My champion♡

360 10 3
                                    

Shang Tsung ama a su campeón.

Y Goro esta encantado de ser agasajado por el hechicero



• ● •



La ideología Shokan era cuanto menos... Distinta.

El Señor de las Almas lo sabía.

Llevaba al menos 10 mil años de vida, otros muchos al servicio del Kahn y unos más dedicados a lo que fue la exploración y recopilación de datos de otros Reinos.

Vio especies extinguirse, revoluciones, kombatió contra formidables guerreros.

E incluso vivió tantas vidas como el perfecto amante, tomando distintas formas.

Aquello que era un pasatiempo con el pasar de los años se volvió una necesidad.

Ver como la siempre joven y bella Sindel estaba embrujada al lado de Shao Kahn, viviendo una "fantasía familiar" con sus dos gemelas.

Si había algo que envidiaba de esa desagradable vida, era ver como ella adoraba al tirano. Aun si todo era producto de su hechicería, aun si todo era un vil engaño.

Los celos de verla junto a ese desagradable Kahn eran muchos.

Y si algo deseaba el brujo –y no podía conseguir– era un amor real.

Siglos atrás, amó a diversas mujeres y hombres. Todos mortales, los vio envejecer e irse, jamás tomó sus almas; sus sentimientos eran reales, nunca iba a negar que era un asesino psicópata manipulador y calculador pero por mucho que lo negará (o no lo demostrará) se engañaba a si mismo diciendo que era un ciclo natural, todo lo que vivía... Algún día tendría que morir.

Quería a alguien que pudiera estar con el paso de los siglos, quedarse a su lado en todo momento.

Aunque tenía a su disposición muchos seres, simplemente sentía que no encajaba con nadie.

Su naturaleza zorruna y dominante era un problema también.

No aceptaba negaciones.

Debía ser alguien que no fuera muy pasivo en cuanto a actitud y tampoco alguien fácil de engañar y quizás lo más importante... que comprendiera su trabajo.

Él protegería a su amor, no le importaba si no sabía pelear, si era alguien de la realeza, si era de origen humilde o incluso si tenía alguna discapacidad física.

Compartir calor y sentimientos era algo que añoraba.

Cada amante que tuvo fue excepcional, cada uno mejor que el anterior.

Sus partidas fueron dolorosas, jamás tuvo descendientes claro esta... Pero ya no deseaba sufrir en silencio, desaparecer algunos años y volver a sentirse como si nada hubiera pasado.

Ya estaba harto, no le importaba que aspecto tuviera.

Si lo próximo que haría seria encontrar y entrenar guerreros poderosos para Shao Kahn, entonces ahí encontraría lo que buscaba.

Él tendría lo que busca.

Quizás su emoción empezó cuando conoció al príncipe de los Shokan.

Un ejemplar perfecto de lo que era la fiereza de los descendientes de dragones.

Era poderoso e inteligente.

Al servicio de Shao Kahn al igual que él.

Si, tal vez ahora eran simples sirvientes pero, en un futuro quizás no muy lejano.

Goro era hermoso.

Llevó mucho tiempo conquistar el raudo corazón del rebelde príncipe shokan sin embargo valió completamente la pena.

Amaba esas ardientes caricias, sus cálidos abrazos, sus besos que le robaban el aliento.

Y la intimidad.

¡Ah, qué maravilla!

Era un sueño hecho realidad prácticamente.

Su campeón era perfecto por completo


Mortal Kombat FanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora