Reencarnando En My Hero Academia (Editada)

introducción

Una sensación de frío cubrió mi cuerpo, me están gritando, pero realmente no escucho nada, ¿qué me pasó, como termine así? ¿por qué no puedo abrir los ojos? Esta nueva sensación de opresión en mi pecho es... dolorosa. ¡YA NO PUEDO SEGUIR SOPORTANDO ESTO, SIENTO CADA PARTE DE MI CUERPO SIENDO DESPEDAZADO!

- finalmente, que pesadilla más... aterradora - susurró con algo de temor para si mismo, pero notó que su voz había cambiado mucho - ¿qué está pasándome? - dijo mientras miraba el tamaño de sus manos, que ahora eran más pequeñas.

           
Dando un rápido vistazo a su alrededor se dio cuenta que estaba la luz apagada, pero aún así pudo distinguir que no estaba en un lugar reconocible para él, ni en su habitación o el hospital.
Justo cuando nuestro protagonista se disponía a salir de ese misterioso cuarto, la puerta se abrió dejando ver una figura femenina que tras prender la luz entra rápidamente a la habitación.

      
- Max ¿qué pasó? Te escuché gritar desde la cocina - ¿quién es ella? Al parecer no conoce mi nombre real... y yo tampoco lo recuerdo

   
De reojo pude ver que la chica se estaba acercando, mantuve mi guardia en alto pues hasta donde sabía era probable que ella me hubiese secuestrado

   
- sé que estás confundido, pero no debes tener miedo, recuerda que lo peor ya pasó, somos libres finalmente - la chica dijo lo último con un toque de nostalgia y felicidad en su voz.

       
Aun no entiendo que sucede, pero por el momento debo seguirle el juego, ya veremos cuando tenga la oportunidad de escapar de aquí y traer a la policía.

       
- dentro de unos minutos estará el desayuno, no olvides lavarte la cara en el baño - con esas palabras la chica se retiró de la habitación dejándome solo y confundido.

      
Varios minutos habían pasado y Max seguía en el mismo lugar, seguía intentando asimilar todo, varias posibilidades cruzaron su mente, tal vez tenía algún tipo de amnesia que le impedía recordar a esa misteriosa chica, pero rápidamente descartó esta posibilidad al darse cuenta que aún tenía algunos recuerdos entremezclados y en ninguno aparecía ella.
Dio una larga inhalación y exhalación, miro a su alrededor nuevamente, al menos ahora si podía ver, todo el lugar estaba vacío, un cuarto un tanto deprimente, las paredes de un color gris, sin ningún mueble a la vista, solo su cama adornaba el cuarto.
Bajar de la cama casi fue un desafio, se sentia pequeño y eso solo reforzó algo en su mente, caminó fuera de la habitación en busca del baño, necesitaba corroborar una última cosa. Fue fácil para él encontrarlo pues era la única puerta del segundo piso que estaba sin llave, al entrar y prender la luz no soportó más la intriga e intento acercarse al espejo, solo para percatarse que era más bajito que el lavabo, eso solo alimentó su deseo de seguir negando lo que pasaba y fingió que eso era normal, usando un pequeño taburete que estaba cerca se miró finalmente al espejo.

         
- ¡mierda! ¿Qué me pasó? Este no soy yo... - al verse en ese espejo, sus temores se hicieron realidad

       
Lo que se veía reflejado en aquel espejo no era la persona que esperaba ver, Max solo vio a un niño de entre cinco a seis años y no al joven adulto que recordaba ser, algunas lágrimas se escaparon de su rostro, no quería creer lo que estaba pasando y mucho menos pensar en como estaba pasando, lo más probable es que haya muerto, se lavó la cara y se pellizco en un vano intento de ver si estaba soñando, al ver que eso tampoco había funcionado comenzó a temblar levemente, ya no había forma de negarlo y tarde o temprano debía afrontar que ya no era él mismo, pero eso solo traía nuevas preguntas.
Bajando las escaleras se dio con la sorpresa de que la casa tenía un aspecto viejo y descuidado, Max comenzó a caminar hacia dónde provenía un olor exquisito viendo por el camino varias fotos llenas de polvo y telarañas en las que estaban retratadas una familia completa, no pudo reconocer a ninguno, ni siquiera pudo ver a su nuevo yo en alguna de ellas, lo peor es que probablemente esa casa ni les pertenecía y la habían usurpado, Max se disculpó mentalmente antes de seguir explorando el lugar, pasó por delante de algunas puertas que intentó abrir, pero estaban cerradas y luego de dar un última vuelta finalmente llegó a la cocina.