Capítulo LXIX ( se nos olvidó el cautiverio )

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Narrador
Nuestros protagonistas a pesar de estar encerrados, decidieron olvidar  su cautiverio a través de bromas y juegos......

Si Vermont supiera que los presos que tenía se divertían, se volvería loco, porque él no toleraría que un Grimm avivara una llama de euforia y esperanza en su prisión de silenciosa y dura inseguridad, dolor y soledad......

Incluso, Grady hackeó la jaula, lo suficiente, para controlar las ilusiones virtuales de esta......

Grady: bien, no tengo suficiente energía para abrir las puertas, pero al menos puedo controlar las ilusiones de la jaula. Ahora, díganme a "dónde" quieren ir ?

Bryan: a un prostíbulo. *dijo sin pelos en la lengua*

Grady: tú, bien sabes que si no te portas bien, tendré que castigarte.

Bryan: eso me agradaría.

Zamba: agh! Váyanse a un hotel!

Max: sí, es verdad, que embarazoso!!!

Grady: Bryan!!! *gritó sonrojado*

Bryan: oye, estoy siendo sincero.

Yuri: no tienes que ser tan sincero, Bryan.

Bryan: pfft! Como quieras.

Will: solo pon una fiesta.

Grady: deseo concedido!

Y Grady hizo que la jaula se viera como un enorme salón de fiestas, por lo que nuestros protagonistas empezaron a bailar al son de una música que Grady programó en ese instante.........

Y mientras, ellos bailaban en aquella jaula digital con aspecto de salón de fiestas, Vermont los llevó por España, hasta los límites de Francia, luego pasaron a Luxemburgo y por último llegaron al destino donde Vermont planeaba someterlos a pruebas con tal de que le den la información que necesitan para encontrar lo que ellos querían, la capital de la cerveza, los bosques espesos, los castillos encantados, las leyendas y el hogar de los cuentos de los Hermanos Wilhelm y Jacob Grimm........

El país de Alemania........

Vermont: por fin! Las campiñas alemanas!

En su momento de ver el panorama, un hombre de traje verde lima oscuro con sombrero del mismo color y una insignia dorada con la bandera de Alemania en ella, se acercó al camión con una expresión algo molesta.......

Vermont al ver a este hombre, decidió preguntar que pasaba....

Vermont: ejem! Lo puedo ayudar ?

Policía.A: Guten Tag, Herr...... señor, soy de la policía de la Federación Alemana y vengo a asegurarme de que no se desvíe del camino a Berlín.

Vermont: Guten Tag, Herr.....Oficial, yo no me dirijo a la capital, tengo que tomar el rumbo hacia Gengenbach.

Policía.A: lo siento, pero no puede tomar el paso a Gengenbach, ahora está  en cuarentena.

Vermont: por qué motivo ?!!

Policía.A: por una sucesión de sangrientos asesinatos o para especificar infanticidios.

Vermont: pero, nosotros no traemos niños.

Policía.A: oh! Entiendo, bien vayan, pero tengan cuidado.

Vermont: me podría comentar más de esos infanticidios.

Policía.A: afortunadamente, solo han muerte 3 niños, pero todavía no hemos atrapado al criminal o bestia responsable de estas tristes perdidas.

La Leyenda de los GrimmDonde viven las historias. Descúbrelo ahora