⊰Capítulo 19⊱

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Este capítulo es exageradamente largo (incluso estoy sorprendida). Así que tómense el tiempo para leerlo, no se sientan con presión, pues la comodidad es lo primero. Gracias y disfruten.


A veces para tener respuestas debemos de recordar el pasado.

No siempre mantendría todos sus recuerdos intactos, la mente era muy compleja y delicada que por cualquier descuido de su realidad podría incluso olvidarse de quien es, pero aún se esforzaba por mantener toda memoria guardada con cuidado, hablando en su mente para no dejar esas memorias en las sombras del olvido o volverse loco (porque alguien que estuviera en su situación ya lo hubiera hecho) como una forma de no perderse. Pero se preguntaba a veces ¿por qué esa noche la recordaba con total detalle?

Para poder entender, o al menos tratar de saber una respuesta concreta a su pregunta debía de recapitular su vida desde que tenía uso de razón de su existencia. Si hablaba de sus adorados padres; jamás lo trataron mal, lo criaron con buenos modales y valores para ser, en palabras de su madre "un alfa digno de admirar", que junto a su hermana formarían un gran y estable clan durante generaciones futuras (o al menos eso pensaba). Era verdad que las tierras pertenecientes a su familia eran abundantes en riquezas, que parecía un paraíso intocable (aunque cada clan era así). Estaba seguro que jamás dejaría que su clan pereciera, esa fue su gran motivación personal desde muy pequeño. Quien tendría el puesto de beta sería su hermana melliza Lee Dior, una dama con un gran futuro y de belleza radiante con su largo cabello rojizo, ella sería el pilar para que junto a él el clan Lee fuera definitivamente grandioso. Se podría pasar todo el día junto con su melliza escuchando a su padre hablar horas y horas de enseñanzas útiles en un futuro que jamás logró ver. Su niñez fue buena, no podía quejarse o mentir diciendo que no lo trataron con amor y respeto, su familia era perfecta y estable. Todo un sueño, se esforzaba tanto a ser buen dotado que incluso memorizaba el nombre de sus futuros compañeros de diferentes clanes. Esto parecería una vida bastante normal y monótona de un niño prodigio de buena familia, hubiera deseado eso con todo su corazón.

A la edad de 15 años fue cuando todo comenzó a cambiar en su vida en un giro tan brusco que a veces aún en el presente se negaba a creer que en realidad había pasado. Un día, alguien se encargó de entregar una carta que al parecer iba dirigida a sus padres, Dior fue quien la había recibido y sin esperar llamó a su mellizo para contarle.

—Min, Min— Llamaba insistentemente la pelirroja y movía su mano para que fuera más rápido al ver al llamado cruzar una de las esquinas del pasillo de los extremos de la mansión para llegar a la entrada de puertas caoba.

Dior era igual físicamente a MinHyuk, era incluso un poco graciosos que lograran hacer las mismas expresiones inconsistentemente. Solo que esta beta al contrario de su hermano era más perspicaz.

—¿Qué pasa? la casa retumba con tus gritos— Reclamó.

—Mira— Alzó su mano para que viera lo que tenía en su mano. Ahí fue cuando le mostró lo que suponía en la actualidad, su condena.

La carta que le habían entregado a Dior estaba completamente arrugada, no parecía ser de un asunto urgente y daba la sensación de ser de alguien que solamente quería dar un saludo o un mensaje nada importante, el papel era amarillento y ni siquiera se veía que la doblaron con cuidado. La analizó con detenimiento únicamente encontrando la palabra "Clan Lee" como única firma, la revisó nuevamente y no encontró de dónde provenía o el nombre de la persona dueña de la carta, se veía tan informal el sobre que parecía que estaban apurados o que se trataba de una broma de mal gusto.

DELTA [ShowKi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora