8 -"Yo" es una buena respuesta a tus preguntas. Y tu, eres un maldito-

6.1K 879 204
                                    

- ¿Tu también tienes una moto? - Preguntó poniéndose el casco que el portero muy amablemente le había cedido.

- Claro, casi todos tenemos motos aquí. La ciudad es pequeña y así nos movemos fácilmente. - Arrancó la moto, la cual era idéntica a la de su nuevo amigo Jimin, pero ésta en vez de verde, era azul.

- Supongo que todos la compran en la misma tienda, ¿verdad? - Insinuó al notar que casi todas las motos eran iguales.

- Es la única tienda que hay en la ciudad. - Rió y aceleró la moto, esquivando los autos y los transeúntes.

Jungkook se aferró a la espalda del portero olvidándose por completo que apenas lo conocía, y éste condujo rápidamente, alejándose un poco de la ciudad y subiendo por una pequeña colina que llevaba a un pequeño pero hermoso restaurant con vista hacia la ciudad.

Bajaron de la moto y caminaron hacia el restaurant. Se veía muy iluminado y la gente que atendía era muy cordial. No era tan elegante como Jungkook había imaginado, pero se veía realmente lindo.

Decidieron sentarse en una de las mesas para dos personas que tenía vista hacia la ciudad. Desde allí podían verse las pequeñas luces de las casas.

- Este lugar es hermoso. - Dijo Jungkook quitándose su largo saco y colgandolo en el respaldo de la silla.

- Lo sé, me gusta venir aquí de vez en cuando. - Hizo una seña al mozo para que les trajeran el menú.

"Quizás trae a todas sus citas aquí" - Pensó Jungkook haciendo una mueca. "Pero, ¿por qué estoy pensando esas estupideces y que carajos me importa eso a mi?" Rió para sus adentro aunque dejaba ver en su rostro algunos gestos sobre lo que estaba pensando.

- ¿Que sucede? - Preguntó Taehyung mirándolo fijamente.

- Nada. - Contestó fingiendo una sonrisa, en realidad, estaba algo incómodo. - ¿Que ordenamos? - Tomó el menú en sus manos y comenzó a leer.

- Pues creo que pediré la especialidad de la casa, "Pollo relleno sorpresa" - Sonrió.

Jungkook lo observó con disgusto y tragó duro. Ese nombre no sonaba para nada delicioso, pero no quería parecer descortés.

- Pediré lo mismo. - Dijo entregando el menú en la mano del joven mozo, el cuál parecía ser muy amigable y se retiró haciendo una reverencia. - Y trae un buen vino por favor.

Taehyung hizo un gesto de aprobación al saber que a Jungkook le gustaba el vino, y del bueno.

- Bueno, ahora mientras traen el pedido... - Dijo cruzando los dedos sobre la mesa. - T-tengo algo que decirte. - Tragó saliva preocupado.

- ¿Q-que? - Dijo Jungkook algo asustado al ver su rostro.

- Hace un rato, cuando subiste a prepararte, revisé el buzón del correo.

Jungkook le había clavado la vista al portero, y sabía que esa explicación solo anticipaba una cosa...

- Había un papel para tí...

- Ya dime que decía... - Respondió suspirando y negando con la cabeza, en realidad no estaba listo para escuchar la respuesta.

- No lo he leído. - Respondió serio. - Pero lo traje.

Taehyung metió la mano en el bolsillo derecho de su pantalón y sacó de él un papel verde pastel, parecido a un papel de cuaderno, el cual se encontraba doblado en cuatro partes.

Jungkook lo tomó de su mano de un tirón y lo abrió lentamente.

"Te ves horrible hoy :)"

- ¡¿Que clase de porquería es esta?! - Comenzó a reír a carcajadas de lo estúpida que le parecía esa frase escrita en el papel. Arrugó el papel con su mano izquierda y lo metió en su bolsillo.

- ¿Que dice? - Frunció el ceño al ver la reacción de Jungkook.

- Olvidalo... - Rió, mientras observaba al joven mozo acercarse con su pedido en las manos.

La cena continuó tranquila, ambos chicos charlaban y hasta incluso reían en ocasiones, aunque no estuvieran muy cómodos el uno con el otro, apenas si se conocían. Aún así, Jungkook lograba relajarse por momentos, aunque la idea de estar siendo perseguido por alguien merodeaba por su cabeza.

THROUGH THE LOCK ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora