Mi cabeza era un caos.
Por primera vez en mi vida, sentía que toda mi estructuración y orden estaban entrando en una especie de caos, no se si es el nuevo caso que tengo o mi relación con Amy.
Después de esa tarde en dónde se apareció en mi oficina y tuvimos sexo, algo había cambiado entre nosotros. No sabría explicarlo pero era tan raro que ya comenzaba a molestarme.¿Qué demonios me sucedía?
Tenía infinidades de preguntas pero ninguna respuesta certera y eso es lo que me estaba volviendo loco.
- De seguro fuí tu primera opción - dice Bautista entrando a mi oficina.
- La última y lo que me quedo - respondo mirándolo.
- Prometo comportarme - acota divertido.
- Es algo serio Bautista y no tuve otra opción que elegirte porque eras el único que estaba hoy en el bufete - digo masajeando mi sien.
- Que lindo saberlo - ironiza.
Era la primera vez que iba a trabajar junto a mi hermano menor, se que será un gran desafío porque al tener un carácter bastante explosivo ambos siempre terminamos en discusiones además no olvidemos el simple hecho que Bautista todavía le falta madurar un poco y eso me estresa mucho cuando se pone en ese modo.
- Solo dime qué leíste todo lo que te mandé - pido fatigado.
- Soy profesional - acota chasquendo la lengua.
- Eso espero - murmuro suspirando.
Bautista me dejó sin palabras, impresionante para bien porque se manejaba con un profesionalismo que me hacía sentía orgulloso de él, sin dudas iba a llegar muy lejos.
- Sheila Snow - tiende la mujer al presentarse.
- Alexander y Bautista De Luca - digo estrechando su mano con la mía mientras también presento a mi hermano que copia mi gesto.
- Un gusto - suspira y sus ojos se clavan en mí. - Tengo muy buenas recomendaciones tuyas y de este bufete, se que estoy en las mejores manos - agrega dándome una sonrisa agradable.
- Somos los mejores - afirma Bautista.
- De eso no tengo dudas, mi hermano es un patán y está buscando sacarme del medio para derrochar el dinero de mis padres - comenta indignada.
Siempre me pareció hipócrita todas estas personas que pelean por dinero, agradezco la educación que mi inculcaron mis padres porque nunca pelearia con mis hermanos por dinero, la plata va y viene, valoro más a mi familia que pensar día a día por mi cuenta bancaria.
Está mujer me estaba estresando por completo, no paraba de hablar y tampoco de coquetear conmigo. No me gustan interferir en las relaciones abogado - cliente porque en definitiva todo sale mal y para mí gran ego, no estaba permitido perder.
- ¿Me van a ayudar? - pregunta con lágrimas en sus ojos.
- Le dijimos que sí, señorita Snow - responde mi hermano.
Algo me decía que esto iba a estar muy complicado y que en cierta forma había muchas mentiras en esta familia, sin dudas será un gran desafío.
- El señor Snow y sus abogados acaban de llegar - informa Cayden entrando a la sala de reuniones.
- Hazlos pasar - digo con firmeza.
Mi sobrino asiento y en menos de cinco minutos, un hombre capas un poco más grande que nosotros entra todo prepotente y detrás suyos sus abogados, me quedo sin aliento al verla.
Sus ojos me observan para luego regalarme una sonrisa.
ESTÁS LEYENDO
Alguien tiene que ceder (11° SAI)
RomanceDécimo primer libro de la Saga Amor Incontrolable (SAI) Alexander no quiere novias o relaciones serias solo le interesan dos cosas follar y ganar todos los casos que le presenten para catapultarlo como el mejor abogado de la ciudad pero la llegada d...