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''¿Pasan que cosas, no?''

Harry.

Tenía dolor de cabeza.

Después de hacerle comprender a Melody que el hijo que llevaba Heather era nuestro, finalmente había entendido. Realmente deseaba que no hubiera pasado eso, pero ya no había vuelta atrás. Iba a tener un hijo con Heather y no con Melody. ¡Ni siquiera era una maldita inseminación!

—Un hijo Harry... Vamos a tener a un pequeño o pequeña rondar por nuestro hogar —comentó mientras se maquillaba en el tocador del cuarto—. ¿No es genial? —preguntó.

—Claro... —murmuré con un tanto de aflicción.

—¿Qué sucede Boo? —apodó con ternura mientras me miraba por el espejo—. ¿Te sientes bien?

Pasé saliva por mi garganta con algo de dificultad.

—Yo...

—Lo sabía —interrumpió—. Tú no querías hijos —habló con molestia.

—Melody... amor —digo—. No es eso, también la noticia me parece buena —me acerqué hasta ella, presionando sus hombros con mis manos.

—¿De verdad? —preguntó ladeando su rostro para mirarme—. No te veo muy feliz...

—Lo estoy cariño, tan solo es un sorpresa también para mí —dije besando su mejilla—. Tendremos un pequeño en unos meses más.

Y ni siquiera estamos casados.

¿No es genial?

—Si —sonríe—. Pensé que no resultaría.

—Un milagro... —susurré.

Sentí la incomodidad envolverme de pronto, así que me alejé de su cuerpo mientras me lanzaba sobre el colchón, sin mirarla. Tomé del móvil y observé un mensaje de Jeffrey, indicando que deseaba hablar conmigo cuanto antes. Así que tuve la mejor escusa para abandonar la casa sin demasiado arrepentimiento.

Jeff me miró con cara de pocos amigos, sin embargo, mantuvo su profesionalidad en todo momento. Él, verdaderamente no deseaba que yo fuera papá tan joven. Además, estaba el hecho de que aún no me casaba y, mi carrera como cantante, recién estaba comenzando.

—Aún me sorprende tu gran noticia —ironizó—. No puedo creer lo que acaba de suceder Harry. ¿Qué haremos?

Apreté mis labios.

—Iba a terminar con Melody y ese contrato, pero... —moví el anillo de mi mano—. Ya sabes el resto de la historia.

—Harry... —se sentó a mi lado—. Pensé que actuabas con la cabeza, no con tu —apuntó a mi zona de la entrepierna—. ¿Al menos la chica es de confianza?

Asentí brevemente mientras pensaba en todo.

—¡Heeey! —oímos saludar cuando se abrió la puerta del estudio—. ¿Cómo están? ¿Por qué las caras largas? ¿Quién se murió? —bombardeó con preguntas Ryan al ingresar.

Solté una risa.

—Nadie, solo estábamos extrañándolos —les digo con una pequeña sonrisa mientras saludo a Ryan y Jonathan—. ¿Traen comida?

—Sí, bueno, algo —mostró la bolsa en su mano Ryan—. Así que... tenemos esta pequeña reunión —se sentó en una de las sillas desocupadas—. ¿Haremos música?

—Harry se animó en hacer música, así que quiere una banda —sonrió palmeando mi espalda con suavidad—. Estamos viendo cómo le irá.

—¡Genial amigo! —dijo en voz alta Ryan—. Después de One direction, creo que serás la bomba.

Vientre de alquiler [H.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora