Entrenando al Baby Boy.

Capítulo 60.

Feliz cumpleaños Marie, perdón por demorar <3

Oliver.

Remember the words you told me, love me 'til the day I die
Surrender my everything 'cause you made me believe you're mine
Yeah, you used to call me baby, now you calling me by name
Takes one to know one, yeah
You beat me at my own damn game

You push and you push and I'm pulling away
Pulling away from you
I give and I give and I give and you take, give and you take

Youngblood
Say you want me
Say you want me
Out of your life

And I'm just a dead man walking tonight
But you need it, yeah, you need it
All of the time
Yeah, ooh ooh ooh

─Eso fue excelente, muchacho─ No fui capaz de levantar la mirada, a pesar de las felicitaciones de los locutores una vez que reprodujeron otra canción. Ahora éramos libres de hablar, pero yo no podía. Entre la letra y mis sentimientos, me sentía enjaulado─. ¿Te encuentras bien?

Unos escalofríos me recorrieron el cuerpo, pensando en que Nicholas se había largado y probablemente ya estaría en el avión, con la incertidumbre de si sobreviviría a algo tan crudo como una guerra, sin poder tener una verdadera relación.

De todos modos, alcé la mirada, sonriendo apenas.

─Sí, sólo nervioso.

Mi voz, por mucho que intenté ocultarlo, salió quebrada. Ambos locutores me miraron un poco sorprendidos, probablemente debido a que no esperaban que mi voz perdiera tanta fuerza tras abandonar el micrófono. De inmediato pude sentir que me hablaron con más cuidado.

─ ¿Te gustaría dejarnos tu número? En caso de que alguna discográfica... Ya sabes, quiera contactarte.

Mire a Jeremy, quien estaba detrás de mí, y asentía con la cabeza repetidamente. Junto a él, estaba Colbyn, lógicamente él también me alentaba a darles mi número, después de todo él era mi representante, de eso se trataba su trabajo. No pude negarme, no es como si tuviera una formación profesional que me asegurara otra salida laboral.

─Seguro.

Le dicté mi móvil, sin muchas esperanzas. Era cierto que el lugar no se diferenciaba mucho de un estudio y mis esperanzas se elevaban, pero apuntar tan alto solo me proporcionaría una caída más dura. Tras salir de la radio, Jeremy y yo nos subimos al Uber que habíamos encargado, nos despedimos de los locutores, también de Colbyn, antes de partir. El nudo en mi garganta no se deshacía. Mis hombros estaban tensos debido a la culpa que me carcomía. Si tan sólo pudiera tener la oportunidad de hablar con Nicholas una última vez y pedirle una disculpa por haber cometido tantas estupideces, -intentar matarme la primera de ellas-, lo haría. No sólo eso, pensar en que ya estaba en el avión me hacía doler la cabeza. Él no debía afrontar algo como una guerra siendo tan joven. Ni siquiera yo mismo me imaginaba en esa situación, y eso sería menos problemático, porque no me quiero a mí mismo ni la mitad de lo que le quiero a él.

─Traje pañuelos─ Jeremy comenzó a buscar en su mochila un paquetito─. Maldición, dame un segundo, estaba aquí...─ Arquee una ceja cuando me dio el paquete adelantándose a los hechos─. Los compré porque imaginé que los querrías, es normal que estés sensible.

Se lo quité de la mano, abrí la ventana, y lo aventé por ahí. Jeremy hizo un gestito con la boca, desaprobando mi acción. A mí no me iba a tratar de sensible. Podía estarlo, pero no se lo iba a demostrar.

─ ¿No podemos ir al aeropuerto?─ inquirí cruzando las piernas─. Los vuelos tienden a retrasarse, quizás podría verle, sólo un instante... ¿Aunque sea de lejos?