—¡Agáchate!
Una bola de fuego bola por encima de su cabeza rozando con su cabello. Gabriela sintió como la parte superior de su cabello estaba un poco quemado.
—¡Papa! —grito histérico—. ¡Lo has hecho a propósito!
—¡Claro que lo hice a propósito! —su padre se acercó molesto—. Se supone que eres la guardiana de Liam y debes protegerlo.
—¿Para qué mierda quiero proteger al idiota de Liam? —gruño Gabriela.
—¡Oye! —grito Liam—. ¡Yo seré tu rey!
—Es cierto —hablo Estefan—. Si nos atacan, yo estaré más preocupado en salvar mi propio trasero.
—En conclusión —dijo Bael—. A nadie le interesa cuidar a Liam.
—No te preocupes hermano —Theo palmeo la espalda de Liam brindándole su apoyo—. Yo si te protegeré.
—¡Gracias! —Liam estaba indignado—. Estoy pensando seriamente en votarlos a todos ustedes malditos del escuadrón, no me merecen.
—Dejen de hablar sandeces —los callo Alan, padre de Gabriela y Bael—. Liana dime ¿Cuáles fueron sus récords?
La pequeña Liana acomodó sus lentes y los miró a todos seriamente.
—Theo pudo esquivar todas las bolas de fuego como siempre, a Liam solo lo toca una, Estefan fue atacado por 10 bolas, Bael 13 y Gabriela casi la toca una pero no evitó que los demás ataquen a Liam, que era su principal tarea.
—Chismosa fea cuatro ojos... —Gabriela asesina a la niña con la mirada.
—Gabriela discúlpate con Liana —su padre la reprendió.
—No se preocupe tío Alan —Liana seguía muy seria—. No me afectan las palabras de alguien que tiene el coeficiente intelectual más bajo que el de mi hermano de 6 años.
Todos estallaron en carcajadas y Gabriela se molestó más.
—Gabriela —su papá se dirigió a ella—, vas a hacer 200 planchas mañana por la mañana.
—¡Pero mañana empezamos la escuela! —Gabriela lo miro haciendo puchero y poniendo ojos de cachorro—. Mañana tengo que levantarme temprano para alistarme papi, ¿En qué momento haré planchas?
Alan suspira.
—Está bien, ¡pero lo harás el fin de semana! —miro a Liana—. Vámonos nosotros primero, ellos se quedarán a recoger todos los instrumentos de entrenamiento, además que Angel y Alan junior deben estar haciendo berrinche por no traerlos.
Todos los vieron partir.
—Ya escucharon —Gabriela se sentó encima de una roca—. Pónganse a recoger las cosas.
Estafan y Bael se acercaron a ella cargándola sin su permiso y lanzándola al suelo.
—Idiotas —Gabriela se levantaba con ayuda de Theo—. ¡Amor golpéalos!
—Yo no puedo golpear a tus hermanos —sonrió Theo—. ¿Te recuerdo que son mis amigos?
—Yo no soy su hermano —replicó Estefan—. Soy su primo.
—Por favor —Liam empezaba a recoger cosas—. Pareces el gemelo de Bael y el mellizo de Gabriela.
—A veces yo no sé quién es quién —Theo rodeo a Gabriela con sus brazos—. Realmente parecen trillizos.