Sasuke heredo una hacienda por parte de su abuelo Indra, en la cual tiene que ir a verla pero tiene de vecino a un rubio muy...
¿Que pasara cuando Sasuke vea a su vecino? ¿Que relación tuvieron Madara&Minato? ¿Sasuke domara al rubio ojos azules?
Te...
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Dentro de la hacienda Akatsuki, Kakashi estaba llamándole la atención a un rebelde Deidara por dejarse llevar por el coraje.
> Deidi. Deidi, ¿Cuantas veces te lo he dicho? Los vaqueros no son sacos de boxeo ni mucho menos muñecos de trapo para que los golpees a patadas.
El pobre peliplateado se jalaba los cabellos, ahora entendía a Minato cuando Deidara se enojaba, le tenia rotundamente prohibido pelear con los cowboy de la hacienda.
> Pero papi, - Con una voz melosa le decía a Kakashi - ellos comenzaron primero, por hacer la apuesta ¿De quien golpeaba mas fuerte? y yo acepte el reto.
La mirada obsidiana de Kakashi se fijo en esos bellos risueños ojos color oceánico, movió la cabeza de un lado a otro dejando salir un suspiro.
> Deidi tu me dices así ¿Cuando te estoy llamando la atención? Por favor compórtate como un joven respetando a cada uno de los empleados.
> Primero que apuestan y después se rajan, eso no es de hombre, deudas de juego son deudas de honor.
Kakashi saca humo de su cabeza, lo miro intensamente.
> Después te van hacer una a ti, Deidi, y sabrás que las deudas se cobran mas si son de honor.
Una mirada del Blondo se fijo en las obsidianas del platinado dejando en claro que el, hará lo que siempre ha hecho, lo dejo ir, haciendo un ademan con la mano, solo esperaba que no se metiera en mas problemas.
> Minato cuando vas a regresar para entregarte a estos hijos tuyos.
Deidara salio de la oficina en donde estaba Kakashi con una sonrisa de oreja a oreja, vio a lo lejos a su Onichan, iba metido en sus pensamientos el pelirrojo que no se dio cuenta que Deidara se acercaba hasta donde estaba el.
> Gaachan, vamos al pueblo ha tomar unas cervezas o lo que quieras tengo que salir de aquí, Papi Kakashi esta enojado conmigo.
Gaara respingo en donde estaba su Niisan era un hombre sumamente arrebatado no se detenía aunque le dijera que tenia cosas que hacer lo arrastraría hasta la cantina del pueblo para tomar unas cuantas copas.
Con un soplido el pelirrojo se fijo en los ojos azulinos de su Niisan.
> ¡Vamos pues! No quiero que hagas tus escándalos, de una vez te lo advierto.
> Tsk, Ya estas igual que Papi Kakashi, bueno, ¿Pero vamos, si?
> Vamos, si te llevo la contra de todas maneras me arrastrara de que vaya ¡Verdad!
Una sonrisa maquiavelica se dibujo en los labios del rubio dándole entender que así lo iba hacer.
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