Tocó la puerta esperando a escuchar su voz del otro lado...
- pase - exclama a lo que entro serrando con seguro la puerta.- ¿Que haces aquí? - pregunta Apolo, mirándome con su ceño fruncido, sonrio.
- Vine a ver al amor de mi vida - confieso caminando contoneando mis caderas.Llegó asta estar frente a él.
- ¿Para que? - me encojo de hombros.
- pogamoslo como si nunca más nos fuéramos a ver otra vez - muerdo mi labio inferior.
- ¿Que? - suelto una sonora carcajada.
- Es broma...Solo vine a quitarte lo extresado - coloco una de mis manos en el cierre del vestido.- Necesito estar un ratito contigo - bajo lentamente el cierre dejando ver mi sostén rojo de encaje, sus pupilas se dilatan al mirarme.
- Estamos en la oficina - intenta reprenderme, congelo mi mano donde estoy bajando en cierre por la mitad de mis pechos.- ¿Y?, Es más exitante así - relambo mis labios provocando lo.
- Pero entenderé...- subo el cierre de uno.
- Primero es el trabajo - me encojo de hombros, el lentamente se levanta y camina hacia mí lentamente.Como un depredador cazando a su comida...
Frente a mi, me mira a los ojos fijamente...
Para acto seguido tomarme de mi cintura y chocar mi cuerpo al suyo posesiva mente...- Eres mía Adalia - confiesa a lo que enarco una ceja.
- Yo decido aquí...- me toma de mi cabello sin lastimarme, para posteriormente acercar mi rostro al suyo, quedando así a pocos centímetros mis labios de los de el.- ¿Eso crees Apolo?, ¿Que tu decides? - sonríe arrogantemente.
- En realidad no...Tú eres mi verdugo personal...Eres mi cazadora - sonrió al saber que es cierto.
- Claro que lo soy...- Floto nuestras narices.Siento una de sus manos subir por mi cuerpo, tocando todo sobre la tela del vestido.
- Estonces Perdóname Adalia - mi corazón se acelera al escuchar su voz de súplica, frunso el ceño.
- ¿Porque? - pregunto curiosa."Lo sabes Adalia...Tu lo sabes..."
Intento alejar la voz de mi subconsciente la cual me dice lo que yo ya se.
- Por decir que eres mía...Cuando soy yo el que es tuyo - siento un nudo en mi garganta formarse.
- No eres mío Apolo...Eres de Kirsten - la nombró sintiendo su cuerpo tenso.
- Ella solo era alguien que me ayudaba a recordar al amor de mi vida...A MI Adalia - explica.- ¿Y yo no lo soy? - el niega con su cabeza.
- Desde el primer momento que te ví, supe que tú podrías remplazar a un amor fallido que tuve, supe que eras diferente a las demás mujeres con las cuales normalmente tenía sexo - parpadeo repetidas veces.- ¿Ahora me dirás qué estás enamorado? - me burló.
- No...Estoy idiotizado por ti - sin más junta sus labios con los míos en un beso necesitado, lleno de lujuria y deseo.Le sigo el beso, correspondiendole con el mismo sentimiento, pasó mis manos por su cuello juntando lo más a mi si eso es posible.
Siento como me empieza a guiar hacia atrás asta que tocó una superficie la cual se, es su escritorio, sin esperármelo me sube a este, quedando sentada y el entre mis piernas aún besándonos.
Una de sus manos sube por mis pechos hasta llegar donde descansa el cierre del vestido, el cual empieza a bajar con su atención puesta en lo que va descubriendo.
- Hoy serás mía Adalia... - levanta su mirada al ya tener descubierto por completos mis pechos...Dejando ver el provocador sostén rojo.
- Eso es lo que quiero Apolo...Ahora, aquí - pido mordiendo mi labio inferior.
- Tus deseos son órdenes - y sin más me vuelve a besar, a lo cual yo le sigo."Te amo Adalia"
Abro mis ojos aún besándonos y lo veo, sus ojos serrados disfrutando del beso.
"Ya eres mi mujer"
"Aquí formaremos una familia"
"Mi familia te ama"
"Jamás te sería infiel"
"Para mí, solo existes tu"
"Eres mi mundo entero"
"Desconéctenla"
"Le fui infiel con Kerstin"
"La mandé a matar"
"Mate a mi hijo"
"Estaba embarazada"
"El accidente no lo fue realmente"
Se separa de mi y me mira con su ceño fruncido.
- ¿Porque no devuelves mi beso? - abro los ojos como platos al no darme cuenta cuando deje de seguirle el beso.
- Estaba pensando...- exclamó.
- ¿En qué podrías pensar ahora mismo? - me encojo de hombros.- En que el tiempo pasa muy rápido - no dejo que conteste al besarlo ahora yo...

ESTÁS LEYENDO
MI DESPERTAR
Teen Fiction- ¿Quién eres para hablarme así? - lo veo mirarme fijamente, más no me intimida, jamás lo ha hecho en realidad. - Nadie...No soy nadie - sonrió, veo su rostro contraerse confundido. - Solo soy esa mujer a la que deseas cada noche...Esa mujer a la q...