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❝No importa cuantos días, meses o años pasen, ni cuanto el mundo y las personas cambien, hay cosas que el corazón simplemente se niega a olvidar.
JiMin lo sabía a la perfección.
Él había planeado una vida junto a la persona que amaba, sin embar...
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Era más de media noche, probablemente debería estar dormido ya que dentro de pocas horas debía ir a su trabajo pero ahí estaba en el sofá del departamento esperando por YoonGi.
Se suponía que debía haber vuelto hacia más de tres horas pero no lo hizo, tampoco había enviado un mensaje para avisar si doblaría turno y estaba verdaderamente preocupado pues acaba de realizar la vigésima llamada a su teléfono celular y de nuevo había sido ignorada.
¿Y si le había pasado algo malo?
¿Y si había tenido un accidente?
Estaba sintiéndose más ansioso y nervioso de lo que podía soportar cuando el sonido de la puerta siendo abierta lo sobresaltó.
Respiro con alivio cuando reconoció a la cabellera peliazul caminar hasta detenerse frente a él.
—Oh cielos YoonGi estaba tan preocupado, por un momento creí que algo malo te había sucedido ¿por qué vuelves tan tarde?
YoonGi no contesto, simplemente recorría su cuerpo con una mirada extraña estrechando sus ojos, una sonrisa ladina apareció en su rostro y su mirada se volvió más intensa.
—¿Me extrañaste?
El aliento a alcohol hizo fruncir el ceño a JiMin. YoonGi no bebía, no a menos que estuviese festejando algo y nunca bebía más de un par de copas.
—Estas... ¿Estas ebrio?
—Contesta Minnie ¿me extrañaste?
—Si, bueno estaba muy preocupado también.
—Bien, eso está bien.
Sin darle tiempo a responder YoonGi se acerco a él para lamer su cuello y apretar demasiado fuerte su cintura sacándole un jadeo adolorido que pareció divertirle al mayor.
—Voy a hacer que no me extrañes más JiMin.
Sin previo aviso lo sujeto de la muñeca y tiro de él sin cuidado hasta la habitación para después lanzarle con fuerza contra la cama.
—¿Q...Qué haces?
JiMin se incorporó un poco tratando de sentarse sobre el colchón pero fue duramente empujado sin cuidado por Min para dejarlo recostado nuevamente.
—¿YoonGi?
Sus ojos se veían por alguna razón más oscuros de lo normal, YoonGi lo veía de una manera que lo hacía sentirse nervioso, tan intenso pero no de una manera agradable si no más bien aterrador. Una vez más trato de levantarse pero el peliazul lo tomó con brusquedad por el cuello para subirse encima de él.
El miedo se hizo presente y JiMin llevó sus manos hasta su cuello para tratar de aligerar el agarre que el mayor ejercía sobre él, sus piernas fueron bruscamente separadas y su corto short de pijama casi destrozado en el proceso.
