Capítulo 61

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Estaba mareada, quería pellizcarme por que sin duda esta era la pesadilla más realista de mi vida. Y lo hice, me pellizqué pero dolía, todo era verdad.

Mi hermano no era mi hermano.

Mi padre no era mi padre.

Mi hermano me odiaba.

Mi hermano estuvo apunto de matarme.

Mi hermano nunca fue el que me rescató.

Él jugó con mis recuerdos y los moldeó a su antojo para que pudiera vivir con él juntos como hermanos felices.

Mi garganta estaba cerrada, sentía como si una piedra se encontrara atascada dentro de mí, mis ojos ardían sentía que iba a quedarme sin lágrimas en algún momento, todo era tan confuso y real que dolía, mi corazón dolía. Jamas creí que me guardaran algo tan… tan oscuro y horrible.

Me dejé caer en el sillón tratando de procesar todo, las lágrimas no paraban de rodar por mis mejillas y mi vista era borrosa a su causa.

—Como pudiste Alex— susurré tan bajo que no supe como pudo escucharme.

—Perdóname, yo…— se arrodilló a un lado de mí, trató de tomar mi mano pero la quité antes de que pudiera hacerlo.

—¡Cómo pudiste vivir durante este tiempo conmigo, mirándome a los ojos y mentirme de esa manera!— grité, llevándome una mano al pecho.

Sentía que mi corazón se rompía y si apretaba mi pecho lo suficiente al menos las piezas se quedarían en su lugar.

—¡Cómo pudiste mirarme, cuando las pesadillas me despertaban en la noche y llegabas a contarme un cuento! Tú sabes por todo lo que he pasado y tú… tú…, tú sólo estas ahí— Limpié mi nariz con el dorso de mi mano.

No me importaba quienes miraran mi reacción ni nada, sólo quería hallarle sentido a todo por que por más que quisiera no podía.

—Solo queríamos lo mejor para ti.

—¿Para mí? ¿O para ti Alex?— me reí a pesar de todas las lágrimas, —¡No te confundas, lo hiciste por ti, por que eres un jodido egoísta que solo pensaste en quedar intacto de todo esto! Se te hizo más fácil jugar con mi mente y decirme que los momentos que tenía con Jahir en realidad eras tú, a que tuvieras los pantalones para decirme que me odiabas lo suficiente como para tratar de matarme.

Un par de lágrimas cayeron pero las limpió rápidamente, ¿para qué lo hacía?
Ya no le creía nada, todo era una farsa con él siempre lo había sido.

—Eres mi hermana, te quiero tanto. Por eso te conté desde el inicio, cuando ibas a nacer, siempre te quise Hailey.— habló con voz ronca.

Alex era muy buen actor lo había comprobado todos estos años.

—¡No soy tu hermana Alex! Me alegro tanto de no ser hija de tu padre no podría soportarlo. Lo odio tanto, los odio a ambos.

—No me odias, se que…— su mano tocó mi mejilla y eso no hizo otra cosa que enfrurecerme

Tomé su muñeca y la empujé con asco, —Te odio Alex, pero descuida yo saldré de esto— limpié mis lágrimas con coraje —Yo saldré de esto, me recuperaré pero tu vivirás por el resto de tu vida con la culpa y estarás sólo, por que eres una mierda Alex. Ibas a matarme cuando yo no tenía la culpa de nada.

—Yo tampoco tenía la culpa— dijo desesperado

—La tuviste cuando escogiste creerle al hijo de puta de Alex— grité —Lo preferiste a él antes que a mí y sí, si tienes la culpa. Eres el culpable de todas mis desgracias y es por eso que nunca voy a perdonarte.

~Notas para ti~ [COMPLETA☀️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora