El Jefe De Mi Prometido (1)

Capítulo 21

Harry y yo reaccionamos de inmediato dándonos la vuelta, Harry me agarró de la cintura y me acercó a él de manera posesiva.
- ¿Y esto? - preguntó Taylor entre una mezcla de enfado y confusión, sus ojos demuestran que no puede creer lo que está viendo. Harry se abalanzó seguramente a contestarle, pero lo detuve con una mano.
- Déjame a mí ¿Si? Le debo una explicación - le dije en un susurro solo para que me oyera él.
- Mia - le abrí los ojos y Harry puso los ojos en blanco - Esta bien, te espero aquí, a menos de un metro - me soltó y caminó.
- ¿Qué haces aquí Taylor? - le pregunté caminando hacia él.
- ¿Qué qué hago aquí? ¿Es una broma? ¿Qué haces tú aquí con él? - dijo subiendo la voz de manera prepotente, las personas comenzaron a mirar, yo camine hacia una esquina para que me siguiera y no hiciera escándalo - ¿Con él estás saliendo verdad? - No fui capaz de decirle que si a la cara, el rostro de Taylor se desfiguró, pasó del enfado a la tristeza - No te reconozco Mia - dijo decepcionado y yo siento los ojos vidriosos, me duele generarle daño a pesar de todo lo sucedido, él fue mi pareja durante años, lo amé durante años, no quiero hacerle daño - ¿Por él entraste a GQ? - Siento que voy a llorar ver a Taylor así, completamente desarmado, y yo, yo no puedo decir nada - Él solo jugará contigo Mía, él no te quiere, él no te amará como yo lo hago, pero cuando te rompa el corazón y te des cuenta yo estaré aquí esperando por ti - levanté la vista y su mirada es de completa sinceridad, no sé qué responderle, no quiero contarle toda la verdad, no quiero darle explicaciones, porque eso significaría confesarle que le fui infiel - ¿Por él terminaste nuestro compromiso? - se me formó un nudo en la garganta de inmediato, junte mis labios y los apreté, moví la cabeza y Taylor miró hacia el lado y expulsó el aire - Lo voy a matar Mia, como no te das cuenta que por culpa de él tiraste años por la borda por un simple capricho de él de acostarse contigo - mi corazón se está rompiendo, pero no se diferenciar él por qué, si es porque le estoy creyendo todo lo que me está diciendo, o porque me valora demasiado poco como mujer que piensa que nadie va a ser capaz de quererme o por estar rompiéndole el corazón en estos momentos.
- Perdóname Taylor - traté de pronunciar.
- Te perdonaré cuando termines con él y vuelvas a mi lado - me observó unos segundos y paso la mano por el cabello con frustración - Y respondiendo a tu pregunta sólo estoy de acompañante de una amiga que no quería venir sola a encontrarse con su ex, que lo pases bien junto a mi jefe - se marchó y yo quedé ahí paralizada, necesito aire, necesito llorar, necesito huir.
- Mia - Harry me agarró del brazo impidiendo mi huida - Amor ven - me abrazó contra él.
- No por favor, no quiero arruinar tu traje, no quiero arruinar mi maquillaje, no quiero arruinar la noche - traté de zafarme de su agarre.
- No arruinas nada, llevas en tus ojos al amor sin duda, la que embellece todo lo que mira - citó la frase célebre de Dante sobre Beatriz.
- Espero que no estes tratando de decirme que estar a mi lado es un infierno - Harry rompió a reír, su risa hizo subir mi ánimo y aflojando el nudo por completo de mi garganta.
- La verdad es que hoy si ha sido un infierno, no te pude hacer el amor en todo el día y ahora tengo prohibido besarte y abrazarte para no arruinar el maquillaje - confesó apestado y cabreado, yo me puse a reír nerviosa - Y ahora se viene lo peor, conocer a los Thompson - dijo temblando de miedo.
- Ay no digas eso que me pones nerviosa - le apreté la mano.
- Quiero ponerte de otra manera - dijo rápido intentando pasar desapercibida la frase, lo miré frunciendo el ceño y él puso su mejor sonrisa de inocencia.
Nos pusimos a caminar tomados de la mano por el lugar, Harry iba diciendo "Hola" "Buenas noches" a muchas personas sin detenerse a saludar de la mano, muchas miradas se fijaron en mí, la curiosidad de saber quién es la mujer que anda con el soltero codiciado de Nueva York. Hasta que se detuvo, y una mujer muy guapa salió de un círculo a tirarse a sus brazos.
