HEAVEN¹ | HAN JISUNG

012

El único sonido que había en la habitación eran el de nuestros besos, los chasquidos de nuestras lenguas al ser separadas. Era un deleite que ambos nos estábamos otorgando. La sensación de sentir nuestras lenguas jugar era un juego que poco a poco nos empezaba a colmar la paciencia, queríamos más. O al menos yo.

Sus manos se metieron debajo de mi polera y la comenzó a subir hasta lograr despojarme de ella. Mordió mi labio inferior hasta hacerlo casi sangrar.

—¡HyeRi!

Caí de la cama por el susto que me ocasionó Chris.

—¡Maldita sea Christopher! ¡Largate!

Bang río, miré a Jisung que seguía tumbado en la cama, tenía una ligera capa de sudor, sus ojos estaban cerrados y su respiración no lograba contenerse.

—Vistete, mamá está aquí —Jisung lo miró furioso y se apoyo en sus antebrazos— Lo siento amigo, quisiera que arreglaras tu problema ahí abajo pero... —Jisung miro en su entrepierna y tenía una erección, la cubrió con la almohada y cubrió su rostro— mi madre es muy religiosa y no se permiten los gritos de esta mocosa.

—¡Ya largate Chris!

Bang río y se marchó dejando la puerta cerrada.

Jisung comenzó a reír y se descubrió el rostro para levantarse de la cama.

—Tu hermano interrumpe cuando no debe.

—Lo sé, lo siento, yo...

—¿Tu madre es religiosa? ¿En verdad? —preguntó burlón.

—Sí, es la réplica exacta de tu madre.

—No lo entiendo, digo; tú no crees en dios pero tu madre es muy religiosa.

—Hubo un tiempo en el que creí en "Dios" pero he pasado cosas horribles, las cuales pedía, imploraba a dios para que me salvara y jamás lo hizo, aprendí a vivir por mi misma y dejé de creer en los milagros.

—Tuve una relación con Nayeon —confesó— ella fue mi primer amor, mi primer beso y la primera en romperme el corazón. Creí que si la volvía a besar me olvidaría de ti, pero no funcionó.

—HyeRi, mamá quiere conocer a Jisung.

—Carajo... —musité.

Tomé con fuerza la mano de Han por debajo de la mesa mientras que con la otra sostenía los palillos mientras seguía mezclando el pollo con la salsa agridulce.

—¿Entonces solamente son amigos o te gusta mi hija?

—Basta... —musité.

—¿Algún problema Hye?

—Mamá, basta, dejala en paz.

—Solamente quiero saber si le gusta tu hermana.

—A él no le gusta nadie, ¿de acuerdo? Todos sabemos que eso no es lo que quieres saber, solamente quieres meterte en mi vida para controlarme.

Me levanté de mi asiento y me fui de ahí.

Me senté a la orilla de la cama y suspiré.

Pueden llamarme como quieran, zorra, hija de puta, etcétera, etcétera. Y no me dolerá porque ya me acostumbré, sí, me he metido con chicos que tienen novias, he tenido sexo con muchos hombres y sí, por eso no estoy orgullosa. Pero comprendí que lo hago porque nunca tuve la atención de mis padres, siempre busqué amor en otras personas así sea sólo por una noche.

Todo se hace por una razón.

—Tu madre es exactamente igual a la mía, que horror.

No dije nada ante el comentario de Jisung, ni siquiera le tomé importancia que se sentara atrás de mí y rodeara mi cuerpo con sus brazos.

—No me dejaste contestar su pregunta.

—Porque no quería que lo hicieras.

—¿Y porqué?

—Porque no quiero saber la respuesta.

—Creo que la respuesta es muy lógica, ¿no?

—Aún así no quiero saber.

—Me gustas HyeRi.

Mi corazón comenzó a acelerarse y juraría que Han estaba riéndose de sentirlo tan agitado.

—Dije que no quería saberlo.

—¿Porqué? ¿Porque te comportas como una colegiala diminuta?

—No, porque si la respuesta hubiera sido un no, mi corazón ya estuviera desecho...

—Pero la respuesta fue un sí.

—Y es mucho peor, porque quizá tarde o temprano termine con el corazón hecho pedazos.

—Eso jamás pasará...

Sonrió y me besó.

Me colocó debajo de él y siguió besándome, lento y suave, tan a su manera...