CAPITULO 49

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La casa de mi madre era una locura todos iban y venían de un lado a otro nerviosos pero a la vez muy felices, esa tarde celebrariamos una boda.

El traje estaba hecho a mi medida intentaba acomodar el moño a mi cuello pero el muy desgraciado no cooperaba y mis nervios tampoco ayudaban mucho, como siempre mi salvadora entro a mi habitación al verme soltó una risita que me hizo mirarla

- Tranquilo, déjame te ayudo - ella se paró frente a mi y acomodo el moño sin ningún problema lograndolo al instante - ya está cariño.

- Gracias - le sonreí abrazándola ella correspondió.

- Nunca pensé que este día llegaría y miranos estamos listos para la boda y estoy muy feliz por ustedes - ella se separó de mi al ver a mi hermano entrar.

- Ma ayúdame con este moño del demonio - los dos reímos mientras mi madre iba al auxilio de mi hermano.

- Saben mis niños estoy muy orgullosa de ustedes de que ambos hayan encontrado su felicidad con las personas correctas - mi hermano abrazo a mi madre y yo me les uni dándoles un beso a ambos.

Estábamos en un lindo jardín con decoraciones hermosas yo parado frente al altar junto a mi hermano y todos mis amigos escuchando la marcha nupcial y mirando caminar por el pasillo a mi amada princesa la hermosa niña de las flores, mi Megan vestía un hermoso vestido color rosa que Frankie y yo habíamos escogido especial para ese día en su cabecita una hermosa coronita a petición de ella y en su rostro una hermosa sonrisa, hace meses habían quitado el yeso de su piernita y gracias a la rehabilitación ella estaba caminando perfectamente aventando pétalos de rosas todos la miraban enternecidos, Bert le tomaba vídeo entusiasmado.

Mirar a Frank hizo que mi sonrisa se agrandará lo amaba, lo amaba tanto, siempre que lo miraba el mundo parecía detenerse y desaparecía todo el mundo solo éramos el y yo, salí de mis pensamientos al escuchar la voz del padre al hacer la pregunta más importante a lo que todos ya sabíamos la respuesta "SI" fue todo tan rápido pero así son las bodas ahora todos a disfrutar de la fiesta.

- Reciban con un aplauso a la feliz pareja de recién casados - se escuchaba por todo el jardín - felicidades Kristin y Michael Way.

Hoy mi mejor amiga se había casado con mi hermano me sentía tan feliz y orgulloso de el, Mikey de verdad había cambiado y ahora era un hombre casado, Kristin se veía hermosa, radiante, todos disfrutábamos de la fiesta, el baile de los novios, la comida y al final el baile dónde mi princesa brillo en la pista todos bailaron con ella llegando hasta a enojarse por quién bailaría primero con ella o quien era el tío preferido, aveces creo que la consentían muchísimo más que Frankie y yo pero adoraba que la amaran tanto, mamá no podía dejar de llorar en el momento de brindis y papá inicio su discurso diciendo " pensé que nunca vería a mi hijo casado, la vida nos sorprende" al final lloro igual que mamá al decirle lo orgulloso que estaba de y de su nueva hija.

Miraba a Frankie bailando con mi princesa dándole vueltas o elevándola por los aires mientras ella reia, la vida da muchas vueltas si las cosas hubieran sido diferentes yo ya sería un hombre casado, quizá hasta divorciado porque ahora lo reconozco yo no sentía ni la mínima parte por Marck a lo que siento ahora por Frank, el se ha convertido en todo mi mundo sin ellos yo no podría vivir sin ver sus sonrisas, sin escucharlo decirme te amo, sin sus abrazos, sin sus besos, cada uno de sus detalles y su amor me hacen sentir inmensamente feliz y pleno, debo agradecerle Marck el haberme dejado plantado en el altar porque gracias a eso yo conocí a personas increíbles que me hicieron crecer como ser humano y lo más importante encontré a los amores de mi vida, ojalá el dónde esté sea inmensamente feliz.

La fiesta seguía aunque mi hermanito y Kristin ya habían partido a su luna de miel al Caribe todos habíamos salido a despedirlos entre abrazos y felicitaciones ellos se fueron para comenzar una nueva etapa en sus vidas, cuando la reina de la pista se comenzaba a ver agotada perdiendo el glamour vistiendo su vestido sucio, la coronita de lado y con el peinado todo caído decidimos irnos Marie igualmente se veía cansada.

SEGUNDA OPORTUNIDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora