Kara Danvers...
El pequeño toque de nuestras manos se sintió tan extraño y cómodo que permanecimos unos instantes así antes de que llegara el mesero con la botella de licor y unos vasos especiales para la bebida. Pasamos el rato tomando y hablando entre otras cosas, nada en sentido laboral, sin embargo su estatus económico y social dejaba mucho de qué hablar. Todo se desvío del tema cuando ella y yo cruzamos nuestros brazos tomando de una el líquido de nuestros vasos sintiendo el buen sabor.
-¿Soy yo o cómo que está empezando a hacer calor?-. Dijo quitándose el abrigo permitiendo así ver su escote algo llamativo.
Tragué saliva y decidí tomar otro trago dejando de ver sus pechos.
Ella sonrió a lo grande, pues que ingenua fui al pensar que lo hacía sin intención alguna cuando era todo lo contrario.
-No... Yo, yo, creo que sí... Sí, hace calor-. Dije desviando la mirada solo un segundo.
Al voltear no pude hacer más que mirar fijamente sus ojos verdes oscurecidos relamiendo mis labios, y a decir verdad no sé si era por la luz, el estado ebrio en el que me encontraba o si algo tremendamente candente pasaría entre nosotras.
Sentí que se acercaba más y más mirándome a mí y después a mis labios entre abiertos, mojé mis labios con ayuda de mi lengua y ella sonrió en respuesta. Se acercó por completo uniendo nuestros labios en un beso apasionado.
Otra cosa que se me olvidó mencionarles al inicio fue, que soy intersexual y con un ambiente así era imposible controlar mis deseos.
En un moviento suave ella se posicionó sobre mi regazo haciendo posible que colocara mis manos en su cintura, los besos iban y venían en una intensidad necesaria que poco a poco se convertieron en gemidos audibles entre ambas, sentía como mi erección se hacía más evidente presionando sus caderas más abajo, a ella parecía no importarle pues sus movimientos de cadera encima de mí solo hicieron que me excitara aún más. Los jadeos eran notorios en mis labios entre abiertos que buscaban su boca con desesperación.
Seguimos así por unos minutos más hasta sentir que estaba a punto de llegar.
No supe que hacer estaba tan extasiada por sus besos y el calor que sentía que en vez de huir en dirección al baño sólo me quedé ahí sin importar nada.
Ella pareció notarlo ya que sin permiso alguno se quitó de encima, la vi estática sin decir algo que detuviese sus movimientos. Después la sentí bajar la cremallera del pantalón, meter la mano y sacar mi miembro erecto para masturbarlo. Mi asombro no se hizo esperar, al sentir sus manos alrededor de mi miembro.
La miré riéndose de mí por mi rostro evidente.
Vi su impresión al principio pues además de erecto se encontraba duro y grueso, mordió su labio inferior y sin aguantar más comenzamos a besarnos.
Agradecí internamente ya que en verdad lo necesitaba, siguió así unos cuántos segundos hasta sentir como mi cuerpo se encontraba en completo éxtasis.Al finalizar ella tomó una servilleta y limpió el semen que había caído en su mano, me entregó otra para limpiar mi miembro.
Después de eso pensé que iba a decir que fue un error pero en su lugar sólo me besó de nuevo, pero está vez solo un beso tranquilo con sabor a frutas.
Me sorprendió su reacción.
Metí mi miembro y subí de nuevo la cremallera del pantalón después de limpiar el resto de semen.
Tragué saliva al verla reírse de nuevo tan libremente que necesité tomar otro trago dejando consigo la botella vacía.
-¡Kara! Te estuvimos buscando y...-. Callaron al instante en que vieron mi estado ebrio y que además no me encontraba sola.
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Eres mi esperanza
Science FictionElla solo había salido a beber con sus mejores amigas, sin imaginar que ella siendo aliada del licor terminaría besándose con alguien más que no fuera su novio. La magnate mujer de negocios Lena Kieran Luthor debe estar bajo custodia de sus escolta...