- Hijo - dijo abrazándolo por el cuello y solté a Harry para que pudiera abrazarla.
- Mamá - la apretó fuerte, sus padres no son tan mayores, deben haber tenido a la hermana mayor de Harry jóvenes. La soltó y abrazó al caballero de al lado, el hombre tiene los ojos verdes, la mujer azules, Harry es la mezcla perfecta de ambos.
- Les quiero presentar a alguien - dijo Harry y la mirada de sus padres se posaron en mí y yo siento que mi nerviosismo subió en la escala hasta el peldaño mil en un solo segundo - Ella es Mia - Harry omitió novia, pareja, amiga. Estire mi mano al caballero que lo tenía más cerca y me saludo encantado. Al padre de Harry lo recuerdo, espero que él no me recuerde a mí, fue la noche que Taylor me presento a Harry en el evento de GQ.
- Karl, encantado de conocerte Mia - dijo amable y me relaje de golpe. Miré a la mamá de Harry y le tendí la mano, pero ella me abrazó y entonces me sentí en casa, quiero que mis padres reciban de esta misma a manera a Harry cuando se los presente, que lo hagan sentir en casa.
- Louisa, al fin Harry me presenta a una chica, esto hay que celebrarlo - dijo riendo la señora, ay estoy encantada, me encantó su familia, miré a Harry feliz y él está igual de radiante que yo.
- Un placer de conocerlos señor y señora Thompson - dije sonriente.
- Ire con Mia por unos tragos - se acercó a darle otro beso en la mejilla a su madre y ella lo recibió encantada.
- Bueno diviértanse - contestó ella.
- ¿Y? - me dijo Harry.
- ¿Y? ¿Y? Quiero terminar contigo y que ellos me adopten - le dije feliz y Harry frunció el ceño, pero después su rostro pasó a completa seducción.
- Seriamos como esas historias en que los hermanastros - le tape la boca antes de que siguiera hablando y dijera algo demasiado subido de tono.
Llegamos a la barra y pidió un martini y un whisky, ni siquiera me preguntó, desde el momento uno él se dio cuenta que yo siempre pedía martini.
- Ay Mia déjame besarte, después vamos al baño te retocas y yo me limpio ¿Si? - me tomó de la cintura, me reí y miré hacia el lado y vi a Taylor con Rebecca, ¡Taylor con Rebecca!, Rebecca es la amiga que quería venir acompañada para no encontrarse sola frente a un ex, ¿Ese ex será Harry?, vi que venían caminando hacia la barra, dejé de mirarlos y me concentré en Harry, le tomé el mentón con una mano y me acerqué despacio, y le di un suave beso en la comisura de los labios, quedó el labial de inmediato marcado, y me reí - mmmm ¿Eso es todo? - dijo molesto y me di vuelta a tomar alguna servilleta del bar, volví a mirar su rostro y me puse a limpiarlo, pero Harry junto nuestros labios, puse los ojos en blanco, y él se rió.
- Sus tragos señor Thompson - escuché tras de mí, Harry le cerró un ojo a la persona y volvió a mirarme a mí, Me puse a limpiarlo otra vez.
- Buenas noches Harry - sentí la voz de Rebecca y Harry miró de inmediato a su derecha, sentí que pasó de Rebecca a Taylor y su rostro se transformó en enojo, ¿Se habrá puesto celoso? ¿Rebecca habrá logrado ponerlo celoso? Si eso quería lograr viniendo con Taylor aquí, aunque a lo mejor sin saber que Taylor es mi ex prometido.
- Buenas noches - dijo Harry molesto - Señor Rylie - me atreví a mirar y se dieron la mano molestos, la sonrisa de Rebecca es solo de victoria.
- Señor Thompson - dijo Taylor. Por más que se odien tienen que ser respetuosos uno con el otro, uno es el jefe y el otro el editor.
- ¿Qué vas a tomar Tay? - le habló feliz a Taylor tomándolo de la mano, Taylor me quitó la vista y se concentró en Rebecca, ¿Cómo se habrán conocido?. Harry seguía concentrado en ellos dos ¿Tanto le molesta que Rebecca esté con Taylor? Porque la verdad que para mí es un verdadero alivio, siento que Taylor se podría olvidar de mi y así no hacerle daño, y Rebecca jamás volvería a molestar a Harry. Me solté de Harry y di media vuelta a buscar mi Martini, me da miedo la respuesta o reacción que pueda encontrar si le pregunto si está celoso.
