Silencio (pausada/cancelada)

13

Con cuidado de no lastimarla, Alastair la ayuda a pasarse de la cama a la silla de ruedas... cosa que fue muy complicada ya que ella se rehúsa multiples veces a ceder... insistiendo de manera silenciosa -y algunas quejas- de que podía caminar... pero siempre caía.

Alastair empujaba la silla siempre atento a los movimientos de su Luna. La servidumbre se limitaba a reverenciar y ha no establecer contacto visual con la pareja. Llegaron al ascensor que se había instalado en aquella mansión hace algunos años... para su hermana de -ahora- catorce años. Al llegar a la planta principal, las rejas doradas se abrieron y Alastair empujo para avanzar.

El llegar al comedor, pudo visualizar a varias personas que en ese momento estaban almorzando... su hermano Dennady, su hermana Nesrin, su madre  y alguien que no veía desde hace ya tiempo... su abuelo... quien observo curioso a la joven que estaba en silla de ruedas.

-Hijo.- hablo su madre... Meredith.- Como sigue la niña?.

Hace referencia a la joven peliplateada que aparentemente llamo la atención de su abuelo. Alastair mira a su su hermano, quien inmediatamente se levanta para retirar una de las sillas... dejando el espacio libre para la silla de la joven. El la acomoda y ella permanece sumisa.

-Esta mejor...- responde sentándose a su lado.

-Eso me alegra mucho, Alastair.- sonríe.- Le pedí a la cocinera que preparara algo liviano para ella...

-Bien.- observo a su abuelo con indiferencia.- Abuelo, que te trae por aquí.

-Quise visitar a mi hija, a mis nietos... ¿esta mal que venga a visitarlos?.- dijo con aquel tono de voz manipulador que le caracterizaba.

-No me molesta, solo el hecho de que no nos avisaste con anticipacion.- dijo antes de que la comida llegara.

Cada persona tenía el mismo platillo pero con diferentes agregados, excepto Alastair... quien ya se había alimentado con anterioridad al estar cuidando de ella, además de que tenía que ayudarla... ya que se le hacia muy difícil comer sin que las manos le temblaran debido a la debilidad y falta de nutrientes.

-Quien es ella?.- pregunta el hombre curioso. Haciendo que... tanto Dennady como Alastair se tensaran.

-No es nadie que te importe.- respondió agresiva Meredith... ella tenía sus razones para su comportamiento.- No deberías preguntar cosas que no son de tu incumbencia.

-Hija, no deberías responderme así. Solo hice una pregunta.- insistió.

-Pregunta incorrecta, respuesta incorrecta.- murmuró la joven peliplateada. Pero el hombre logro escucharla.

-Como dijiste?.- pregunto incrédulo.- o acaso eres muda?.

Alastair se levanto molesto y dispuesto a irse con su mate. Tanto Dennady como su madre estaban alerta de la situación... ellos sabían muy bien que el pasado de aquel hombre que formaba parte de su familia no estaba tintado de rosa... el había cometido cosas crueles he inhumanas.

-Suficiente.- declaro Meredith.- Alastair, llevatela de aquí y Dennadh vete con tu hermano... llevate a Nesrin contigo.

Los nombrados no tardaron en obedecer y desaparecieron del comedor dejando solos a su madre y abuelo.

-Se nota desde lejos que esa niña es una bendecida.- dijo con notable repudio en su voz.- Debieron dejarla con su amo...

-Padre, cállate de una maldita vez.- expreso furiosa.- No dejare que le pongas una mano encima ni a ella ni ha ningún bendecido más...

El hombre podía ver la furia arder en sus ojos, lista para ser liberada.

-No dejare que le pase lo mismo que ha mi hermano...- sus ojos se cristalizaron por la furia y el dolor.- No dejare que la mates.

-Todos los bendecidos son un peligro, son débiles pero destructivos... por eso me deshice de tu hermano apenas cumplió los cinco años...

(...)

Los cuatro estaban subiendo por aquel ascensor relativamente nuevo. Cada hermano empujo la respectiva silla de ruedas hasta llegar a la habitación del hermano mayor. Alastair ayudo a su mate a levantarse y sentarse en la orilla de la cama, dejando de lado la silla de ruedas.

-Hermano... ¿ella es igual a mi?.- pregunto Nesrin desde donde le dejo su hermano, cerca de la cama.- Parece una muñeca de porcelana...

-Ella usa una silla como la tuya porque esta muy debil... tiene que recuperar fuerzas para volver a caminar.

-Ouh... pero... ¿quien es?.- volvio a preguntar a Dennady.

-Es la mate de Alastair... es su predestinada.- los ojos de Nesrin se iluminaron de emocion.

-¡¿Enserio?!.- Dennady asintio.- Eso es maravilloso!!.- se acerco a la cama con rapidez.- ¿Como te llamas?

La cachorra estaba muy alegre. Alastair entro en pánico al pensar que ella se alteraría pero fue todo lo contrario...

-N-no tengo nombre pequeña.- respondió dulce y con una voz tan suave que fácilmente podría ser confundida con la de una sirena.

Entonces recordó aquellas palabras que su madre dijo alguna vez... "Los niños son tan puros como el agua cristalina, solo son seres llenos de inocencia y admiracion".

-Porque no tienes nombre?.

-Nunca tuve uno...- le respondía con total seguridad.

Ella sabia que una niña como ella no me haría daño... que era una criatura tan inocente y pura como lo fue alguna vez en su corta niñez... una fugaz niñez.

-Mi nombre es Nesrin...- dijo sonriente, le faltaba uno de sus dientes frontales... se veía muy tierna.- Soy hermana de Alastair y Dennady.

-Es un hermoso nombre, Nesrin.- le dijo.

-Tu crees?!.- de verdad derramaba emoción.

-Claro que lo creo... cada nombre tiene un significado que nos define.- dijo serena.- Cada significado define tu espíritu y tu personalidad... así como define quien eres.

Los dos hermanos estaban asombrados por la forma en la que hablaba, con una voz tan calmada que podía compararse con el arrullo de un rio serpenteante... o el relajante sonido del bosque nocturno... y solo una niña pudo lograr aquellos...

"Los niños poseen almas puras e inocentes... tan blancas como la inmaculada nieve y tan pura como la cristalina agua de un manantial secreto."

Nesrin: De origen Persa. Sig. Wild Rose (Rosa salvaje).

Meredith: De origen Celta. Sig. Guardiana del mar.

Nos leemos 💖