DELTA [ShowKi]

⊰Capítulo 3⊱

JooHeon quien huyó de aquel lugar con intención de buscar a HoSeok corría con todas las fuerzas que su cuerpo le permitía con el viento golpearle con brusquedad y sus sienes palpitar ; pudo escuchar pasos acelerados acercándose a él a gran velocidad, no reaccionó a tiempo y uno de los lobos que le perseguían le aprisionó la pata trasera entre sus colmillos con fuerza haciendo que se impactara en el suelo, gruñó por el dolor y le mordió el lomo para que lo soltara, renqueo hasta estar a cierta distancia poniéndose en guardia mostrando sus dientes para verse más intimidante, los lobos contrarios le miraron y comenzaron a caminar de manera lenta a su alrededor bloqueando las posibles rutas que podría tomar.

Cuando saltaron todos juntos el alfa aprovecho y tomo la cola de uno lanzándolo lejos logrando golpear a los otros para hacerlos retroceder, uno logró esquivarlo con agilidad y comenzó con el alfa una batalla, JooHeon trataba de morder lo más fuerte que podía para hacerle daño pero no para matarlo, aunque quisiera sobrevivir (y lo deseaba muchísimo) se negaba a matarlos, jamás se convertiría en un asesino, incluso si eso conlleva a sobrevivir.

Logró escabullirse y dio un fuerte aullido a los cielos con gran esperanza de que fuera oído. Sabía que eso era una ofensa para un alfa, un alfa no pedía ayuda, un alfa luchaba hasta ganar, un alfa era valiente. Pero JooHeon sabía que no podía solo y peor en el estado en el que se le dificultaba el correr.

Tomó a un lobo de la garganta y la aprisiono con los dientes haciéndole daño, el suficiente para retenerlo y deshacerse de él. Unos dientes se clavaron en su espalda haciendo que soltara al lobo enemigo dejando que un grito de dolor resonó en modo de gimoteo. Cayó al suelo de golpe sintiendo sus músculos temblar y que algo caliente caía por su pelaje sintiendo ardor en todas partes, sus atacantes volvían y caminaban hacia él de manera amenazante, el joven alfa juraría que si estuvieran en su forma humana, todos llevarían en sus rostros una sádica sonrisa como asesinos. ¿Lo iban a matar? ¿Entre todos le arrancaran las extremidades y probablemente se lo coman? Tenía miedo.

Respiración agitada, el corazón latiendo de manera peligrosa que podría detenerse en cualquier momento, JooHeon sentía como el espacio se iba reduciendo entre ellos y temía lo peor. Y de repente, se escuchó un crujido seco. Sus orejas se levantaron instantáneamente, no quería pensar que fue su imaginación, había escuchado algo y los otros lobos también lo escucharon dándole la razón del sonido, algo se acercaba. Los lobos desconocidos que atacaban a JooHeon miraron de reojo hacia atrás, y de repente, como si se tratara de un verdadero milagro una gran tropa de lobos rugieron al ataque saltando de los adentros del bosque, posicionándose a sus lados protegiéndolo, de entre todo ellos reconoció al que estaba a la cabeza de esa manada, un lobo color níveo salió de entre la penumbra, aulló dando la señal de ataque. JooHeon apartó la mirada mientras trataba de levantarse con ayuda de al parecer lobas que se mantuvieron atrás de él, sus atacantes salieron corriendo desapareciendo cuando vieron una oportunidad de irse, sus lobos fueron tras ellos a toda velocidad.

El alfa cuando pudo estar de pie unas mujeres se acercaron a él y comenzaron a limpiarle las heridas, dando prioridad a la que tenía en el lomo y en su pata trasera, HoSeok ya en su forma humana se acercó al menor. Acarició al lobo con intenciones de calmar los temblores de su cuerpo dándole a entender que el mal momento pasó. Las lobas y mujeres se retiraron cuando HoSeok les agradeció por su ayuda.

—No te preocupes JooHeon, ya mis hombres los están buscando. Afortunadamente pude escuchar tu aullido, incluso gente del pueblo se ofreció para venir a ayudarte—

JooHeon lo alejó con sus patas sorprendiendo al beta, se volvió humano y sollozo golpeando el suelo con ambas manos hechas puño sin levantar la cabeza.