- ¿Cómo está su trago señorita Thompson? - sentí las miradas de Rebecca y Taylor sobre mí , casi devuelvo el martini directo al rostro del bar man por atorarme, ¿Señorita Thompson? ¿De dónde saco que yo soy la señorita Thompson? ¡¡Por dios ni siquiera me quiere pedir que sea su novia!!.
- El mejor martini que he probado, gracias - le respondí amable y me giré a mirar a Harry, le levanté un ceja y se hizo el desentendido - Harry - le dije sería.
- Esta bien fui yo, le dije que nos registrara así cada vez que pidiéramos tragos - puso los ojos en blanco y me dio un beso en la mejilla - ¿Qué estará haciendo Clifford? - preguntó tierno, yo abrí los ojos sorprendida, ahora es él el que anda preocupado del perro - Espero que esté cuidando mi piso de los ladrones - dijo serio volviendo a su postura de señor arrogante, me puse a reír. Le iba a hablar, pero escuché una voz chillona que me desconcentró.
- Tío Harry - una mujer más alta que yo se tiró a los brazos de Harry, es muy esbelta, es rubia casi platinada de ojos bien azules, es perfecta, parece sacada de una revista como su tío, es increíble lo que hace la genética, y yo aquí con mi cabello negro y mis ojos cafés, no sé qué me ve Harry si soy de lo más común. Harry comenzó a dar vueltas en el aire con ella.
- Aislinn cada días más hermosa como tú tío - le dijo riendo, miré bien el rostro de su sobrina y quiero que la tierra me tragué, me veo menor que ella - Te quiero presentar a Mia - le dijo Harry, y Aislinn recién se fijó en mi presencia. En eso apareció otra mujer, es igual a Aislinn pero mayor.
- Hermano - Harry la miró y la abrazó, Aislinn no me ha quitado ojo de encima, me estoy sintiendo incómoda.
- Kate te aprovecho de presentar a Mia - le dijo Harry y Kate me iba a saludar, pero Aislinn abrió su boca.
- ¿Enserio Harry? Acostándote con una chica que podría ser una de mis amigas ¿Alguna vez te has acostado con alguna de mis amigas? - Kate abrió los ojos enormes.
- Por supuesto que no ¿Qué te crees que soy? - respondió molesto Harry.
- Aislinn - le reprochó esta, pero ella se fue de inmediato sin saludarme, Kate me miró a mi con rostro de disculpa y me saludo dándome un abrazo y un beso en la mejilla, cuando nos alejamos Harry tampoco estaba a mi alrededor.
- Discúlpala ¿Si? Es la primera vez que Harry presenta a alguien en la familia debe estar celosa de su tío regalón - me dijo con las manos tomadas.
- Si claro - respondí nerviosa titubeando.
- Un gusto en conocerte Mia, no estamos viendo, disfruta - dijo marchándose.
- Gracias - le respondí y sola me acerqué de nuevo a la barra a pedir otro martini, esta vez le pedí al Bar Man que solo me dijera Mia, que olvidara el "Señorita Thompson". Tomé el martini que me entregó y me puse a caminar buscando a Harry, camine hacia las Terrazas, por los pasillos, hasta que vi a Harry, Aislinn, los padres de Harry, Kate, dos hombres que no conozco y otra mujer. Aislinn estaba eufórica hablando y Harry molesto, intenté acercarme un poco, para poder escuchar, me mezclé entre la gente hasta que llegué detrás de un pilar.
- Dime tío ¿Qué me dirías tú si llego a presentarte a un muchacho pobre que trabaja en una cafetería que ni siquiera ha terminado la universidad? - quedó un silencio incómodo y yo tengo ganas de llorar, definitivamente no estoy para esto, aguantar que me basureen, mi inseguridad está creciendo demasiado, a lo mejor toda la familia de Harry opina lo mismo, pero por educación y respeto me saludaron.
- Se acabó, yo mañana no iré a ese estupido almuerzo, que tengan buen viaje de vuelta a sus casas - dijo Harry enfadado subiendo la voz largándose del lugar. Vi que Kate tomó del brazo a Aislinn y se la llevó de ahí y pude notar la tristeza de Louisa en sus ojos por ver a su hijo marcharse. Me puse a caminar a la salida, me quiero ir de aquí, si Harry anduviera con Rebecca del brazo no hubiese pasado nada de esto. Dejé la copa en una mesa y seguí caminando.
