CAPITULO 4

153 29 33
                                    

Despertó al siguiente día algo tarde se sentía feliz, ese día era el último soltero al siguiente sería un hombre casado con el hombre que amaba sentía que iba a ser muy feliz, se levantó camino hacia la cocina preparándose un café y unas tostadas para desayunar tenía que ir a recoger su traje era lo único que le faltaba, su teléfono comenzó a sonar en su habitación corrió para responderlo sonriendo inmediatamente al ver quién lo llamaba.

- Hola cariño qué tal la pasaste anoche.- escuchaba el ruido de autos.

- Bien, mis amigos tomaron hasta morir pero muy divertido, estoy ansioso ya quiero que sea mañana y estar juntos por siempre.- inconscientemente suspiro.

- Yo también quiero que sea mío para siempre ¿Que harás hoy?

- Tengo que ir a recoger mi traje ¿Porque cariño?- regreso al comedor para terminar su café.

- Voy al colegio por mis hijos, pasamos por ti y te llevamos, quizás podamos decirle a mis hijos de nuestra boda. - sonreí emocionado.

- Sería fantástico cariño me ilusiona que me acepten y estén en nuestra boda. - escuche una risita de su parte.

- Ya estoy en el colegio pasamos por ti en una hora, te quiero Gee.

- yo también te quiero y te espero.

Colgamos la llamada y corrí a mi habitación para darme un baño y alistarme quería verme muy bien, me sentía muy emocionado quizá ésta sería nuestra oportunidad para decirle a los hijos de Marck sobre nosotros y si nos aceptaban por fin podríamos formar esa familia que tanto deseo junto a el, sería tan feliz que sus hijos nos acompañarán a nuestra boda.

Recibí un mensaje de Marck avisándome que había llegado tome mis llaves, billetera y teléfono, cerré la puerta de mi departamento y baje el ascensor, al llegar al auto veo a Charlotte sentada en el asiento del copiloto muevo mi mano en forma de saludo y solo recibo una sonrisa de Marck y una mueca de fastidio de Charlotte, abro la puerta trasera subiendome y saludandolos a todos, Marck comenzó a platicar conmigo mientras sus hijos nos ignoraban.

- Adónde vamos papá.- pregunto charlotte.

- Vamos a llevar a Gerard por su traje, mañana se casa. -en cuanto Marck dijo eso lo miré emocionado quizás ese era el momento de decirles.

- Aaah si y ¿Desde cuándo tienes novia?.- Charlotte volteó a mirarme al igual que Marck hijo.

- Un poco más de un año pero no es novia, es novio.

- ¿Eres Gay? - El rostro de asco de Charlotte era tan notorio, comencé a sentirme nervioso.

- Si, soy gay.

- los gay me dan tanto asco, malditos enfermos de mierda.-me sorprendió tanto el comentario de su hijo de Marck,me senti tan triste y humillado solo pude bajar mi rostro sintiendo mis ojos aguarde.

- CALLATE HIJO POR FAVOR.- el grito de mi prometido me hizo levantar el rostro. - aprende a respetar a los demás. -mi prometido me miró como pidiendo disculpas solo le di un intento de sonrisa.

En un susurro y mirándome de reojo el hijo de mi prometido susurro.

- Maldito puto. - gire mi rostro hacia la ventana.

El camino fue sumido en total silencio, me sentía tan triste y desanimado Marck tampoco había dicho nada recogí mi traje regresando rápidamente al auto y regresando a mi departamento donde me despedí de ellos.

Subí a mi departamento diferente a como salí ahora era la tristeza y los pensamientos tristes que atormentaban mi mente, si los hijos de Marck no me aceptaban y eso nos afectará en nuestro matrimonio, no podía dejar de pensar en eso, al llegar a mi departamento sonreí al ver a mi hermano y mi amigo Bert en la puerta con una cara de resaca que no podían con ella.

- ¿Que hacen aquí? .- les pregunte después del abrazo que compartimos.

- venimos a quedarnos contigo para ayudarte para mañana el gran día.- sonreí abriendo la puerta y dejándolos pasar.

