CAPITULO 46

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Recibir la noticia de que nuestra princesa estaba mejorando fue la mejor de todas, después de compartir la emoción y los abrazos me dirigí a mi consultorio tenía que trabajar nuevamente, sin querer había descuidado a mismos pacientes y debía retomar nuevamente mis consultas, pero antes me dirigí a la sala de doctores dónde esperaba encontrar al doctor de Megan y pedirle un gran favor.

Desgraciadamente no logré encontrarlo una de las enfermeras me informo que el se había marchado a casa para descansar hace unas horas pero que seguramente al medio día el estaría de nuevo en el hospital con esa información decidí buscarlo después regrese a mi consultorio comenzando a trabajar, esa mañana recibí varios pacientes, aunque no podía dejar de pensar en mi princesa y Frankie en todo momento deseaba que toda está pesadilla acabará y por fin estar  juntos sabía que aunque sacara a millones de citas a Frankie en estos momentos el no las disfrutaría como yo esperara que hiciera, necesitábamos a nuestra princesa con nosotros para poder así disfrutar, se que voy rápido porque quiero pedirle a Frank que sea mi novio pero no quiero perder más tiempo, quiero disfrutarlo y que el se de cuenta que mis sentimientos son reales, que mi amor es totalmente verdadero y si es posible quiero casarme con el entregarle mi virginidad y ser suyo completamente.

Al medio día salí de mi consultorio dirigiendome primeramente a cuidados intensivos en buscar del doctor Walter, una de sus enfermeras me informo que estaba atendiendo un paciente que ella le avisaría que yo lo estaba buscando y lo esperara en su consultorio, me dirigí para halla agradeciéndole a la enfermera mi espera no duró tanto ya que en el camino hacia el consultorio el doctor waltere alcanzó.

- Dígame doctor Way ¿Que se le ofrece? - me dijo el doctor Walter en cuanto tomamos asiento en su consultorio.

- son dos cosas primeramente quisiera saber la evolución de Megan Iero - el médico sonrió ofreciéndole algo de tomar a lo que negue.

- La pequeña ha mejorado bastante la transfusión le ayudo increíblemente y si seguimos así  y sus golpes internos mejoran la sacaremos del coma y la podremos trasladar a una habitación para que puedan estar con ella - sonreí enormemente, me sentía tan feliz que mi princesa fuera evolucionando favorablemente, ella era un guerrera y me lo demostraba cada día.

- Me alegra tanto escuchar eso no se imagina cuanto - el doctor Walter me sonrió asintiendo - lo segundo que quería pedirle es algo muy especial y se que quizá no sea lo correcto pero deberás lo necesito, quisiera que el padre de la pequeña pueda ingresar a verla de vez en cuando.

- Sabes que eso es complicado por el área en que encuentra y las reglas del hospital.

- Lo se, se que es mucho pedirte pero no te pido que entre a la habitación solo que la vea por el vidrio para que su padre se tranquilice - solté un gran suspiro - ellos solo se tienen el uno al otro y no te imaginas cómo está el, lo necesita, ellos se necesitan.

- ¿Que son ellos de ti Gerard? No es que quiera meterme en ti vida pero no cualquier médico viene y me pide eso que rompa las reglas - el doctor Walter se inclino sobre su escritorio entrecruzando sus manos.

- Ellos son muy importantes en mi vida, Megan es como mi hija y estoy enamorado de su padre, ellos son mi familia - el asintió.

- Está bien, solo daré la autorización de que pueda pasar por 10 minutos dos veces al día en la mañana y en la tarde, es lo único que puedo ofrecerte en lo que Megan mejora y sea sacada de cuidados intensivos - sonreí enormemente agradeciéndole al doctor Walter dándole un abrazo.

- Deberás que está familia debe ser especial que varios doctores estén tan interesados en ella - me dijo ya que nos dirigimos a la salida de su consultorio sabía que krintin es una de las que habla pero quién es la otra persona, hasta que pensé en Andy.

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