The barman (KookMin) ~ [Terminada]

12. 🍸💕

Jimin por primera vez en su vida deseo que el tiempo se detuviera y estar así abrazado por Jungkook por siempre, la sola idea de que en algún momento el amanecer terminaría y tendrían que volver a casa le ponía triste.

Jungkook acariciaba sus cabellos con dulzura, su cuerpo estaba recostado sobre el de su novio y juntos estaban sobre la arena cubiertos con la manta caliente observando el horizonte mientras el sol terminaba de aparecer sobre el cielo anaranjado y rojo.

La vista era espectacularmente bella para Jimin una que no creía poder olvidar, sin duda su primera cita se había convertido en su día favorito.

Después del encuentro tan intenso en el agua, Jungkook les había sacado y se habían dado calor con la manta extra que traía, los planes del pelinegro eran llevar las cosas con calma, pero por alguna razón había perdido los estribos al probar los labios dulces de su Hyung. Se prometió ser mucho más cuidadoso de ahora en adelante, para él no era la primera vez, desde mucho antes de la muerte de sus padres sabía que era bisexual, había tenido novias y novios por igual, cabe decir que no era virgen por obviedad, pero su Jimin si, por lo que prolongaría lo más que pudiera su primera vez.

La virginidad de Jimin no era algo que podía tomar a la ligera, la pureza de su novio era una cosa mucho más valiosa que su vida y solo hasta que él se sintiera digno de poder tomarla se propasaría con el como lo había hecho hace unas cuantas horas.

— ¿En qué tanto piensas Jungkookie? — El menor bajo su mirada buscando los bellos ojos de su novio.

Jimin se presionó más en el regazo de Jungkook mientras acomodaba su barbilla en su clavícula esperando una respuesta. El sol comenzaba a brillar sobre sus cabellos negros, permitiéndole verse mucho más angelical.

— No quiero que este día acabe — Susurró juntando sus frentes — Ha sido el mejor día de mi vida...

— El mío igual Jungkookie...

Sus labios se juntaron una vez más cepillándose entre toques suaves, las grandes manos de Jungkook siempre se presionaban a su cuerpo en cada succión como si este se contuviera de no ser brusco. El estar lejos cada vez se les hacía mucho más difícil, para estar saliendo por casi un mes parecía como si se conocieran desde hace años.

— Siempre me emocionó ver el amanecer... — Confesó el mayor, observando al sol tomar su lugar en el cielo

— Lo sé — Rio Rabbit recordando sus pláticas en el a cafetería.

— Pero ahora adoro más el hecho de verlo contigo~...

Jimin le escucho sonreír para luego sintir como este dejaba un sin fin de besos sobre su cabeza.

El viaje de regreso había sido tan corto para ambos chicos que odiaron el hecho de que las calles no tuvieran tráfico y así poder disfrutar de la cercanía de su pareja.