Capítulo 3: El que se cambió a la otra acera

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3-El que se cambió a la otra acera

**Soujun**

Siento como las enormes manos de mi cliente recorren mi kimono relamiéndose. Mi padre me ha dicho que uno de sus clientes habituales estaba muy interesado en mí y no hay más que ver el impacto que le he causado y más cuando le empujo suavemente para que se aparte y me deje quitarme el kimono quedándome por completo desnudo ante él.

-Dioses...te voy a comer entero, muñeco...- trago saliva cuando se me acerca de nuevo y lame mi rostro haciéndome cerrar los ojos. Yammy es un hombre gigantesco de más de dos metros de altura, de piel oscura que me deja ver en su plenitud cuando se desnuda y abro los ojos al ver su polla medio erecta, tan grande y gruesa que apenas parece real.

-¿Te gusta, eh? Te brillan los ojos con solo verla ¡cómetela! – suspiro profundamente antes de arrodillarme en el suelo ante él y empiezo a dar pequeñas lamidas sobre su tronco, aspirando su intenso aroma en esta zona. Es demasiado fuerte y al principio me da arcadas, pero las reprimo intentando calmarme y empiezo a meterme en la boca su hinchado glande, haciéndole gruñir de placer.

-Aaah, eso es...muy bien, precioso...- sigo succionando lo que puedo con los ojos cerrados intentando dejarme llevar como de costumbre y abro los ojos cuando siento que ha alzado sus dedos para meterme uno en el ano haciéndome estremecer.

-Ah! Espera...- noto la irrupción de otro dedo y tengo que dejar de succionar apartando mi rostro para poder jadear. Él acaricia mi mentón, manchado por algo de su semen y después me abraza para comerme la boca de una manera tan ruda y bruta que me hace gemir gutural. Siento como su lengua es tan larga que me lame todos los recovecos de la boca. Me siento mareado, ha metido un tercer dedo en mi culo y como siga moviéndolos me voy a correr enseguida.

-Aún no, precioso...primero tienes que succionarme la polla- noto como mi cuerpo es empujado hacia la cama cayendo boca arriba y Yammy no se espera a abrirme de piernas, atrayéndome hacia él para poder metérmela haciéndome gritar agarrándome a las sábanas.

-Ah!! Ah!!! Es...demasiado...gran...de...ah...-

-Te acostumbrarás...mi polla es la favorita de tu padre y será la tuya en cuanto te dejes llevar...- no puedo dejar de gemir mientras esa monstruosidad me quema las entrañas y hasta me revuelve el vientre. Aprieto las sábanas fuertemente mientras mis gritos inundan la habitación y noto como Yammy clava sus dedos en mis muslos cuando se corre dentro del condón que se ha puesto antes de metérmela. Yo me corro sobre su pecho y me quedo jadeando y mareado sobre la cama mientras él gruñe como un animal herido.

-Dame más, precioso...- vuelvo a gritar cuando me vuelve a penetrar, aunque esta vez me ha tumbado boca abajo y levantado el culo para metérmela. Yo chillo mientras mi cuerpo se sacude en la cama a cuatro patas y mi cabello cae en cascada a mis costados mientras el placer supera el dolor. Ah dioses...está tan profundo...me está abriendo las entrañas con tanta embestida, mi vientre tiembla y no puedo evitar correrme de nuevo....

-Arf...ah...- intento respirar después de esta nueva acometida intensa y Yammy se echa sobre mí para devorar mi boca. Se aparta enseñándome cómo mete la lengua de nuevo en mi boca y yo saco la mía para recibirla, ahogándonos en un beso sucio y retorcido mientras nuestras pollas se frotan, aunque la mía no se compara en absoluto a la suya.

- ¿Más? -

-Ah...sí...más...otra vez...- Yammy sonríe malicioso antes de tirar de mí para erguirme y que me siente sobre su enorme cuerpo. Cierro los ojos cuando me aprieta las nalgas y yo me froto contra su dureza lascivamente.

-Ahora a pelo, pequeño...voy a rellenarte, aunque ya estés preñado...-

-Ah...ah...mmm...sí...córrete mucho...- él se ríe antes de que yo empiece a empalarme con su ayuda. Aprieto mis manos sobre las suyas aguantando el equilibrio mientras me meto su polla entera en mi agujero dilatado y ambos nos estremecemos al contacto piel con piel. Delicioso. Follar estando preñado sin condón es...increíble...aunque más maravilloso sería hacer con él, pero no puedo pensar en ello o me desmorono...necesito el dinero y Yammy me va a pagar muy, pero que muy bien por mi servicio...

"El síndrome de la testosterona"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora