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Cuando todos cerraron los ojos, se escuchó un disparo. Sus corazones pararon a la vez, temieron que el señor Lee haya matado a alguno.

Pero no fue así.

El disparo que sonó era del arma de la señora Lee, quien le disparó en una pierna a su esposo.

Se escuchó un quejido, pero no muy fuerte. Los guardaespaldas murieron por los cuatro balazos que les dio la mujer.

– ¡Corran!– Gritó ella, le hicieron caso, agarraron a Felix y Jeongin ayudó a Minho.

Pararon en la entrada porque el australiano se dio vuelta con todas las fuerzas posibles.

– Mamá...– fue lo único que pudo decir después de ver a su madre llenarse de balas en el pecho, su padre era el que le disparaba.

Tomaron al rubio y se lo llevaron, quien lloraba desconsoladamente, por suerte no había nadie en esa calle.

Chan casi los atropella con el auto, en vez de salvarlos, los mataba, pero no.

– ¡Chicos!– Bajó del auto y se dispuso a ayudar a Felix, luego a Minho. Todos subieron al vehículo e ignoraron los disparos que pasaban cerca de este.– Ya me explican lo que está pasando.

Woojin trató de calmarse y le contó todo lo que pasó, Minho le habló sobre los problemas que tenía con su familia mientras abrazaba al pequeño Lee.

El aussie mayor comenzó a derramar un par de lágrimas, no sabía que su pequeño hermano sufría todo eso, le hubiese gustado enterarse antes de que todos estén en peligro.

– ¿Y Seungmin, Changbin y Hyunjin?– Preguntó Han.

– Esperan en casa con una merienda, están preocupados, llamaron a un médico para que atienda a Felix y Minho. No iremos a un hospital ya que puede ser peligroso.

Chris era un buen líder, todos estaban tan a gusto con él y el grupo, el cual fue creado por Chan.

Los nueve se querían, aunque hayan tenido sus discusiones.

Jeongin sonrió, tomó la mano de Chan y se sintió bien. Nada le hace más feliz que ver a todos a salvo, o por ese corto momento.

Estaban a una cuadra de la casa de Hyunjin, la cual era la más espaciosa para que estén todos, y la rueda del vehículo se pinchó, causando que casi choquen con un camión, pero el auto dió un par de vueltas debido a un golpe que le dió el vehículo contrario.

Minho protegió todo lo que pudo a Felix, Chan a Jeongin y Woojin a Jisung.

El auto estaba dado vuelta, ellos estaban cabeza abajo. Notó por el espejo retrovisor que un hombre se acercaba con un arma y una pierna herida.

– Corran ya mismo, no miren atrás ni aunque sus vidas dependan de ello.– Dijo Chris, le hicieron caso.

Salieron por la ventana contraria a donde venía el hombre y corrieron lo más rápido que pudieron, menos Jeongin.

– No voy a dejarte.

– Pequeño, te amo, corre, iré detrás de ti.– Le acarició la mejilla y lo empujó afuera del auto.

Pero Chan no iba a correr, iba a enfrentar al señor Lee aunque le cueste la vida.

Rain [MinLix] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora