Nuevo Mundo (Omegaverse)

La marca te lo da y la marca te lo quita

Tal como entro en el despacho de mi jefe me voy para él y lo golpeo haciéndole trastabillar.

-¡Nii san!

Sacudo la mano dolorida mientras mi hermano me empuja para pasar por mi lado y acercarse a mi jefe que protesta tocándose la mandibula.

-Eso por lo de mi hermano y por ocultármelo tanto tiempo.- Le digo sacudiendo la mano.- Y ahora, si quiere despedirme...

-Es lo justo.- Dice haciéndome abrir los ojos. Ciertamente es lo justo. Acabo de golpear a mi superior.- Acepto el golpe como consecuencia de mis actos con Ashido, pero no por ello me arrepiento.- Dice acariciando la cabeza de mi hermano y abrazandolo cuando este busca su protección. ¿Cómo no me di cuenta antes? Esa forma de mirarse, de como se hablan sin palabras. Lo conozco demasiado bien.

-Ashido dice que te quiere asi que no diré nada más. Solo que espero que le haga feliz porque no esta solo.

-Mi intención nunca fue otra, Abarai.

-Entonces solo puedo desearos lo mejor.- Les digo viendo como mi hermano me mira sonriendo.

-¿Estas bien?- Me dice mi hermano al verme que no paro de tocarme la mano.

-Si bueno, puede que me haya lastimado al golpearlo.- Digo sin poder evitar reirme.

-Ganryu tiene los huesos muy duros.- Bromea.

Pasado un rato, mi hermano me trae una bolsa con hielo para la mano y se marcha para arreglar papeleo en la universidad.

-¿Teneis pensado mudaros juntos o algo?

-En realidad, Ashido casi esta viviendo en mi apartamento.- Alzo una ceja y él tuerce una ligera sonrisa.- Quise habértelo dicho antes, pero Ashido quería buscar el momento adecuado.

-Pues un poco mas y me lo dice con el niño entre los brazos.- Bromeo.

-Voy a pedirle que se case conmigo.- Dice sorprendiéndome.- Antes no se podía, pero con las nuevas leyes...

-Ya. Las nuevas leyes.- Digo fastidiado.- Parece que a muchos les han venido geniales.

-¿Algun problema con el ministro Urahara?

-Alguno no. Los tengo todos, pero me los he buscado yo solito.- Le digo negando y forazndome a sonreir un poco.- Sabre como solucionarlo.

-Si puedo ayudarte...

-No. Mejor no te mezcles si no quieres salir perjudicado.

-Ahora somos familia.- Me dice serio.

-Por eso mismo no quiero que mis errores os salpiquen. Siempre me las he apañado bastante bien.- Sonrio de manera fingida.

-Me dijo Grimmjow que querías hablar conmigo esta mañana, cuando fuiste a hablar con Ashido.

-Si. Quería pedirme unos días.

-¿Para estar con tu omega?- Dice sin saber el daño que me hace esa pregunta.

-Si, aunque más que nada es por ayudar con las niñas. Son dos y las noches son...

-Imagino. Por ley tienes tu baja de paternidad. Tramitaré los papeles.

-Genial. Gracias jefe.

***Soujun***

-El siguiente.- Dice una mujer de ojos dorados y piel morena que sonríe cuando me ve levantarme.- ¿Nombre?

-Kuchiki Soujun.

-Pase por aquí Kuchiki san.- Entro en un pequeño despacho que se nota aun a medio preparar.- Mi nombres es Shihoin Yoruichi. Siento que nuestras instalaciones no este completamente adecuadas, pero acabamos de abrir y ya sabe, la demanda ha sido realmente alta.