Konosuba: Una cita con Eris-sama.

Segundo Temporada: Elisa, la diosa de la mala suerte.

¿Qué estaba sucediendo en estos momentos? ¿Acaso lo que veía era real o era un simple sueño como solía serlo casi siempre? Ver una copia casi exacta de mi novia era algo verdaderamente extraño.

–¿Qu-qué haces aquí?

–Oh, ¿acaso no estás feliz de verme hermanita?

Chris estaba con una mirada llena de terror en su rostro, está chica era verdaderos problemas sí incluso Chris estaba preocupada. Debía hacer algo, debía ayudarla, pero había algo que no me dejaba levantarme de la cama.

–Sabes Eris…

Un aura amenazante comenzó a cubrir a la hermana de Chris, en ese momento sabía que tenía que intervenir, estaba por levantarme de la cama cuando…

–… ¡Realmente te extrañe!

El aura amenazante desapareció casi por completó mientras Chris era abrazada de forma repentina… muy bien, creo que debo dejar de narrar como si fuera una obra sombría.

Es cierto que estaba sorprendido al descubrir que Eros tenía una hermana muy similar a ella, pero he visto tantas cosas raras en mi vida que ya no le temo a cosas como esas.

La escena de ahora era realmente extraña, la hermana de Chris la estaba abrazando como si la misma Chris fuera una muñeca, parecía estar tan incomoda que pedía mi ayuda con la mirada, pero aquello que no me dejaba levantar aún estaba activo.

Su hermana se veía sumamente contenta abrazando a Chris, claro que entiendo ese sentimiento, pero creo que ella lo está llevando al límite.

–¡Elisa, por favor suéltame, me estás avergonzando frente a Kazuma!

Chris gritaba elocuente mientras trataba de librarse de los brazos de su hermana, por el otro lado Elisa, creo, acariciaba el cuerpo de Chris de una forma un tanto pervertida… no podré levantarme de la cama en un buen tiempo.

–¡Hahaha, me haces cosquillas, basta, por favor basta!
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El extraño momento no duró mucho, todo terminó cuando Chris abofeteo a su hermana por sobrepasarse con su broma. En estos momentos la hermana reía mientras acariciaba su mejilla apenada.

–Jeje, perdona hermanita, me deje llevar un poco porque llevaba mucho tiempo sin verte.

–Moh, eso no quiere decir que puedas tocar mi pecho para ver si a crecido.

–Bueno, pensé que como al fin habías conseguido novio entonces tú pecho crecería por lo menos un poco, pero parece que me equivoque.

Repito, esto era extraño en cierto sentido, aquella chica que hace unos minutos actuaba de una forma tan erótica conmigo, la misma chica que llegó a asustarme con su simple presencia, esa chica actuaba de una forma tan relajada como Aqua.

–Por cierto, olvide presentarme, soy Elisa, la diosa de la mala suerte y la hermana mayor de Eris, un gusto en conocerte novio.

Ella se dirigió a mi de una forma muy cordial que no supe cómo reaccionar exactamente, además, ese enorme pecho suyo era difícil de no ver.

–Ha, haa, lo mismo digo…

–¡No actúen como si nada, ¿acaso ya se olvidaron de lo que hicieron cuando yo llegue?!

Voltee a ver a Chris al momento que gritó eso, en ese mismo instante recordé lo que había sucedido.

–Vamos, no tienes de que preocuparte, llegaste antes de que pudiéramos hacer algo, ¿no es así dulzura?

–¡Oye, no quieras hacerme cómplice de tus acciones, incluso cuando me besaste intenté alejarme de ti!

En ese momento Elisa tenía un rostro tensó mientras veía a cierta dirección, la dirección que detectar enemigo me indicaba que tuviera cuidado.