I'm fine *yoonmin*- segunda temporada

11º

  Yoongi
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Quería despejar mi mente, intente, intente hacerlo todo el tiempo. Pero solo conseguía torturarme más.

Si no era por Jimin era por... Dios! Como pude ser tan tonto? Como fui capaz de olvidar ese detalle tan grande?

Mi mente no dejaba de dar vueltas, pensando y pensando, el final de "eso".

Giraba en la silla del despacho.

Mi audición percibió el abrir de la puerta.

- ah!- exclamó asustada- Yoonie, cariño. Qué haces aquí?

Yo la mire, analizándola, tardando en dar una respuesta.

- quiero hablar- dije.

Ella asintió y se acercó a su escritorio para dejar su carpeta, se volvió a mi. Tomó asiento en el sillón que estaba de lado.

Yo me alce de mi puesto y me dirigí al mismo lugar, sentándome justo a un lado de ella.

Me miró expectante.

- y bien? Que sucede?- cuestionó prestando toda su atención en mi.

Me tome mi tiempo para hablar. Sobre todo por qué quería ver cada una de sus expresiones.

- Park Hyungsik- vociferé esas dos palabras y mi Omma se paralizó. Hubo un cambio, tremendamente notorio.

Mi Omma frunció su ceño, sus ojos tomaron un brillo de tristeza y nostalgia, su rostro se contrajo en tristeza.

- Park Hyungsik- repetí de nuevo- cuando, era un niño... tengo recuerdos vagos de ese señor, en mi memoria grabado como tu mejor amigo- comencé- fallecido hace 20 años. Lo recuerdas?- ella asintió débilmente, decaída- recientemente- tome una pausa para tragar una bocanada de aire- recientemente me entere que Park Hyungsik es padre de Park Jimin, mi novio- informe, ella se sorprendió por la información- Omma, se honesto conmigo, te lo suplico- la tome de las manos en forma de ruego, ella asintió- como murió tu mejor amigo?

Ella parpadeó varias veces, no creyendo mi cuestionamiento.

Se soltó de mi agarre y se levanto del sofá para ir a la puerta y cerrarla con seguro, y encaminándose al garrafón de agua.

- Yoongi, yo, no puedo...

- yo lo sé, lo sé todo. Pero quiero escucharlo de ti- la interrumpí- por favor, solo confírmamelo.

Ella se giro a verme.

- Min lo mató- lo dijo tan bajo que apenas lo pude percibir.

Esas palabras arrasaron con todo, haciendo que hubiera absoluto silencio, uno en donde solo se podía escuchar nuestras respiraciones.

No emití ningún otro tipo de sonido.

Mi Omma se sentó de nuevo en donde estaba.

- lo se- vocifere en voz baja para no romper el ambiente- estaba ahí- solté.

Instintivamente Taeyeon alzó la vista hasta mi, con los ojos bañados en terror.