Destello Platinado ~Víctor Nikiforov y tú~

Buen amigo

Mi vuelo estaba por aterrizar en Rusia, bien merecido tenía el apodo de "El lugar más frío del mundo". Sin bajarme aún del avión, el frío podía colarse entre mis huesos.

Luego de recoger mis maletas, logré conseguirme un mapa para poder ubicarme, sumergida en el trozo de papel encontré la salida. Tomé un taxi para dirigirme a mi hotel, estaba muy agotada. El hotel era enorme, hermoso y bastante agetreado, eso se veía desde afuera por la diversidad de camarografos, no entendía nada.

Pagué al taxista y bajé del auto, avancé entre la multitud para quedar frente al hotel. Lo miré de arriba a abajo y, cuando decidí entrar, un destello platinado me dejó en el suelo al chocar conmigo.

--Lo siento-dijo aquel destello y siguió caminando rápidamente, con mi mirada tras de él y un escalofrío por todo mi cuerpo.

Qué mal educado, pensé. Me puse de pie, sacudí la nieve que tenía encima y entré, mirando a mis alrededores, volví a chocar, esta vez, con un mar de lágrimas.

--Oh, lo lamento mucho, dejame ayudarte-qué agradable sujeto, le sonreí cuando recibí su mano.

--Muchas gracias.

--No fue nada-dijo tratando de corresponder la sonrisa, sin embargo, las lágrimas que caían por sus mejillas la opacaban.

--Mmm...-dije algo incómoda al no saber qué hacer con alguien llorando frente a mi-¿Pasó algo?-que sutil eres.

--No es nada, es solo...-en un segundo, tenía a ese chico llorando en mis brazos descontroladamente.

--Tranquilo...¿Quieres que te lleve a tu habitación?.

--No te molestes, puedo solo.

--Mira chico, este hotel es bastante elegante y planeo hospedarme aquí, si te suicidas no tendría nada de bonito-él soltó unas carcajadas y yo también-ven, vamos.

--Es el noveno piso-dijo caminando al lado mío-en serio, no te...-lo interrumpí.

--No es molestia-dije presionando el botón del ascensor.

Caminamos en silencio, uno agradable, ya que cada uno estaba hundido en sus propios pensamientos. Al llegar al noveno piso, lo seguí hasta su habitación.

--Aquí es-dijo abriendo la puerta, se veía que era una habitación bonita-¿Quieres...quieres pasar?.

--Claro-entré y observé cada rincón, era una habitación doble-¿Y la otra persona?

--Se acaba de ir, tenía que hacer un viaje urgente-se acercó al mini bar que tenía la habitación-¿Deseas algo para beber?.

--¿Qué es?-dije dudosa.

--No lo sé-dijo llenando el vaso-en estos momentos bebería cualquier cosa.

--Bueno-dije mirando la puerta, pensando que tenía que confirmar la reservación de mi habitación-solo un vaso.

Horas después...

--¿Así que se fue a ver a su perro?-dije sosteniendo el vaso aún lleno entre mis manos, mientras que el chico frente a mí se había bebido la botella completa.

--A ese perro se le ocurrió robar comida justo en un día muy importante como este-dijo mientras en su sistema circulatorio solo corría alcohol.

--¿Día importante?-le di el primer sorbo a lo que tenía en mis manos, me picó la garganta, supuse que era algo muy fuerte.

--Mañana sabré si clasifico al Grand Prix Final, fabuloso-al finalizar la oración, dio un pequeño salto, consecuencia del alcohol, me reí un poco. Deduje que era un patinador, como mi hermano.

--Ya que es un día importante, deberías dormir, ¿No crees?-me acerqué a él para acomodarlo en la cama, no me tomaría la molestia de cambiarle ropa.

--¿Tú crees?-dijo semi dormido, sonreí.

--Descansa-lo tapé con una sábana, estaba decidida a irme cuando me agarró la mano.

--Por favor, no te vayas-volteé sorprendida-duerme aquí, ocupa su cama, por favor.

--O...oye-dije nerviosa y algo sonrojada-ni si quiera sé tu nombre-reí nerviosa.

--Me llamo Yuri-dijo soltando mi mano-me recuerdas a él, por favor, duerme aquí...-pensé que una noche gratis no estaría mal, así que me acosté en la cama a su lado.

--Un gusto Yuri, descansa-dije acomodando mi cabeza en la almohada.

--Hasta mañana, Víctor-dijo con su último aliento.

¿Víctor?, pensé, Él debe ser su enamorado y entrenador, me limité a sonreír por dentro.

--Hasta mañana, Yuri-cerré los ojos-creo que seremos buenos amigos.

Al día siguiente...

Al despertar, decidí largarme de aquí para no incomodar, tomé mis maletas y salí de la habitación, al cerrar la puerta, volví a chocar con un chico.

¿Así voy a conocer a todas las personas en Rusia?

--¿Qué haces saliendo de esta habitación?-levanté la cabeza y pude ver a un chico rubio, su cabello llegaba hasta los hombros y tenía unos bellos ojos verdes.

--Yo...-me levanté por mi cuenta, ya que no intentó ayudarme-soy amiga del chico que se hospeda aquí-fue lo único que se me ocurrió decir-con permiso-dije para poder escapar hasta la recepción.

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Decidí que tenía que ir a despertar al cerdo, si no, nos atrasaría a nosotros.

Maldito Víctor, pensé al recordar que dejó al cerdo bajo el cargo de Yakov. Subí al ascensor maldiciendo y me bajé de igual manera, sin embargo, cuando vi a una chica saliendo de la habitación en la que se hospeda Yuri, me irrité aún más y fue peor cuando chocó conmigo, cayendo al piso.

--¿Qué haces saliendo de esta habitación?-dije mirándola hacia abajo, tenía el pelo castaño y sus ojos eran algo pardos, era muy linda, pero no quita el hecho de que haya tropezado conmigo.

--Yo...-se levantó del suelo, era más linda de cerca-soy amiga del chico que se hospeda aquí-¿Amiga del cerdo?-con permiso-la seguí con la mirada hasta que subió al ascensor, irritado abrí la puerta del cerdo con una patada.

--HEY, MALDITO CERDO, ¿QUIÉN ERA ESA LINDA CHICA QUE SALIÓ DE TU HABITACIÓN?-al verlo despertar desconcertado, deduje que ni él sabía quién era.

--¿Yurio?, ¿Qué haces aquí?, ¿Cómo entraste?.

--Maldito seas, cerdo-dije saliendo de la habitación-espero que estés listo en 5 minutos.

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¿Linda chica? ¿Qué?, traté de hacer memoria de lo ocurrido anoche.

--Oh, claro-dije en un susurro, mirando la cama a mi lado-ya no está-pensé unos segundos- debo encontrarla y agradecerle-me levanté de la cama-¡Oye, Yurio!

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En la recepción, hice concreta la reserva de mi habitación por un par de noches.

--Muchas gracias, que esté bien-caminé lentamente hasta el ascensor, teniendo un pensamiento en mente.

Ese maldito destello platinado había dejado una corriente eléctrica en mi cuerpo durante todo el día, era agradable. Suspiré al recordar que con nadie podía compartir mis pensamientos.

En este momento, necesito un buen amigo...

N. A.

Bueno chicos, esta es mi nueva novela, espero les guste. 💜

Publicaré cada fin de semana, ambos días, esto es para que vean si les agrada. 🥰