Destello Platinado ~Víctor Nikiforov y tú~

Canción

--¡Oigan, malditos!-Víctor y yo nos despertamos al escuchar ese grito.

--¡Yurio!-dije tirándome a él para abrazarlo, él correspondió.

--Te juro que en este momento te odio-dijo susurrando en mi oído, me reí bajo.

--Hola, Yurio-dijo Víctor-es hora de irnos, ya es tarde, Yuri debe estar preocupado-ambos asentimos con la cabeza y caminamos hacia el auto.

Cuando llegamos, Yuri estaba totalmente desesperado porque no le habíamos avisado nada, solo nos reímos y nos fuimos a acostar.

A la mañana siguiente...

--¡____, despierta!-dijo saltando encima de mí.

--Yuri, déjame dormir-dije acomodandome hacia el otro lado.

--¡No hay tiempo, tenemos que desayunar!-saltaba encima mío. Parecía como si fuera un niño pequeño.

--¡Ya voy, ya voy!-suspiré-solo deja de saltar-me senté en la cama.

--Apresurate, Víctor nos está esperando para desayunar-salió de mi habitación-iré a despertar a Yurio.

¿Vi...Víctor?. Ahí me desperté completamente y empecé a buscar ropa en mi closet, me di una rápida ducha y bajé. Ahí estaban los 3 chicos comiendo, me senté al lado de Yurio.

--Hoy tenemos muchas cosas que hacer-Yuri sacó un folleto de su bolsillo-luego de practicar y descansar un rato, iremos a un pequeño concierto público que habrá esta noche, estará lleno de puestos de comida y mañana habrá un desfile para que en la noche se lancen los fuegos artificiales para finalizar el festival-en sus ojos se podía ver la emoción y yo sonreí.

Seguimos desayunando, cuando terminamos, Yurio y yo levantamos los platos, el otro par lo había hecho ayer.

--¿Y qué vas a hacer?-dijo Yurio en susurros.

--¿Qué quieres que haga?-dije fregando los platos-no puedo hacer nada, mientras mayor sea la distancia entre él y yo será mejor.

--Anoche no se veían tan distanciados-me sonrojé y un par de cucharas se cayeron, ambos nos agachamos para recogerlas-créeme que distanciados no están.

--Maldita sea-lo miré a los ojos-tampoco puedo evitarlo toda la semana, sería más sospechoso-nos pusimos de pie y seguí lavando mientras él secaba.

--Debes intentarlo, date una oportunidad de ser feliz-y esas ataduras que siempre apretaban levemente, apretaron aún más.

--¿No ves...no ves lo feliz que está?-dije perdiendo mi mirada en el agua que corría-no quiero echarlo a perder-él suspiró y siguió secando los platos en silencio.

No quiero arruinarlo ahora...

Makkachin había entrado a la cocina, quería jugar al parecer, cuando terminé, salí con él para distraerme un poco mientras los 3 chicos iban a ensayar.

Cuando todos estábamos en el hotel, me bañé y me quedé en mi habitación junto a Makkachin, que estaba en mis piernas mientras yo revisaba mi celular.

--¡Oye, ____!-Yuri tocó la puerta, me levanté y le abrí, traía algo en sus manos-ten, tienes que usar esto los 3 días del festival-me lo pasó, era un lindo yukata negro con algunas flores rojas.

--Está bien-le sonreí-es muy lindo-él sonrió y se fue.

Me puse el yukata y me miré al espejo, me sentía algo incómoda.

--¿Necesitas ayuda con eso?-volteé y vi a Mari.

--Por favor-sonreí algo avergonzada.

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Cuando Yuri entró a la habitación con un yukata, me vestí, no se veía mal. Bajé al primer piso, donde estaban ambos Yuri.

--____ se ha tardado-dijo Yuri-la iré a...-Makkachin había interrumpido al chico con sus ladridos.

--Per...perdón por la demora-volteé para mirar por donde ella venía. El cabello lo tenía completamente lacio, tenía unas flores rojas en él, y el yukata le quedaba perfecto, se veía preciosa.

--Bien, ahora podemos irnos-dijo Yuri sonriendo, todos asentimos y salimos.

Había bastante gente caminando hacia el mismo lugar al que íbamos nosotros, todos con diferentes Yukatas o Kimonos. Cuando llegamos a lo que sería el lugar donde era el concierto, decidimos ir a comprar algo para comer.

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Para comer, había desde tradicional comida japonesa hasta simples palomitas, prefería ir por lo seguro.

--Iré a comprar palomitas-caminé hasta el puesto y pedí unas-muchas gracias-cuando volteé, choqué con un cuerpo que logró botarme al suelo con mis palomitas y hacerme sentir una corriente por todo mi cuerpo, sabía quién era-¡Víctor!-dije desde el suelo-mis palomitas.

--Lo siento, ____-extendió su mano-te compraré otras-sonrió, acepté su mano para ponerme de pie-yo también quería.

Luego de comprar las palomitas y agradecerle, el concierto ya había comenzado y buscamos a los chicos, sin éxito.

--Creo que mejor debemos descansar en esa banca-dije cuando ya habían pasado varios minutos, nos sentamos y comimos palomitas mientras se escuchaban diversas canciones y melodías-deben estar entre toda la gente, no los encontraremos así.

--Será mejor esperar a que acabe el concierto-lo miré y sonrió-¿Qué quieres hacer?.

--Quiero...-me perdí en sus ojos por un segundo, buscando aquella respuesta, ¿Qué es lo que quieres, ____? Sonreí-quiero caminar mientras escuchamos el concierto.

--Está bien-se puso de pie y me dio su mano para yo también hacerlo, sin embargo, después ya no la soltó-no quiero que te pierdas entre tanta gente-me sonrojé un poco, pero asentí con la cabeza.

Los minutos pasaron y nosotros nos reíamos de diversas estupideces que hacíamos, amaba cada segundo que podía pasar al lado de él a solas.

Mi piel se erizó cuando escuché una vieja canción conocida, que estaba grabada en todos los rincones de mi cabeza.

"--Mami, papi-dije riendo.

Ambos estaban bailando una linda canción en medio de la sala, al verme sonrieron.

--¿No deberías estar durmiendo, pequeña?-dijo mi mamá cuando me tomó en brazos.

--Mami, papi, ¿Qué era eso?-ambos se miraron y sonrieron.

--Estábamos bailando, mi cielo-dijo papá mirándome-con esa canción conocí a tu madre-acercó su mano a mi cabeza y me acarició-espero que algún día conozcas a alguien con quien puedas compartir esta canción-le sonreí"

Volteé para mirar a Víctor, quien me estaba mirando también, sonreí.

Estoy agradecida de compartir esta canción contigo, Víctor...