31.Silencio

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Yo estaba dando los primeros pasos para irme tras de el cuando Ash me coge como si pesara nada y me deja aprisionada contra la pared. Si antes Jesse estaba  pegado a mí en el ascensor, Ash esta muy muy pegado.  Su cuerpo contra mi cuerpo.

-llevas esquivándome días, creo que desde que intente besarte ya no quieres estar conmigo. Asolas.¿por que a dicho Jesse que me deberías pegar?-me dice muy bajito apartándome un mecho ondulado.

-Ash no quiero hablar contigo puedes apartarte. Por favor, no quiero…-se me traba la voz, no quiero mosquearme más por hoy, lo que mas me fastidia es que ya estaba consiguiendo relajarme.

-no entiendo que nos a pasado Alex

-¿nos? jaja. ¿Qué piensas...-dejo de mirar el cuello de su cazadora y elevo mi mirada para encontrarme con la de Ash. Esta confuso por como estoy reaccionando.

-pensaba que por lo menos te caía mejor que Jesse. Que podría haber algo. Pero desde que te hirieron y desde que intente besarte no te acercas a mi ¿Qué he hecho?-una de las manos de Ash   me rodeaban mi cadera donde esta mi herida. Las vuelve a subir para quedarse en mi mejilla, que yo rápidamente las aparto.

-quiero espacio. ¡Déjame irme Ash!-le mire a sus ojos marrones.

-¡no! quiero una respuesta. Por favor Alex.

Solo veía una forma para que me dejara salir y escabullirme aunque fuera mentira, aun que sabia que le dolería. Pero quería irme y no estaba dispuesta a contarle mi secreto. No era momento de recriminarle el daño que me ha hecho. No es momento de contarle que estoy  en esta agencia solo para matarle.

-paso algo… y dejaste de ser una persona importante para mi. No quiero tener nada que ver contigo. Eres mi profesor hasta hoy y si en adelante tengo que estar contigo en alguna misión será el tiempo justo. Te vale-me escabullo por debajo de su brazo y corro por el  pasillo.

Pero es me atrapa por la cadera pero con cuidado recordando que tengo una herida.

-No. No es por eso. No me lo creo ¿Qué te a dicho Jesse para que te  caiga mal ahora?-me pone en frente suya y me vuelve  acorralar.

-no me a dicho nada para cambiar mi opinión de ti-le digo ya con odio. Pero  el no parecía enterarse de lo que le estaba diciendo por que seguía con la misma expresión suya de paz y calma.

-nunca pensaría que te cayera tan mal, antes no era así

-antes no sabia tantas cosas de ti- le respondo.

-sigues sin saber nada de mi

-igualmente por eso suéltame. ¿te puede importar tanto la opinión de una de tus alumnas?-digo ya esperando a que se aparte.

-sabes perfectamente lo que eres para mi.

-y tu lo que eres para mi. Mi entrenador y próximo compañero de misiones ¡compañero! apártate ya sino te daré el puñetazo que no te a dado Jesse- Ash no se aparta y me levanta la barbadilla.  Odio que me toque, cada vez que lo hace me recorre una especie de energía que electrifica mi cuerpo.

-yo no veo eso cuando me miras

-¿Qué ves entonces? tienes unos segundos antes de que veas mi puño en tu ojo-le amenazo pero solo causa que le salga una sonrisa de esas que no suele mostrar en publico.

-si de verdad lo quisieras hacer deberías mirar mis ojos no mis labios-dice acercándose mas.

Las angustias  y el calor aumentan en mi cuerpo al igual que mis ganas de darle el puñetazo.

-no lo hago

-¿el que? ¿Mirarme los labios? ¿quieres besarme?-me lo dice con su voz grabe y rota.

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