Narra Alison.
—Eh… claro hoy a las 5:30— le conteste a Charlie, que hace unos minutos me había invitado para comer algo, al principio me sentí incomoda pero tenía unas ganas de conocerlo mejor y saber más de él y claro la curiosidad me gano y aquí me encuentro aceptando su invitación.
—¿Qué te parece si nos juntamos en el Starbucks de la calle Broadway? — gire la cabeza para mirar el reloj de la pared de mi cuarto, exactamente tenía una hora y media para arreglarme y salir.
—Por mi está bien, entonces hay nos vemos— dije colgando luego de despedirnos, deje mi celular cargando mientras iba a ponerme mis zapatos ya que solo me encontraba en calcetines.
—¡Mama! —dije gritando desde la puerta de mi habitación, como toda una señorita.
—¿Qué? —me respondió de la misma forma.
—Saldré en una hora, para que sepas—dije poniéndome con dificultan un Zapato mientras trataba de mantener el equilibrio.
—De acuerdo, pero ve con cuidado y a la vuelta necesito que me traigas unas cosas de la tienda—
—¡Oka! — trate de arreglar mi cabello pero no había caso con el entonces decidí hacerme una coleta alta, me puse brillo en los labios y encontré que ya estaba lista no me quería arreglar mucho si solo iba a ver a Charlie.
Me senté en la cama mandando mensaje a los chicos y viendo mi Instagram tratando de hacer la hora, luego cuando ya habían pasado unos minutos tome un bolso y eche mi celular y unos audífonos.
—Ya ma’ me voy— me apoye en la isla mientras mi mamá me entregaba dinero y una pequeña lista.
—No llegues tan tarde, y no gastes más de la cuenta, cuídate— dijo besando mi frente yo le devolví el beso en la mejilla y salí a la parada del autobús.
(…)
—Hola, siento la demora. El tráfico— salude a Charlie por la culpa de todo el tráfico había llegado 10 minutos tardes pero parece que a él no le importaba ya que me recibió muy alegre.
—Descuida mi princesa ¿no te importa que ya allá pedido? —dijo mientras nos sentábamos en una mesa al lado de la ventana, dejando a la vista el millar de personas que pasaban apresuradas a su respectivo destino.
—Claro que no, con tal de que sea bueno no importa— justo en ese momento llega una chica chaparrita a dejarnos nuestras orden.
—Disculpe, aquí tiene su pedido— dijo entregándonos nuestros platos y nuestro café, para luego retirarse.
—Dios, pastel de Lemon Cheesecake y Iced Café Mocha— diablos ya podía sentir el sabor de ese exquisito sabor en mi boca.
—Tus preferidos—me respondió Charlie mientras me miraba tomar una cucharada de mi pastel, cerré los ojos al sentir el rico sabor de la crema de limón en mi paladar.
—¿Cómo lo sabias? —pregunte levantando la vista de mi plato y mirando el suyo.
—Cafè Americano y Tarta de Moras— dije sonriendo antes de que me contestara mientras apuntaba a su plato, el bajo la vista y asintió divertido.
—Es mi preferido— dijo tomando un trago de su café
—sí, igual que mi…— y en ese segundo me quede callada mientras una imagen de yo a los 7años junto a mi padre sentados en una cafetería comiendo estos mismos productos, me acuerdo que siempre los domingos me invitaba a desayunar, pero todo se acabó una vez que se fue con su maldita secretaria.
—Que tu padre— Charlie termino la frase ya que yo me había quedado callada mientras mi memoria volvía al pasado.
—Sí, mi padre— respondí con un cierto tono de fastidio y una pisca de odio.
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Mi nuevo amor...
Teen Fiction-sabes tienes unas lindas piernas- dice mirándome de arriba abajo -pues si y sabes para que son buenas?- digo con una sonrisa sexy -no hermosa, para que sirven?- dice acercándose a mi lentamente con una sonrisa -para patear las pelotas de los idi...