Prohibido Decir Te Quiero [TERMINADA | BORRADOR 2017]

Capítulo 61

Antes de comenzar, quiero dedicar este capítulo a las chicas del grupo de chat: Tamara, Elizabeth, Soledad, Winnifer, Luisa, Karolina y Adriana. Muchas gracias por su emoción chicas, me motivan a seguir haciendo lo que tanto amo. 

Grace

29 de abril de 2015

—Luces cansada —murmura Jared peinando un mechón de cabello fuera de mi rostro—. No me gusta verte así.

—Estoy bien, Jared —digo para calmarlo, y me alegra saber que, en la mayor parte mis palabras son sinceras—. Solo mis días se están volviendo pesados, pero sabemos que es lo normal.

—Odio que sea por mi culpa —veo que sus ojos grises se apagan un poco y hace una mueca de dolor cuando se acomoda mejor sobre la cama. Intento ayudarle acomodando con cuidado sus almohadas—. Odio tener a mis padres fuera de este estúpido cuarto de hospital y odio estar aquí encerrado, conectado a estas mangueras intravenosas.

—Vaya, ese es mucho odio Jared Danniels —comento a manera de broma y acaricio su mano—. Esto no es culpa tuya, y deberías saberlo. Es culpa del conductor ebrio que los chocó. Él fue el irresponsable que pudo matarlos y que huyó como un cobarde. Él es el culpable de que tus padres y todos los que los amamos estén allá afuera, él es el responsable de que Michael y tú estén en camas de hospital.

» Ese conductor es el criminal, Jared. Es quien debería estar aquí en este momento, o en la cárcel. No tú, no Michael. Él.

Hay un momento de silencio en el cual Jared solo me mira. Yo me siento extraña, no es como que hubiera elevado mi tono de voz o algo por el estilo, pero definitivamente me alteré un poquito. Toda esta frustración y estrés acumulado salió un poco gracias a ese monólogo.

—Y dices que yo soy el de mucho odio —habla entonces el ojigris y le veo sonreír de costado haciendo que me enamore de él una vez más.

—Nunca dije que odiara al sujeto, solo lo detesto y deseo que pague por lo que hizo.

Otro largo silencio. Solo siento su pulgar acariciar el dorso de mi mano. Disfruto de su compañía, disfruto que este aquí, vivo. El siguiente podrá ser un pensamiento de lo más atroz, y por supuesto que nunca lo compartiría en voz alta con nadie, pero... Me alivia que no haya sido él quien iba conduciendo. De cierta manera, las costillas fracturadas no son lo peor de la vida. Si él hubiese estado en el lugar de Michael... No sé cómo mi cordura hubiese podido mantenerse. No sé cómo Roger lo logró.

—¿Sabes que eres una persona maravillosa? Te amo por ello.

Sonrío de lado. Definitivamente no soy una persona maravillosa, menos sintiendo alivio por su situación comparada con la de Michael. Pero creo que no se me puede culpar. Veo a Anne, a los padres de Michael y se me rompe el corazón.

—Yo te amo más, deberías saberlo.

—Oh, no. ¿Ya hemos entrado a esa etapa cursi en donde decimos "No, yo te amo más" y "No, ¿cuelga tú primero"? ¿Por qué no me informaste?

—Que menso eres —debato, pero no evito reír. Él igual lo intenta, pero de inmediato hace esa mueca de dolor y su mano libre viaja a su costado.

Tres costillas rotas en el lado derecho, dos del lado izquierdo. Un corte cerca del nacimiento del cabello, uno más en el brazo izquierdo que requirió doce puntadas. Muchos magullones y raspones. Y, a pesar de todo eso, él sigue siendo endemoniadamente atractivo y una persona con un gran corazón. Dios, me saqué la lotería.