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Veía a Eunsang en la puerta de su casa desde mitad de la calle. Hyunjin andaba con las manos en los bolsillos.

Eunsang nos recibió y nos dijo que pasáramos dentro. Había gente la cual a primera vista, no conocía.

—Toma. — Eunsang me tendió un vaso.

Cogí el vaso de plástico que me dio Eunsang y lo olí, pero antes de saber que era Hyunjin me lo quitó de las manos. — ¿Que es esto?

— No sé. Yo no entiendo de alcohol. — dijo Eunsang.

— Que bien, vaya. — dijo Hyunjin en bajo. Dejó el vaso en el primer sitio que pilló. Eunsang nos llevó a dentro de la casa, y más o menos por lo que parecía la cocina, estaban Jisung y Minho.

— ¡Hyeri! — me gritó Minho. — Fua, que bien os veo. — minho parecía ir un poco mal.

— Ven Hyeri. Tú ve para allá a ver si conoces a alguien y haces amigos. — me dijo Eunsang apartándome hacia un lado. Los chicos se quedaron solos. Nada más darme la vuelta me encontré a un chico bastante alto mirándome.

— Hola. — me dijo.

Esto era muy incómodo, porque no sabía que decir. — ¿Hola? ¿Quien eres? — pregunté.

— Ah. Soy Mingyu. — me tendió un vaso haciendo un gesto de que si quería. Acepté por no parecer borde y bebí de lo que quiera que sea eso.

— Yo Hyeri... — hice una mueca con mis labios.

— Por curiosidad. ¿Tienes novio? — me preguntó.

— Eh, si. — ¿tan directamente? Eso había sido algo forzado.

Hizo una mueca para restarle importancia. — Bueno, no pasa nada. Podemos ser amigos.

— Claro. — sonreí algo forzadamente. Lo dijo como si fuera su segunda opción, cosa que me molestó. Alguien me agarró del hombro y me tiró levemente hacia atrás. Logré ver el rostro de Hyunjin, tenía una expresión neutra, tenía cara de pocos amigos, por así decir.

— Pero Hyunjin, ¿que haces tú aquí? — preguntó Mingyu.

— ¿Qué está pasando? — pregunté yo confusa.

— Ella me obligó a venir. — dijo mientras me miraba con rencor. — Ya hablamos otro día, nos tenemos que ir. — dijo Hyunjin. Luego empezó a caminar súper rápido hasta llegar afuera.

— ¿A donde vamos? — le pregunté.

— A casa. — me respondió algo frio.

— ¿Puedes esperar un minuto que me despido de los chicos? — le pregunté con una voz dulce.

Hyunjin se lo pensó. — Si tardas mucho me voy. — me dijo firme.

Yo asentí y fui corriendo en busca de los chicos. Les encontré en el mismo sitio en el que estaban antes. Y me uní al círculo.

— Me voy ya. La próxima vez podríamos vernos en un ambiente más tranquilo. — les dije.

— ¿No te gustan las fiestas? — me preguntó Minho.

— Hyunjin se quiere ir. — le dije algo apenada.

— Pues déjale que se vaya y quédate. — gritó Eunsang. Apenas se pudo diferenciar que gritó por el alto volumen de los altavoces pero él apestaba a alcohol desde afuera de la casa. Para su primera fiesta va a querer que sea la última con la resaca que tendría luego.

— Él me acompañó sin querer venir, no voy a dejar que se vaya solo a casa. Además quiero dormir con él. — le respondí calmada.

— ¿Solo dormir? — me dijo Jisung.

UNEXPECTED; Hwang HyunjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora