Eres mi esperanza

16. El Plan.

-¡¿Cómo que detendrás el ataque?!-. 

-Mercy cuántas veces tengo que repetir que no hay necesidad de gritar, tú te uniste a la causa por tu propia cuenta yo sólo sigo mis planes y si es algo que no tomas a la ligera puedes irte por dónde regresaste-. La chica de tez morena se mostraba inquieta e insegura pero aún así se digno a relajarse. 

-Está bien. ¿Cuándo será el siguiente movimiento?-. Cuestionó tomando el último líquido de whisky escocés. 

El tipo más arrogante y buscado por toda la ley judicial permanecía sentado detrás de su muy bien mantenido escritorio. 

Cualquiera que entraba lo observaba tan relajado que se asombraba por mantener cierta postura a pesar de todo lo que se escuchaba sobre él. Algo que desde años dejó de restarle importancia. 

Con su actitud normal y tranquila estiró su mano derecha hacía el pequeño tablón de ajedrez frente a él. Con un movimiento simple y sencillo culminó su partida llevándose la victoria. 

-Serán dos golpes en uno sólo-.

…

El día aún no terminaba y ambas seguían en el mismo sitio admirando lo bueno de la naturaleza cuando el celular de la rubia sonó interrumpiendo el cómodo silencio que se había asentado entre ellas. Era un caso pérdido el ignorar la llamada tratándose de Alex por lo que Kara volteó hacía Lena respondiendo en el acto.  

-Hey, ¿Todo bien?-. Sus ojos azules prestaban atención al frente mientras esperaba respuesta del otro lado. 

-Llegué a tu departamento y no estabas te llevo esperando aquí media hora-. La voz de Alex era tranquila pero se podía escuchar una ligera molestia en ella.   

-Es que, no estoy en la ciudad-. Kara cerró los ojos un momento esperando a que su hermana pudiera entender las razones.  

-Kara pero si tú misma me dijiste que tenías que contarme algo, es más, dime ahorita mismo en dónde estás y voy para allá-. La molestia está vez se reflejó en todo su tono de voz. 

-Alex dame tiempo, prometo que te lo diré sólo necesito despejar la mente-. Suspiró tocando con los  dedos el agua perteneciente al lago. 

-¿Por eso te llevaste a Lena?-. Cuestionó Alex confundida. 

-¿Qué? ¡Alex! No-. Frunció el ceño mientras miraba a Lena que se encontraba atenta a su propio celular. 

-Sí claro y yo soy un superhéroe-. Dijo con ironía.

-Estoy con Lena pero no como imaginas, además por lo que veo justo ahora ella está tranquila y sin nada más en su mente por lo que pensar, enserio necesito ésto. Quiero estar bien para atrapar a Lex-. Hubo un intranquilo silencio desde el otro lado de linea hasta que Alex suspiró en rendición.

-De acuerdo, avísame cualquier cosa-. 

-Sí, cuídate Alex y por favor manténme informada de lo que pase-. 

-Claro, igual cuídate, te quiero-. 

-Te quiero-. La rubia sonrió antes de que Alex finalizará la llamada. 

Guardó su móvil y volvió a sentarse a lado de Lena esperando a que dejase de hacer lo que fuese en su móvil. 

El sol ya se había ocultado desde hace unos minutos dándole espacio a las nubes que comenzaban a formar parte de un ligero viento significativo de que quizá podría llover en cualquier momento. 

Kara estaba tan atenta a la vista que no fue hasta que sentió la presión de la mano de Lena sobre la suya que volteó hacía ella. 

-¿Todo bien?-. Preguntó mirándola fijamente.