Devil || Minayeon

"Capitulo dos"

A pesar de lo que alguien pueda creer, Nayeon no era popular.

Si, su belleza era inigualable y tenía buenas notas en la escuela. Pero según los demás, todo eso se perdía con su extraña manía de bromear con todo el mundo.

—¿Sigue sin aceptar? —murmuró su mejor amiga, mientras la mayor se limitaba a asentir con la cabeza.

—No te desanimes —habló Jihyo—, después de todo, ya sabemos quien sí te soporta.

Las dos chicas miraron hacia la espalda de Nayeon, donde se acercaba una alegre, y aveces insoportable, Jennie Kim.

—¿Cómo estás Nayeon unnie ? —saludó alegremente la castaña, sentándose a un lado de la mayor y sonriéndole con felicidad.

—Hola Jennie —contestó sin tanto entusiasmo la más baja, rodando los ojos y mirando sus uñas con desinterés.

—Estaba pensando en invitarte a salir algún día de estos —propuso con nerviosismo la menor, jugando con sus dedos—, sé que la última vez dijiste que no, pero no es necesario que sea de forma romántica.

La mayor, con una leve expresión de cansancio, miró a los ojos a la más alta y le sonrió falsamente—. Esta bien, yo te aviso.

Jennie, sin creerlo, abrió sus ojos con sorpresa y sonrió con auténtica emoción, casi soltando algunas lágrimas.

—No te arrepentirás —dijo con seguridad y levantándose de su asiento, corriendo donde probablemente estén sus amigas esperándola.

—¿Por qué aceptaste si no te gusta? —cuestionó Jeongyeon con el ceño fruncido.

—En el fondo no acepté, dije que le avisaría, y ese día nunca va a llegar —todas sus amigas la miraron con clara desaprobación, pero los ojos de la castaña sólo estaban enfocados en cierta japonesa que acababa de entrar al comedor—. Mi objetivo es otro.

Mientras tanto, la japonesa ya había tenido bastante con haberse deshecho del hedor en su casillero, por lo que ahora estiraba su cuello mientras bostezaba. Había notado que Nayeon la estaba mirando, como era habitual, pero no quiso darle más importancia, por lo que le regresó la mirada. Si, esa era la lógica de Myoui.

—¿Mina? ¿Estás ahí? —escuchó a lo lejos la voz de Chaeyoung. Pero la más alta no parecía reaccionar, o al menos hasta que un ligero golpe en su cabeza la distrajo.

—¿Qué les pasa? Estaba escuchándolas.

—No lo parecia —comentó Momo con una sonrisa.

La pelinegra rodó los ojos y suspiró con cansancio—. Estoy pensando en alguna atrocidad para hacerle a Nayeon.

Sus amigas la miraron sin creerle mucho, para luego continuar con su conversación.

Y yo ya te dije que no te creo.

Las palabras de Nayeon seguían rondando su cabeza, causándole un mal sabor de boca y extremadas ganas de golpearle la cara.

"¿Con qué seguridad había dicho eso? Lo único que he hecho es alejarla de mi puta vida"  pensó la japonesa.

"Lo que le dije esa vez fue porque estaba borracha y no tenía idea de lo que estaba pasando"

Pero la culpa seguía ahí, los recuerdos de aquella fiesta seguían ahí y quizás, según ella, eso era lo que empezó todo.

Pero nuevamente la salvación de sus pensamientos apareció, besándole el cabello y sentándose a su lado.

—¿Estás bien? Te veo pensativa —Jaebum le sonrió con diversión.

—Tu hermana, eso me pasa —si el contrarío hubiera leído la mente de la menor, hubiera descubierto que esa frase tenía otro significado.

—Si sé que es insoportable, pero ya sabes, necesita llamar la atención —sus palabras sonaron algo asqueadas, pero eso ya era una costumbre del más alto—. Ahora, ¿supiste lo de la fiesta de bienvenida? Es nuestro último año y Jackson ofreció su casa para celebrarlo.

—¿No deberíamos hacer la fiesta al salir? Igual alguno reprueba —justamente en ese momento, la idea de una fiesta no era la mejor a los ojos de Mina.

—Por eso, hay que disfrutar este año, pues luego quizás no nos volvamos a ver —Jaebum estaba acercándose lentamente hacia la menor, pero cuando las respiración del mayor chocó contra la cara de Myoui, ésta se alejó y le respondió rápidamente.

—Lo hablaré con mis amigas.

El pelinegro sonrió, para luego levantarse y mirar a la japonesa—. Me gustaría que vayas.

Una vez que el mayor se alejó, Mina inconscientemente buscó a Nayeon donde se encontraba hace unos minutos, pero la figura de la mayor ya no se encontraba ahí.