Vientre de alquiler [H.S]

23

''La verdad''

Harry.

—Deberías contarle —oí antes de aparecer frente a ellas, haciendo que me ocultase detrás de la pared y continuara escuchando.

—Aún no...

Heather soltó un resoplido frustrado.

—Debes hacerlo... Se molestará si no lo haces —le advirtió.

—Heather... —arrastró su nombre con cansancio—. Está bien, pero necesito un poco más de tiempo. 

Arrugué mi entrecejo.

No comprendía de lo que estaban hablando y de a quién debía decirle algo, pero muy dentro de mí, presentía que era algo que tenía que ver conmigo. Aún así, no quise intervenir y preferí seguir escuchando, queriendo saber un poco más de aquella conversación. Sin embargo, ambas quedaron en un silencio, lo que me hizo aparecer y verlas intercambiar miradas con incomodidad.

—¿Está todo bien? —interrogué.

Heather observó a Melody, pero cuando esta desvió su mirada, soltó un nuevo resoplido y asintió con su cabeza. No quise insistir, así que solo procedí a fingir no haber escuchado nada.

Con Melody, aún las cosas se encontraban algo tensas y frías. Desde que habíamos terminado, solo nos comunicábamos para saber sobre el bebé. Y, aunque deseaba ser esa clase de persona que no le importaba los sentimientos de alguien, no podía lograr serlo; Melody había sido una persona importante.

—Ya está todo listo para entrar a la ecografía —comenté mientras retomaba el paso hacia la salita de espera—. Hablé con la secretaria. Avisó nuestra llegada.

Melody asintió, sin embargo, no avanzó. Se mantuvo de pie frente mío mientras Heather pasaba por mi lado, observándome de reojo para luego proceder a ingresar a la consulta, en donde ya la puerta se encontraba abierta para recibirnos. 

Miré a mi ex novia con duda.

—Yo... Me gustaría hablar contigo —suspiró. 

Estaba nerviosa. 

—¿Quieres hablar en este momento? —pregunté. 

Negó con su cabeza hacia los lados. 

—No, pero me gustaría hacerlo después de esto. Solo me gustaría... conversar —dijo con algo de dificultad—. Sé que no hemos tenido un buen periodo... pero desearía que volviéramos a tener una amistad, si es que me lo permites...

Sonreí. 

—Bien, hablaremos, pero necesitamos entrar a esta consulta —le indiqué con mi mano—. Vamos...

Cuando ingresamos, Heather ya se encontraba sobre la camilla con su abdomen descubierto, dejando relucir lo abultado que estaba ante el embarazo. Ella me dio una sonrisa incómoda y desvió su vista hacia el médico que se encontraba preparando el aparato para ver la ecografía y, cuando nos observó, nos alentó a posicionarnos cerca del lugar para mirar mejor. 

Esto, se sentía igual a aquella vez cuando escuchamos los primeros latidos. 

—¿Están listos? —interrogó el médico mientras dejaba un liquido sobre la panza de Heather, esparciéndolo con una maquinita pequeña, logrando que soltara unos cuantos suspiros por lo frío que pudiera encontrarse.