Esa tarde nos la pasamos viendo películas y platicando recordando nuestros tiempos de adolescencia y algunas travesuras que habíamos hecho, recibí un mensaje de Marck en la noche pidiéndome disculpas por lo ocurrido con sus hijos, le contesté que no tenía importancia algún día me ganaría a sus hijos con amor y cariño.
Más tarde se nos unió Jared con los papeles para la venta de mi departamento los firme así cerrando el trato tenía quince días para desocuparlo.

La mañana siguiente llego era el día tan esperado desayunaba junto a mi hermano y amigos que ya tenían una mejor cara la hora se acercaba ellos ya estaba bañados y alistándose yo me dí la ducha más larga de mi vida me relaje teniendo los mejores pensamientos.

Al salir mi madre estaba ahí con nosotros mis padres habían llegado listos, mi padre Lucía un traje muy elegante y mi madre Lucía un hermoso vestido azul marino largo maquillada muy tenue se veía hermosa.

- Me siento tan orgullosa de ti amor.- mi madre acomodaba el moño alrededor de mi cuello.

- Gracias mamá, por aceptarme como soy, hacerme esta persona todo lo que soy es gracias a ti y tus enseñanzas, por a pesar de todo aceptar mis desiciones y a Marck, gracias por todo. - mi madre dejo salir unas lágrimas las cuales limpie con mis pulgares. - no llores arruinaras el maquillaje y te ves hermosa.

- No lloraré más hoy, es un gran día y debe estar lleno de felicidad.- mi madre dejo un beso en mi frente y salimos a la sala donde todos estaban ahí hasta Kristin había llegado quien me dió un gran abrazo.

Salimos de casa directo al jardín donde se llevaría a cabo la boda no había recibido ningún mensaje de Marck pero no le tome importancia y así nos vimos metidos en un intenso tráfico el que me hacía ponerme más nervioso, movia mi pie inconscientemente a causa de los nervios, no quería que por mi tardanza Marck pensará que me había arrepentido.

Llevábamos media hora de retraso cuando llegamos al jardín salí apresurado pero ya un poco más tranquilo camine hacia la entrada viendo como todo había quedado tan hermosamente decorado, tal como lo había imaginado, camine hacia donde venía mi amigo Ray apresurado.

-Perdóname había mucho tráfico, pero ya podemos comenzar. - no sabía decifrar la cara de mi amigo pero no se veía cómodo.

- Gee es que ... Marck no ha llegado.- todos me miraban.

- qui...quizá ésta atorado en el tráfico tambien. - mire a mi madre la cual se acercó hacia mi.

- llámalo cariño.- asentí sacando mi teléfono del bolsillo y marcando su número el cual me enviaba al buzón de voz, comencé a temblar de los nervios.

- Seguro no tarda en llegar esperemos un poco. - camine a donde se encontraba el juez diciéndole que teníamos que esperar.

Todos tenían sus miradas puestas sobre mi, mis nervios aumentaban conforme el tiempo avanzaba y Marck no llegaba y no contestaba el teléfono, el juez se acercó hacia mi diciendo que no podía esperar más tenía que irse, si decidiamos hacer la boda en otra fecha le avisaramos, le di las gracias un intento de sonrisa y el se marcho.

Ya no sabía qué hacer ni qué pensar Kristin y mi hermano se acercaron hacia mi.

- Gee, crees que debemos esperar mas.- pregunto Kristin sentándose a mi lado y acariciándome el hombro.

- Marck no puede hacerme esto Kris. - mis ojos se empañaron pero no deje salir ninguna lágrima. - No, el va llegar, estoy seguro el me quiere y va a llegar.

Sentí mi teléfono vibrar al sacarlo de mi bolsillo mi corazón latio rápidamente y sonreí era un mensaje de Marck seguramente diciéndome que ya venía en camino, abrí este comenzando a leer.

Marck❤️
Gee cariño lo siento pero no puedo hacerlo, al ver la reacción ayer de mis hijos y una plática con mi ex esposa después de meditarlo supe y entendí que aunque te quiera no puedo hacerlo, me preocupa más lo que piensen mis hijos de mi y que se alejen no podría con eso cariño; por eso te dejo libre no puedo casarme contigo. Solo te pido que me perdones por favor no me busques, yo tampoco lo haré, te quiere Marck.







Lamento no haber publicado el sábado pero no lo termine hasta hoy, ojalá puedan decirme si les gusta esta historia si no para cancelarla y publicar otra o tal vez no publicar.

SEGUNDA OPORTUNIDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora