silence libs ~ym/kv~

10

el estridente sonido del timbre hizo que YoonGi gruñese enterrando su nariz en su almohada rezando porque la persona que estufiese al otro lado terminase por rendirse, pero fue todo lo contrario.

bufando se removio intentando abrir sus ojos escuchando un pequeño ronroneo que lo relajo, como si lo incitase a seguir durmiendo, pero el timbre volvio a sonar.

despues de unos segundos intetando hacer que su cerebro volviese a funcionar y se situase en su lugar acabo por abrir los ojos.
no pudo evitar fruncir en ceño al ver el pelaje blanco frente a él, no tenia idea de como habia llegado a esa situacion.

su nariz estaba enterrada en el pelaje de Jimin mientras que sus manos lo acunaban como si de su almohada se tratase.

dejando una caricia en el vientre del minino termino por levantarse maldiciendo todo lo que le rodeaba y con muchisimo impetu al imbecil que no dejaba de tocar y que volvio a pulsar el timbre cuando YoonGi estaba a solo unos pasos de la puerta.

-¡deja ya el puto timbre!-grito cansado-metete el dedito por el culo a ver si tambien suena.

-menuda bienvenida, me esperaba un abrazo al menos-dijo el ahora pelirrojo mientras sonreia.

-¿que haces aqui enano?-pregunto dejandole pasar revolviendo su pelo en el proceso-te esperabamos para dentro de dos semanas.

-oh aun no vuelvo-nego-solo vengo a arreglar unos papeles, ni siquiera dormire en corea-bufo-quiero ver a Jimin.

el peliblanco que habia despertado algo confundido por los gritos se asomo levemente por el reposabrazos dejando ver solo sus orejitas.

-esta en el sofa-señalo haciendo que Jimin maullase ocnfundido.

-¡chim!-lo llamo caminando al salon.

el mayor corrio y se subio a su pecho de un salto ronrodeando y mullando contra su pecho mientras se restregaba en él.

-dios no sabes lo que te he echado de menos-lo abrazo feliz-paso demasiado frio por la noche sin ti.

-eso sono perturbador Tae-comento el palido.

-pasas demasiado tiempo con Namjoon, te esta pervirtiendo la mente-nego sonriendo-vamos a tu habitacion, quiero que vayamos a comer, asique vistete-le hablo ahora al felino.

este emocionado corrio a su cuarto y se transformo tomando con rapidez uno de los vaqueros que Tae le habia comprado al llegar y una sudadera azul muy simple con el dibujito de un oso.

sus musculos estaban algo entumecidos por no haberse transformado en tanto tiempo, incluso perdio el equilibrio por unos momentos, pero eso no le detuvo, con la misma rapidez se puso sus converse y coloco algo su despeinado pelo dandole una apariencia desaliñada pero bonita.

asi con su rubio y ligeramente ondulado cabello descolocado, sus orejitas moviendose con libertad y su cola manteniendose baja corrio de nuevo a la entrada saltando hacia el menor para abrazarlo.

Taehyung se rio apresandolo junto a él disfrutando de la cercania, en verdad lo habia añorado.

mientras tanto YoonGi miraba la escena atonito.

¿ese e-era Jimin?

porque joder...

el felino era bastante mas bajo que él con una fina cintura y curveadas piernas, tenia los ojos azules y un pelo rubio que parecia brillar cada vez mas, ademas de sus pomposas mejillas y rellenitos labios, era lindo.

igual de malditamente tierno que en su forma de gato.

mientras tanto Jimin intentaba no salir del abrazo muriendose de veguenza al sentir la mirada del palido en su espalda, debia de pensar que era un especimen.

-Yoon deja de mirarlo asi, me estas incomodando hasta a mi-bufo Tae.

el palido aparto la mirada rascandose la nuca algo avergonzado por quedarse tan absorto en la figura de Jimin.

-lo siento, solo es...impactante-se encogio de hombros.

-¿no te has transformado desde que llegaste?-pregunto viendo al menor el cual despues de alejase se dedicaba a jugar con su cola enrredandola entre sus dedos.

el rubio solo nego abultando sus labios agobiandose por tener las dos miradas sobre él.

-pense que no se transformaba a menudo-YoonGi cruzo sus brazos apoyandose en una de las paredes.

-en casa si solia hacerlo-sonrio Tae acariciando las orejas del mayor-le gusta mucho leer y cocinar y conmigo salio a correr un Par de veces, bueno nos vamos, tengo poco tiempo y mucho que contarte-le dijo al felino.