Cuando sus dedos hicieron presión en el cristal supo inmediatamente que estaba completamente frío, empujó las grandes ventanas de par en par dejando que el aire gélido entrara a la mansión y la sensación fría le golpeara en el rostro. El cielo que en su mayoría estaba de un limpio tono azul en el pasado ahora estaba abrigado de densas nubes grises cubriéndolo, quizás era una señal de que una posible llovizna se aproxime. Donde ahora se encontraba era un gran salón ubicado en la segunda planta, su piso era de una madera caoba oscura que tenía un patrón que terminaba hasta donde comenzaban las paredes, era extenso y su decoración en las paredes tenían toques elegantes de dorado, incluso tenía dos columnas ubicadas en el centro del salón. En la parte del techo colgaba un gran candelabro de cristal puro que se balanceaba en movimientos suaves por la intromisión del aire que entraba por el gran ventanal recién abierto. En ocasiones, cuando el sol daba en un punto exacto en el cielo los cristales que conforman al candelabro brillaban como pequeños diamantes que flotaban en el aire, pero ahora por la poca iluminación que brindaba el día se veían insignificantes. Se giró fijando su mirada en la gran vista que se expande frente a él dándole un maravilloso paisaje montañoso y boscoso, cerró sus ojos y aspiró el aire que le acariciaba las mejillas. Después de todo, tuvo que salir a caminar por los alrededores si no quería enloquecer al no tener sus pensamientos en un orden, y vaya que la mansión de los Son le sorprendía por todo lo que podía encontrar incluso quizás haya cosas que no sepa aún, todo estaba cuidado meticulosamente que podría jurar que esta mansión fue una de las primeras en crearse cuando el territorio se dividió en clanes. Pero incluso con este gran tamaño de arquitectura y posible valor histórico donde había centenar de personas trabajando en ella; desde cocineros, guardias, mozos y mozas se podía sentir la soledad que emanaba en cada lugar en el que estuvieras. Como un lugar abandonado a la espera de que sus paredes y demás muebles sean cubiertos por un manto de polvo en el olvido y desinterés. Era como si habitaran miles de personas en esta pero no se sintiera vida alguna. Posó sus manos en el borde de madera del ventanal e inclinó un poco su cuerpo hacia adelante para poder sentir mucho mejor el viento removerle su cabello.
—¿Qué haces aquí?— Preguntó HyunWoo curioso mirando la espalda del delta. KiHyun volvió su cuerpo hacia atrás y miró por encima de su hombro al alfa volvió a mirar por el ventanal, pero no hizo ningún comentario después de unos minutos teniendo su vista en el exterior.
—Solo quise salir de la habitación. Tomar un poco de aire— Sintió como HyunWoo se paraba a un lado de él mirando por igual el paisaje con la mirada calmada que le caracterizaba.
—Es verdad que hoy el clima es agradable—
—Creo que ya es temporada de que comiencen las lluvias— Suspiró fijando sus ojos a las densas nubes que se deslizaban por el cielo. —El viento está frío y el cielo se está comenzando a nublar—
—¿Te parece si damos un paseo?— Propuso aún sin dirigirle la mirada. No se movió, o siquiera habló esperando paciente una respuesta del contrario sin importar que fuera positiva o negativa.
—¿Paseo...?— Le miró cauteloso, calmando su tono de voz para que no sonara desconfiado o alarmado ante la sorpresa de la propuesta. Apretó los labios y se quedó callado.
—Sí. Tampoco no pienses en cosas descabelladas— Dejó escapar una suave risa. Finalmente se giró y le miró.
KiHyun bajó la mirada hasta uno de sus brazos donde ahora no había marcas de una posible agresión, más sin embargo algunas de sus heridas aún se mantenía cubiertas por vendas que estaban ocultas debajo de su ropa.
—No pensaba hacerlo— Sonrió desganado. Miró de reojo a HyunWoo para analizarlo con cuidado en sí alguna acción delatara su verdadera intención, estaba bastante tranquilo y solo le miraba con curiosidad en sus ojos, aunque no era de fiar. —Me parece bien— Respondió finalmente.
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DELTA [ShowKi]
FanfictionEn el momento en que pensó que moriría, deseó con muchas ganas el sobrevivir y no sucumbir a la oscuridad; pero cuando abrió sus ojos, con cansancio y dolor, se dio cuenta que en verdad hubiera sido mejor el haber muerto en el bosque. Ahora tendrá...