- Mia - me llamó Taylor, no quiero que me vea así de afectada, solo me restregará en el rostro que él tiene razón - Mia - me tiró del brazo para detenerme - ¿Estás bien? - me preguntó cuando me giró.
- Si gracias - respondí rápido soltándome, Taylor levantó la vista tras de mí y yo me giré rápido para seguir en mi huida, pero choqué con algo o con alguien, levanté la vista y era Harry. Me tomó la mano fuerte y nos pusimos a caminar hacia la salida, cuando llegamos al final de las escaleras su auto estaba esperando por nosotros. Nos subimos y se puso a manejar.
- Perdóname por traerte aquí, nunca debí traerte aquí - dijo molesto.
- Es tu mundo Harry, es tu vida, es tu familia, ¿A dónde más me hubieses llevado? - Harry me miró con tristeza a los ojos - Es como si yo me disculpara por llevarte a la cafetería, me disculpara por presentarte a José y a Stephanie, ese es mi mundo, no te podría llevar a otro - las lágrimas rodaban por mi rostro.
- Maldita sea - dijo casi en un susurro imperceptible pasando una mano por su cabello con frustración.
Llegamos a su piso y Clifford corrió hacia nosotros cuando las puertas del ascensor se abrieron, Harry se agachó a recogerlo y se encaminó hacia la cocina, yo subí las escaleras directo a la habitación. No quiero perder a Harry, prefiero tener a todo el mundo en nuestra contra que no tener un mundo con él, dios que estoy hablando, él es mi maldito mundo. Volví a bajar la escaleras y estaba sentado en el sofá con la camisa arremangada, los primeros botones desabrochado, la humita alrededor de su cuello desarmada, la chaqueta tirada en el otro sofá, bebiendo un vaso de whisky con una mano, haciéndole cariño al perro con la otra. Cuando me escuchó llegar a bajo me miró.
- Pensé que me ayudarías a quitarme el vestido - traté de sonar coqueta, pero estoy hecha un verdadero desastre dentro. Harry se bebió el whisky de golpe y se paró caminando lleno de seguridad hacia a mí.
- Pensé que no querías - dijo en tono burlesco con su sonrisa seductora.

- Mia tengo hambre, vamos a tomar desayuno - No me puedo mover, siento que me duele todo el cuerpo, estoy muy cansada, no quiero abrir los ojos - Mia por favor tengo hambre - Harry me movía con fuerza como si fuera un niño pequeño despertando a su madre.
- No quiero - le respondí agarrándome de la almohada.
- Mia encargue croissant y capuchinos del Starbucks's - el apetito apareció de inmediato.
- ¿Enserio? - le dije levantando mi cabeza para mirarlo.
- Si - respondió levantándose de la cama, mientras trataba de reaccionar me senté a observar como se ponía un buzo deportivo - Vístete con lo que sea, pero vístete - dijo observándome.
- ¿Por qué? - arrugué la frente.
- Porque te sorprendería como es mi familia - dijo poniendo los ojos en blanco saliendo de la habitación. Me puse unas mallas deportivas con una camiseta y bajé, no sé a qué se referirá con lo de su familia, pero debe ser que llegan y aparecen en cualquier momento ¿No? ¿Si? No sé, lo primero que vi al llegar abajo fueron las bolsas Starbucks's.
- ¿Regaloneamos en el sofa? - preguntó tomando las bolsas.
- ¡Si! - grité corriendo hacia él feliz. Me tiré en el sofá y tome a Clifford para que se quedara cerca de nosotros, pero caminó por el sofá lejos de nosotros y se echó a dormir.
- Está grande - dijo Harry observándolo.
- Maldito perro, crece y me olvida - dije agarrando mi corazón echándome hacia atrás.
- ¿Veamos Sherlock? - preguntó concentrado buscando en Netflix.
- Si, me gusta - traté de pronunciar con la boca llena de croissant.
- Siempre tan delicada - me observó comiendo - Mia tienes Croissant hasta en el cabello.
- Mentiroso - lo miré seria y él se puso a reír.
- ¿Qué te dijo Taylor? - se puso serio, moví la cabeza negando, no quiero repetir las palabras que utilizó Taylor, que solo soy una entretención para él.
- Nada, no lo cree del todo, pero tendrá que aceptarlo - el teléfono de Harry sonó y lo tomó de inmediato, observó la pantalla y me miró con desagrado.
- Prepárate para lo que viene.
- ¿Qué? - pregunté con miedo por su rostro.
- 3, 2, 1 - Contó y las puertas del ascensor se abrieron.