CAPÍTULO 48

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Alex

Que si algún día Piper dejará de sorprenderme? No lo sé, los siguientes cinco días en Sri Lanka se resumieron en broncear nuestros cuerpos en la playa, deleitarnos de la exquisita gastronomía y conocer los esplendorosos patrimonios culturales. Cada que llegábamos al hotel los besos tiernos terminaban en jadeos, gemidos, posiciones sexuales nuevas y el uso de algún accesorio o juguete sexual; terminábamos acurrucadas y agotadas después de múltiples orgasmos.

Nos encontrábamos en el aeropuerto, el vuelo tenía una hora de regreso pero a habían anunciado su llegada. La rubia descansaba su cabeza en mi hombro y empezaba a roncar. Me reí bajito recordando que no habíamos dormido ni un poco gracias a los inventos de mi insaciable esposa.

**INICIO DEL FLASHBACK**

-Piper...- un dildo de tamaño considerable se introducía dentro de mí mientras que la lengua de mi esposa jugaba con mi clítoris hinchado. Me encontraba totalmente inmovilizada de brazos y pies, ella vestía un precioso conjunto de lencería rosa pálido que le quedaba a la perfección.

-Te gusta bebé?- hablaba mientras no dejaba de moverse dentro de mí y mucho menos descuidar mi centro que estaba bastante hinchado y tenso.- Respóndeme Alex...

-Me encanta amor... Dios... eres tan... Oh...- no podía articular muchas palabras, me costaba demasiado concentrarme en algo más que no fuese la sensación invasiva de aquel juguete dentro de mí.

-Dilo Al...

-Eres muy... caliente bebé, te amo!- no podía aguantar mucho más. Mis ojos estaban apretados y lo siguiente que sentí que los dientes de mi esposa mordisqueando mi pezón, jugó con ellos un rato mientras mis paredes se contraían de a poco, subió hasta mi cuello para chupar y lamer toda el área de mi clavícula.

-Tú eres la mujer más caliente del planeta amor...- seguía lamiendo ahora por la zona de mi yugular.- Me haces pensar en tantas cosas para hacerte... jamás tendré suficiente de tí.- Besaba mi mentón y lamía todo el contorno de mi mandíbula.

-Joder Pipes!...- me entregué a el tercer orgasmo seguido mientras mi ahora insaciable chica bebía la enorme cantidad de fluidos que desbordaban de mí

**FIN DEL FLASHBACK**

Pensar en aquello llevaba a mi cuerpo a una respuesta inmediata, sentí mis mejillas sonrojarse y me regañé para mis adentros. Me removí en el asiento para que mi rubia se despertara, un par de ojos azules en calma me miraron y como cada vez que me los topaba, me hechizaron y enamoraron un poco más.

-Eres una dormilona bebé- le dije mientras besaba su frente.

-Mi esposa no me da clemencia por las noches... creo que debo acudir a un especialista...- me miraba pícara.

-Por qué?- le pregunté alzando una ceja

-Porque tampoco quiero que me deje descansar.- confesó entre risitas.- No quiero que se acaben estos maravillosos días...- refutó entre bostezos

-Pues aprovecha mientras puedas bebé... ya debemos abordar a nuestro próximo destino.- me levanté jalándola por la muñeca y como si le hubiesen dado una dosis de energía se levantó plantándome un beso en los labios.

Dos horas y medias de vuelo se pasaron como cinco minutos, el sueño nos ganó apenas nos sentamos en nuestras butacas, no tuvimos chance de comer ni beber absolutamente nada. Nuestro próximo destino era parte del regalo de Kubra, el sobre incluía dos boletos con todo incluido para Maldivas, mantuve el destino en secreto, porque era parte de la fantasía para Pipes; me encantaba ver sus ojos emocionados cual niña pequeña y su andar acelerado por saber a qué punto del globo terráqueo nos dirigiríamos ahora.

Love is... pain?  | VAUSEMAN 🖤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora