Rompiendo el hielo || BNET

Capítulo 3

Prendí el televisor de la habitación en lo que esperábamos la pizza y los dulces.

—Siéntate, no puedes quedarte todo el día ahí parado—Le señale la cama para que se sentará. Me sonrió y se sentó del lado derecho de la cama así que me coloque a su lado.

—¿Quieres ver una película o practicar?—Me miró divertido, podíamos hacer ambas cosas pero batallar un rato sería interesante.

—Podemos batallar, pero yo quiero ser tu—Me miro con el ceño fruncido de mostrándome que no entendía a que me refería—Que intercambiemos papeles, yo quiero ser Bnet el chico inexpresivo y tu serás yo.

—Bueno, si eso quieres—Me miró divertido soltando una leve risa.

Sería una forma interesante de pasar el rato en lo que esperábamos la pizza.

—Pon una base—Dijo feliz.

—¿Doble tempo?—Le dije mientras escogía una base desde mi celular para conectarlo a la pantalla.

—Como quieras Bnet—Soltó una risa, claro ahora yo era Bnet.

—Bueno, empezó yo—Asintió y comence a hacer estructuras aunque realmente nunca han sido mi especialidad—Bueno si te da risa mis estructuras ya no quiero—Hice un puchero para demostrarle mi indignación así que pare la base.

—No, solo no te había visto hacer estructuras, aun así suenas bien—Recargo su mano en mi hombro y le devolví la sonrisa.

—Bueno, te toca Kinich—Asintió y comenzó a rimar a mi estilo de doble tempo aunque se traba por intentar hacer su voz aguda.

—¡Yo no rimo así!—Soltó una carcajada, lo mire mal así que yo también puedo imitar—Soy BNET el chico de hielo, joder tío mira las gilipolleces que dices—Lo imite exagerando si acento y tratando de hacer mas grave mi voz.

—Bueno, yo no hablo así güey.

—Joder chaval, parece una guerra de acentos y no de rap—Ambos reímos.

—Bueno, bueno— Sonrió— ¿Tregua?—Acentí.

—Me agradas mucho, ¿sabías?

—Yo te quiero, eres una amiga muy importante para mi —Sonrió.

Auch, por dentro eso había dolido. No esperaba un te amo o una propuesta de matrimonio pero tal vez que me dieran indicios de que algo podría darse en el futuro.

—Ay, sabes que tu también eres un gran amigo—Lo abracé por el cuello, no iba a demostrarle que me interesaba de otra forma.

Tocaron la puerta así que me separé de él para abrir.

—Servicio al cuarto, le entrego una pizza y un combo de dulces—Le sonreí de forma amable.

—Si, gracias—Espere a que diera la vuelta y cerré la puerta.

—Me encanta que Urban nos pague estas comidas—Ambos reímos.

—A mi también—miré la hora en mi celular y eran las 11:48 p.m. No era tan tarde—Sabes, si quieres puedes dormir aquí hoy.

Pensó un momento y después se le formó una sonrisa en el rostro.

—Claro, a Skone no le importara.

—¿Quieres que nos acostemos de una vez en lo que vemos la película?—Me puse algo roja al decir eso, tal vez porque lo podría mal interpretar.

—Claro, cambiate en el baño y yo te espero aquí.

Tome mi pijama que realmente era un short cualquiera y una camisa grande, me quite el maquillaje y después de cambiarme salí de nuevo. Pensé que no se lo tomaría tan en serio pero estaba metido entre las sábanas con la pizza arriba de estas y los dulces en una bandeja.