puede ser eso intenté no pensar en lo peor, me quedé inmóvil esperando a que hablara. Lo que más quería en el mundo era tomarla entre mis brazos y consolarla pero debía seguir haciendo presión hasta que hablara.

Observé como su cara se endurecía, como se tensaba su cuerpo y alzaba la mirada hasta encontrarse con la mía, su esclerótida estaba roja como si su presión arterial estuviese elevada

-A qué estas obligada Alex? Escúpelo ya. Qué hay en esta caja?.- dije mientras me acercaba más al maletín

-Maldición Piper, no!- la pelinegra me empujó lejos del maletín y mi instinto fue darle una gran bofetada. Me arrepentí al segundo siguiente, pero ella me miraba con la boca abierta y acariciando su mejilla

-Lo siento Alex yo...

-Cállate Piper.- la pelinegra me tomó por la muñeca obligando a sentarme en el mueble que daba al ventanal

-Me duele Alex

-Te he dicho que te calles Piper, tu solo dedícate a escuchar.- me regañó.

Alex no se sentó, empezó a caminar desesperadamente por la habitación, no habló hasta que pasaron aproximadamente cinco minutos.

-Si después de esto quieres irte, no te detendré y tampoco juzgaré tu decisión Piper. Si para ti ha sido difícil esta semana, para mí ha sido el maldito infierno. El día que tuve la junta no era un proveedor cualquiera, era una máscara para el infeliz de Kubra.

Mi cuerpo se tensó por completo al escuchar su nombre y entonces me sentí como una desgraciada por haberla presionado tanto.

-Me pidió un favor, al que obviamente no me puedo negar. Tengo que llevar esto a Suiza, debo pasar desapercibido. Te he pedido que no toques nada porque si algo sale mal tú te verás implicada y eso jamás me lo perdonaría. Lo que hay aquí.- dijo tomando la caja entre sus manos.- es droga Piper. Alguna vez has visto el estado natural de la heroína?- me preguntó

Negué con la cabeza, ella destapó la caja y saco de ella un sobre mediano de polvo blanco.

-La heroína es derivada de la morfina, y esta.- dijo observando y oliendo el empaque.- es de la buena así que supongo que es alguien importante. La blanca como esta es la de mayor calidad mientras que la marrón es la de peor calidad pero es más tóxica.

Abrí mucho los ojos y ella siguió hablando.

-Se todo esto porque ese era mi trabajo Piper, saber cosas, hacer las cosas bien. Y de alguna manera siempre estaré en deuda con Kubra a pesar que le he demostrado mi descontento con esta mierda.- dijo lanzando el empaque dentro de la maleta.- Nunca creí que iba a estar de nuevo metida en esto, pero él nunca me ha perdido el rastro. Lo que te pido es una cosa Piper: confía en mí, sé lo que hago, no puedo negar que tengo miedo, que no he dormido bien, que la ansiedad me está matando, que no tengo apetito de nada e incluso estuve a punto de esnifar un poco de esa mierda.

Me levanté del mueble queriendo caminar hacia el ventanal.

-Siéntate Piper, aún no he terminado!- dijo alzando la voz. Me regresé a mi lugar y me senté.- No quiero perderte Pipes, no por esto. Desearía que esto no estuviese pasando ahora, la única razón por la que he estado ausente es porque no quería preocuparte ni implicarte en nada espero que me entiendas, yo te amo como jamás he querido, quiero estar contigo como nunca había querido ni necesitado la compañía de alguien. Me marcaste Piper, es algo que jamás se va a borrar ni de mi mente, ni de mi corazón, ni de mi cuerpo.