Prohibido Decir Te Quiero [TERMINADA | BORRADOR 2017]

Capítulo 9

Jared

26 de septiembre, 2014

Estoy conduciendo en dirección al apartamento de Grace. Vamos solo los dos en el vehículo ya que su amiga saldría tarde.
Cuando vi a Roger tan preocupado sobre quién llevaría a su prima decidí ofrecerme, esto me daba la oportunidad para hablar con Grace sobre nuestro encuentro.

Debo admitir que yo no pensaba hablar más con Grace. Suena cobarde y de cualquier chico cretino, pero no deseo tener problemas con mi mejor amigo. Y a pesar de eso soy sincero conmigo, siento atracción hacia Grace Cobiane, desde ese viernes en la disco sus labios me supieron bien, y luego del sábado sus largas piernas son algo de lo cual quiero volver a disfrutar.

Estamos todavía a unos diez minutos de su lugar, así que comenzaré a hablar ahora. Aclaro mi garganta para llamar su atención, pero qué acción más cliché.

-Michael te vio salir el sábado.

Comento, ella se gira a verme con sus ojos oscuros.
Abordar los temas con sutileza no es lo mío.

-¿Intuyó lo que sucedió?

Asiento simplemente, vaya que Michael intuyó lo que paso entre nosotros. En cuanto aparecí en la sala él golpeo mi brazo con fuerza y me grito algo sobre ser un idiota cabeza hueca.
Veo de reojo como ella suspira y acomoda su larga melena sobre su hombro.
Yo enrede los dedos en ese cabello.

-¿Le dirá a Roger?

Noto la preocupación en su tono de voz, no se si es por ella misma o por mi, incluso puede ser por Roger.
Entre mi primo y yo quedó claro que él no diría nada, y también le dije que no cometería otro pequeño desliz con la prima de nuestro hermano de la infancia. No con Grace Cobiane.

-Michael se mantendrá callado, lo prometo. -Grace vuelve a suspirar, las manos sobre su regazo juegan entre sí, el silencio se vuelve algo incómodo. - Disfruté lo que paso Grace, me gustó, y lo repetiría si no fueras quien eres.

Sin duda mis palabras le sorprenden, sus ojos se abren con sorpresa al escucharme. Voy llegando a su apartamento, estaciono enfrente y apago el motor. Todo esta en silencio y ella no me mira.
Tal vez fue atrevido lo que dije, pero es la verdad, y desde la reunión con su familia ella fue directa conmigo.

Al fin se gira, en sus labios pintados de algún tono de rosa que le viene bien juguetea una media sonrisa. La chica esta coqueteando, de eso me doy cuenta.

-¿Quieres pasar a tomar algo?

Su ceja se arquea. Vaya que quiero tomar algo, algo último de ella. Esto es algo peligroso y en silencio ha empezado un juego de quién caerá primero, y ese alguien será ella, aunque también estoy cayendo.

Acepto a la invitación y ambos entramos al lugar. Me sorprende un poco el leve desorden y el interesante diseño del lugar. Todo moderno en gama de negro y grises hasta el blanco con verde manzana y caoba. Es como una combinación de vidrio y otros materiales que se ven bien.

Grace quita unos suéteres del sillón y lo arroja a algún lugar del pasillo, me invita a sentar y desaparece en lo que supongo figura como cocina.
Es la primera vez que estoy en el sitio de una chica que no es nada mío, no se qué de toda la decoración proviene de ella. Su apartamento es más pequeño que el que comparto con mi primo, y aún así es cómodo.

La pelinegra regresa con lo que parece limonada, se sienta frente a mi y permanecemos en silencio mientras ambos bebemos un poco. Me gustaría saber que esta pensando.
Su semblante no refleja nada aparte de diversión, pero estoy seguro que guarda muchas cosas para sí misma. Nunca hubiera llegado a imaginar que ella es tan decidida y apasionada, aún la recuerdo un poco de años atrás, siempre dramatizando por libros y películas.