PHOENIX• Animales Fantásticos [COMPLETADA]

XIX. Café con un conocido desconocido

El MACUSA había intentado contactar con nosotros, pero les esquivábamos como podíamos. Últimamente he estado pasando más tiempo con las criaturas de la maleta, especialmente con Frank. Ahora mismo estamos los dos tumbados en el suelo disfrutando del sol, con mi cabeza apoyada sobre su lomo mientras le hago caricias con una mano. Estaba a punto de quedarme dormida, pero vino Newt.

-Oye Adara, tengo que ir a investigar una criatura. ¿Te quedas o te apetece venir?- emití un quejido. No me apetecía nada levantarme- Vale- se rió- volveré en unas horas- me despedí con la mano sin abrir los ojos

Estuvimos así alrededor de una hora, pero me empecé a quemar.

-Bueno Frank- me incorporé- me voy. Tienes suerte de que todo ese pelo te proteja del sol- levantó la cabeza hacia mí y le acaricié el dañado pico- Escucha, siento de verdad lo que pasó hace tiempo. Tendría que haberte protegido- junté nuestras cabezas y ambos cerramos los ojos. Le dejé un beso delicado en el pico y me levanté.

Iba a subir las escaleras cuando vi una nota, seguramente de Newt:

《Adara, necesito que des de comer a las criaturas sobre las tres. Te he dejado toda la comida preparada en cubos,
Newt》

Miré un reloj que había en la pared: eran las dos. Qué rápido se pasa el tiempo cuando no haces nada. Ahora sí subí las escaleras; abrí la trampilla y nada más asomar la cabeza sentí algo raro. Como si hubiese alguien. Además, olía a café recién hecho

-¿Newt? ¿Has llegado ya?- salí con cuidado. Algo no me daba buena espina- Si es una broma no tiene gracia

La maleta estaba en mi cuarto. Salí y fui dando pasos pequeños y silenciosos hacia el salón. Sabía que había alguien, podía sentirlo. Al llegar al salón no vi a nadie, pero qué susto me llevé al oír una voz detrás de mí:

-Adara Dallaras. Por fin nos conocemos- di un bote y rápidamente me giré, lista para atacar. Pero me detuve al ver que el hombre me sonaba familiar. Tenía una taza de café en su mano

-¿Nos conocemos?- Pregunté extrañada. De alguna forma su presencia me transmitía paz y seguridad. Su pelo blanco me era muy familiar. Y sus ojos... Uno de cada color... esto es muy extraño. Se que le he visto, pero no sé dónde

-¿No me recuerdas?- sonrió sin enseñar los dientes. Agudicé la vista, intentando encontrarle en mi memoria. Pero solo me venía una mancha gris a la mente.

Un momento...

¡La mancha gris! Al parecer se dio cuenta de que le había reconocido, porque su sonrisa se ensanchó.

-Eres el hombre de mis sueños

-Duras declaraciones para alguien a quien acabas de conocer- dio un sorbo a su bebida sin despegar su mirada de la mía

-Me has entendido perfectamente-me puse un poco a la defensiva

-Tranquila. Sabes que sí. Mejor llámame Gellert Grindelwald- ¡es el hombre al que estaba buscando el MACUSA! Algo me decía que le conozco de algo más. Se separó de la pared en la que estaba apoyado y se sentó en el sofá con bastante naturalidad. Hizo un gesto para que me sentase en frente de él. En la mesa había otra taza- ¿Café?- ¿qué demonios hace un hombre que no conozco ofreciéndome café en mi casa? Bueno, aunque en realidad no es mi casa...

Cogí la bebida muy extrañada y la olí. Sólo por si acaso había echado algo en ella. No encontré anomalías y bebí. Estaba muy bueno, sinceramente. Creo que es el mejor café que he probado en mi vida, o al menos, en lo que recuerdo de ella.

-¿Por qué has estado contactando conmigo?

-Es interesante que no me preguntes ni quién soy ni qué hago en tu casa

-No es mi casa

-Cierto. Es de tu... ¿amigo?... ¿protector?... ¿novio?... Bueno, las etiquetas no importan. La casa es del señor Scamander, lo sé- su voz era muy melosa, cautivadora, como si te atrapase en una telaraña y no te dejase parar de escucharla

-¿Por qué lo sabes?- me empecé a poner agresiva. Los pómulos me empezaron a arder, símbolo de que los rombos iban a aparecer de nuevo. No me importaba que me investigaran a mí. ¿Pero a Newt? Él no tiene nada que ver

-Si quisiese haceros daño al señor Scamander o a ti ya lo habría hecho, ¿no crees?- me di cuenta de que estaba clavando mis uñas en el apoyabrazos, así que aflojé al agarre y mis facciones se suavizaron- Muy bien, veo que lo entiendes

-No has respondido a mi pregunta- me crucé de piernas y apoyé completamente mi espalda en el respaldo, dando una imagen de seguridad

-Has hecho varias. ¿A cuáles quieres que responda?- una sonrisa burlona se empezó a asomar por sus labios. Me está vacilando. Afilé de nuevo mi mirada y casi inconscientemente empecé a crear fuego en mi mano

Él miró de reojo mi mano, sin ningún tipo de preocupación. Es más, parecía como si estuviese viendo un paisaje aburrido que lleva viendo durante un largo viaje. Eso no me gustó. No me gustó que no se asustase, y el hecho de que no se asustase me asustó a mí.

-Sé que no vas a hacerme daño. No te he dado motivos para que lo hagas

-De hecho, no me has dado motivos para que NO lo haga- recalqué el no

-Y aunque intentases hacerlo, acabarías tú peor parada. Y lo sabes, dentro de ti eres consciente de ello- miró el reloj y como si hubiésemos tenido una conversación de amigos durante horas, se levantó y dijo: -Se ha hecho tarde. Debo marcharme ya. Ha sido un placer conocerte. Bueno, mejor dicho, conocerte de nuevo- se dio la vuelta y alzó su varita

-¿De nuevo...- iba a preguntarle, pero me interrumpió, girando sólo la cabeza por encima de su hombro

-Nos volveremos a ver- y desapareció

En el momento exacto en el que se esfumó, Newt abrió la puerta del piso. Al verme de pie en medio del salón se acercó a mí con cara de preocupación.

-¿Adara? ¿Qué haces ahí en medio? ¿Todo bien?

No sabía qué hacer. ¿Le miento? ¿O le digo que el mago más buscado y peligroso del mundo mágico acababa de estar en el salón tomándose un café conmigo y que me conoce desde hace tiempo, tiempo del cual no recuerdo nada? Estaba de espaldas a él y me giró suavemente.

-¿Por qué te han salido de nuevo los rombos? Y más aún, ¿por qué hay dos tazas de café en la mesa?

...
¡Bueenaaas! ¿Qué tal estáis? ¡Espero que bien! Aquí en España estamos en cuarentena por el coronavirus. Espero que todos estéis bien y que os estéis cuidando❤

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