The barman (KookMin) ~ [Terminada]

24. 🍸💕🔞

Jimin y Taehyung se miraron entre sí antes de despedirse, ambos se encontraban frente al elevador mientras que Hoseok esperaba pacientemente en el auto. La noche había llegado muy rápido para cierto peliverde, el haber salido de compras con Jiminnie era una las cosas divertidas que agregaría a su lista de distracción, realmente no sabia que habria sido de su amigo sino intervenía ese día.

De la manera más rápida había dado a conocer todo lo que sabía aunque dudaba que realmente el pelinegro logrará captar más de un 50% de lo que había dicho, pero vamos el chico ni siquiera sabía que debían prepararlo de ahí abajo antes de la verdadera acción. Y eso no significaba que Jeon no supiera, simplemente él quería evitar que se viera con un maldito virgen.

Aunque en realidad fuera un maldito virgen...

— Recuerda todo lo que dije — Dando tres palmas en el hombro de su amigo le empujó dentro del elevador y apuntando con su dedo índice finalizó — Que disfrutes esta noche Jiminnie~

Las puertas del elevador se cerraron dejando solo consigo la musiquita de circo que comúnmente mantiene en su recorrido, Jimin por su parte suspiró en busca de calma y al menos tratar de controlar sus nervios, olvidando la incomodidad de su nueva ropa interior.

Pero no parecía funcionar, pues cada que los números del pequeño elevador se movían avisando la llegada del piso de su novio su corazón parecía acelerarse un tanto más cada segundo. Las puertas se abrieron mostrando un pasillo medianamente viejo, sus piernas se movieron por sí solas en un primer paso, buscando la puerta conocida del pequeño departamento.

— S-Solo relájate y actúa normal — Se repitió a sí mismo con su mano temblando sobre la cerradura.

No es que tuviera miedo de Rabbits sino de sí mismo, al ser alguien inexperto con un solo orgasmo en su vida, no tenia ni puta idea de cómo insinuarsele a su novio y mucho menos iniciar algo, solo esperaba que el llevar ropa tan incómoda valiera la pena al final de la noche.

El sonidito de verificación de la cerradura del código correcto fue la pauta que tuvo para empujar con valentía y fuerza la puerta. Pero para su sorpresa algo totalmente inesperado logró asombrarlo mucho más que los relatos de sexo de su amigo Tae.

— O-Oh Dios — Gimió asombrado admirando la belleza de decoración.

Sin salir de su asombro camino a paso lento hasta el medio de la sala admirando todo, sus pequeñas manitas acariciaron efímeramente las bellas rosas de la entrada, las velas que hacían la luz tenue del lugar estaban esparcidas en varios lugares sobre el suelo.

Formando una maravillosa y romántica vista.

El pequeño estaba tan inmerso en la bella decoración, que no sintió la presencia de su amado novio sobre la cocina, solo hasta que este le abrazó desde atrás pegando su pecho a su espalda, igual que su pelvis mientras su mano derecha se colaba en su estómago y su izquierda hacía presión a un lado de su cintura para que no huyera de su tacto.