La casa estaba sola, Joaco, aún no llegaba, así que Ian y yo nos pusimos a hacer la cena.
Todo iba bien hasta que...
-Huele feo -dijo el pequeño apuntando al horno.
Abrí los ojos recordando el pollo.
-¡Mierda! -tome unos guantes de cocina y saque la charola con el pollo que había puesto dentro, estaba quemado y ya era muy tarde como para salir a comprar algo- Bueno, tal vez podemos comer las partes menos quemadas -pique con el tenedor el pollo quemado.
-¿Qué es mierda? -pregunto derrepente haciéndome ahogar con mi propia saliva.
-¿De qué hablas?.
-Es que tú dijiste mierda hace un momento.
-Bueno es..... Ah... Es... Es algo que no debes decir nunca enfrente de Joaquín, eso es -le explique mientras el solo me miraba sin entender.
-¿Es malo? -ladeo la cabeza en señal de duda.
-Sí, y no lo deberías repetir.
-¿Entonces por qué tú lo decías?.
Rodé los ojos con fastidio.
-Porque soy grande, por eso, ahora deja de hablar y...
-Mierda -repitió.
-¡No!, eso no se dice.
-¿Por qué no?.
-Porque si Joaquín, te escucha seguro me manda al sillón -explique agotando mi paciencia.
-Mierda, mierda, mierda -repitió.
Tome mis rizos entre mis manos con desesperación y enojo. Por esta razón no estoy listo para ser padre, no soy paciente con los niños.
La puerta se abrió dejando ver a mi chiquito bonito con una enorme corbata al rededor de su hermoso cuello y una chamarra gris con un fajo al rededor de su cintura.
Mire a Ian, y este bajo de la mesa corriendo hacia Joaquín, abrazo su pierna y luego sonrió.
-Hola cariño -acaricio su cabecita lentamente.
-Hola -sonrió feliz.
-Lamento llegar tarde, había mucho trafico.
-¿Por qué no me llamaste?, pude haber ido por ti.
-Quería que estuvieras un rato con Ian -cargo al pequeño y este le dijo algo al oído- ¿Por qué no han cenado? -pregunto.
-Pues... Intente hacer pollo al horno, pero se quemó -sonreí tímido cuando camino a la cocina mirando el pollo sobre la mesa.
Escuche como se reía fuertemente. Se está burlando.
Frunci el ceño mirándolo enojado.
-No te rías, al menos lo intente.
Se acercó a mí dejando un beso en mi mejilla.
-Sí, pero meda risa porque recordé la vez que quisiste hacer quesadillas en nuestra cita y se te quemaron. Bueno, ustedes esperen, voy a pedir algo para que no mueran de hambre -dijo burlon tomado su celular.
-¿No es muy tarde para pedir comida?
-En la pizzeria aun esta abierto.
Asentí, y el pequeño se sento esperando con sus manitas sobre la mesa.
-¿Por qué no vas con Emilio, y ven una película mientras esperan? -frunció el ceño mirándolo mal.
-Pero...
-Emilio -regaño antes de que pudiera reprochar algo.
-Bien -me resigne girando en mis talones para caminar a la sala- ¿Qué película quieres ver? -el niño miró la televisión mientras yo ponía Netflix.
-No sé, yo casi nunca veía televisión pero...
-¿Pero qué? -pregunte cuando se quedó callado mirando el piso.
-Pero mamá me dejaba verla en casa -susurro lo último y yo comprendi.
Me quedé un rato en silencio pensando en cómo es que ese niño llegó a la calle. Desde que esta aquí no nos ha contado nada al respecto y no me imagino cuanto tiempo paso para que nosotros lo encontraramos y todo lo que aguanto en las frías calles.
-Podemos ver... Lilo y Stitch, esa es la película favorita de, Joaquín -mencioné intentando relajar el ambiente que se creó.
Asintio sentándose en el sillón al lado mío, tapándose con una cobija.
-Ya pedí la pizza, en un rato llega -Joaco, se sento junto a Ian, dejándome a mi en la orilla y al pequeño en medio- Yeii, amo esa película -sonrió feliz mirando la gran pantalla.
-Lo sé amor.
Pasamos viendo la película hasta que la pizza llegó, no nos habíamos desvelado tanto desde que comenze a trabajar en la disquera, vimos casi dos películas más y ni siquiera me di cuenta cuando ya eran las 2am y yo le hacía avioncito al pequeño, quien reía a carcajadas mientras daba vueltas.
Me sentía bien estando así y la felicidad en la carita de Joaco, se ve a kilómetros, adoro vero feliz.
Rato después nos encontrabamos mirando Buscando a Nemo, mi bebé sonreia y cantaba las canciones del pez azul, yo solo lo miraba como tonto, era como si cada vez que sonreia me enamoraba más.
El pequeño se durmió recargado en el pecho de Joaquín, mientras este miraba la película.
-¿Quieres que lo lleve arriba?.
-Gracias, Emi -sonrió estirando su mano hasta mi cabello para acariciarlo.
-¿Por qué? -cerré los ojos sintiendo sus caricias bajar a mi mejilla y cuello.
-Por pasar tiempo con nosotros, hace mucho que no hacíamos esto, y siempre éramos tú y yo, pero esta vez fue diferente y de verdad me hizo feliz.
Eso fue todo, sonreí y lo bese, el pequeño estaba bajo nosotros y solo mordí su labio para después separarme.
-Dámelo, lo llevare arriba -estiro sus brazos para darmelo, lo sostuve bien y lo lleve arriba.
Me puse a pensar después de dejar al pequeño en la cama y arroparlo, que Joaquín de verdad quiere una familia, y yo aún estoy indeciso, no me siento listo y... No quiero lastimaron al decirle que un hijo no está en misplanes por ahora.
Holi 🤗 hermosas personas que leen este fic.
¡Sigo viva! Aún no he muerto.
¿Me tarde mucho en actualizar?, perdonen si fue así, pero estuve muuuuy ocupada.
Atte: Queen
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Por Accidente (Emiliaco)
FanfictionEmilio, un famoso cantante que junto a su novio Joaquín, por accidente se convierten en padres de un niño que llegó a sus vidas de manera inesperada. #inició: 22 de septiembre del 2019 #termino: 25 de Noviembre del 2020