¡no soy jimin! || bts; jungkook

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— ¿Y si hablas de tu primer novio? — Seokjin sugirió de manera elocuente, mientras golpeaba la goma de borrar del lápiz contra su libreta con escritos de quehaceres. Su agenda estaba llena cuando su tesis se acercaba, pero nada que no pudiese evitar que Jin de encontrará a mi lado ayudándome. Brame con hastío, tratando de ventilar mi frustración que aquel poema de mierda conllevaba en los últimos días. Rasque mi cabeza tratando de buscar algún tipo de inspiración que me llevase a mover mis dedos en el teclado de mi laptop.

— ¿Sehun? Ew, claro que no. Ese fue el peor novio que tuve — mi cara se transformó en asco—. ¿Te acuerdas cuando olvidaba siempre mi apellido? ¡Era un idiota que solo tenía ganas de tocar senos por primera vez! — y bueno, aquello no era mentira. A los catorce años mi primer novio había sido un patán, uno de esos niños egocéntricos que no podían aceptar el rechazo y encontró una manera de hacerme aceptar su propuesta de noviazgo. Que gracias a Dios solo duró dos meses.

— Mhmm... ¿Que tal...? ¡Oh, ese chico que estuvo contigo a principios del segundo semestre! El italiano.

— Si quieres que escriba acerca de cómo le quité la virginidad a un desesperado que no me quería, de acuerdo — ironicé.

— Está bien... Entonces habla de... ¿Tu primer amor? — alzó la ceja, sugerente. Si, Hobi le había hablado algo a Seokjin para que pareciera burlarse en mi cara por la expresión expectante que tenía.

— Definitivamente no hablaré de Taehyung y sus mocos. Aparte, estoy segura que ni siquiera sabía que era un primer amor, de seguro y solo estaba encaprichada — le recriminé y el rió, mostrando su sonrisa apretada de labios abultados.

— Te doy opciones, eres tú quien las elimina...

— Es que, es difícil, ¿de acuerdo? Escribir algo acerca de situaciones que no he sentido con intensidad — cansada. Así me sentía, recline mi cuerpo hacia el frente, golpeando mi cabeza contra la mesa de la cafetería rendida ante todo mal que podría pasarme si no escribo aquel poema para la presentación de letras. Un segundo email había sido enviado a mi teléfono, pidiendo que recordara que aquella fecha de la presentación de acercaba y no aceptarían ni por un segundo la irresponsabilidad o vagueza de mi oarte. Amor era lo que menos sentía en estos.lomento, inclusive cuando tenía a mi mejor amigo en frente, no podía hayar las palabras para resaltar lo sola que me sentía. Y era tan estúpido todo eso que lastimaba.

— No te presiones, Jigi. Aún faltan muchos días antes de que presentes, relájate.

— Es irónico que tú lo diga cuándo Kim Seokjin es el único que hace sus deberes una semana antes por la ansiedad que me le causa tener cosas que hacer — me burle de manera directa y el me sonrió girando los ojos, sabiendo que era cierto—. Pero ya, ¿sabes qué? Veré Twilight y Todo lo que piensa esa tonta protagonista lo diré, ¡boom! — fingí una explosión mental y el volvió a reír de manera un poco más intensa.

— ¿Hablaras de vampiros y demonios? ¿Eso no es plagio?

— No si los cambio a un vampiro, Y UN ALQUIMISTA— señalé sugerente—. ¿Que tal, eh?

— Podrías hacer que a la final queden juntos.

Mis tensiones se alejaron un poco con aquello, y la mesa se inundó de rodillas de mi carte, y la estruendosa carcajada de Seokjin.

— Quisiera ayudarte, Jigi — el hablo finalmente. Sin embargo sus movimientos se apresuraron, empezó a guardar todo su mejunje en su mochila de manera apurada, como si aquello le costara la voda—. Pero tengo reunión con mi tutor, se me había olvidado, rayos.

El apuro en sus manos fue más intenso que inclusive incluyo en su mochila algunos objetos de mi propiedad... Ah, los iría a buscar luego, no interrumpirla la pequeña crisis de tiempo que tenía mi amigo en estos momentos.