Sedici

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Domingo familia, no todos los domingos eran así pero se acercaban fechas importantes y Diana, la madre de Tom había preparado una comida para tener a sus tres hijos en su casa antes de que las festividades de fin de año comenzaran.

Tom llevó ensalada de manzana de un restaurante, su madre prepararía el pastel favorito del inglés y sus hermanas llevarían algo más para completar la comida, solo ellos, sin nadie más.

— Hermanito — dijo Emma cuando vio a Tom entrar por la puerta — un milagro poder coincidir contigo

— ¡que exagerada eres! — la abrazo — pero siempre es un placer verte enana

— ¡Mamá! Velo, ya va a empezar — acusó a Tom como cuando eran niños

— ¿que ustedes dos no maduraron? — Sarah salió de la cocina para recibir un beso de Tom 

— ya niños, los tres tienen que comportarse — Diana fue directo a los brazos de Tom — Hola cariño

— mamá — la apretó más con sus brazos — que bueno verte

— lo mismo digo, a mis tres amores juntos — sonrió para cada uno — ¿vamos a comer?

— por favor, que yo ya quiero el postre — dijo Emma con las manos en la barriga

— ¡dame cinco! — Tom ya había soltado a su madre y chocó palmas con su hermana

— lo dicho, no maduran nunca — Sarah se rio

La comida había sido deliciosa, sus hermanas y si madre cocinaban de maravilla y él solo pudo comprar ensalada que de igual manera había sido un éxito, el tan ansiado pastel llegó con unas cuantas tazas de café mientras Sarah les informaba a todos qué tal su trabajo.

El móvil de Tom vibró, saco el aparato a escondidas de su madre ya que Diana prefería pasar tiempo en familia y que nada de eso los distrajera.

Una selfie de Cay haciendo puchero apareció en la pantalla cuando abrió la notificación y debajo de ella un mensaje que decía: "estoy aburrida y ya no puedo acostarme boca abajo, tengo una bolita que no me deja hacerlo."

Por instinto sonrió, vio unas milésimas de segundo la cara con expresión graciosa de Cay y contestó rápidamente: "tendremos que ir a comprar una de esas cosas que parecen donas, ya sabes, dónde puedes meter tu pancita y estés más cómoda."

Una especie de tos sacó a Tom del transe que tenía con dicho mensaje, volvió la vista hacia arriba y notó que todas lo estaban mirando.

— ¡lo siento! — dijo Tom como cuando era regañado de Niño

— Tom ya te he dicho que no me gusta que usen esas cosas en la mesa y menos si se trata de trabajo, solo un día cariño

— mamá, ¿no viste la sonrisa que se le dibujo? — indicó Emma — eso era todo menos trabajo

Tom entre cerró los ojos en cuanto eso salió de la boca de su hermana menor.

— ¿nueva novia? — cuestionó Sarah

— es una amiga

— si, amiga ... — Emma se burló

— cariño, si tienes una nueva pareja sabes que es bienvenida a la casa, no hoy porque este día era especial para la familia pero si cuando gustes — Diana le sirvió otro pedazo de pastel — ¿como se llama?

— no es mi pareja, es una amiga, se mudó hace unos meses al edificio, la conocí en la cena de la escuela — explicó mientras intentaba no devorar la especialidad de Diana — es amiga también de Matthew Burt

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