• Causa y Efecto •

Trentadue

El verano estaba llegando a su fin, Matthew tuvo que regresar a Italia con el corazón deshecho, no quería separarse de Pia cuando la llevaron a despedirse de él en el aeropuerto.

Celia y Aaron buscaron la forma en que su nieta estuviera más tiempo con ellos, así que en el momento en que Carey les dio como opción cuidarla mientras ella iba a la universidad aceptaron sin dudarlo un segundo.

En cuanto a Tom estaba preocupado, en poco tiempo tendría que ir a verificar el final de la obra en Liverpool y tendría que dejarlas solas.

Pero antes necesitaba reunirse de nuevo con Kam, una obra en la que estaban interesados desde hace tiempo estaba buscando a la gente correcta para montarla y era el momento adecuado para ser ellos.

— ¿y bien? — cuestionó Tom a Kam — ¿la obtuvimos?

Este le hizo una seña de espera, estaba al teléfono esperando una confirmación.

— Perfecto, regresó la llamada entonces, muchas gracias — colgó — que están viendo una oferta más pero lo más probable es que la tengamos — sonrió — saben de tu éxito y bueno estás en la cabeza de la lista

— ¡estamos! — corrigió — vamos a lograrlo Kam

— llamaré más al rato para ver qué fue lo que decidieron, ahora señor... cuénteme de sus problemas de amores

— ¿que problemas?

— no dejas de ver el teléfono— rodó los ojos — más de lo de costumbre ¿que pasa?

— sabes que Cay ya le dijo todo a Matt ¿no? — su amigo asintió — bueno ahora sus padres están cuidando a Pia mientras ella va a la universidad

— ¿que tiene de malo? Son sus abuelos

— si, pero podría dejarla conmigo unos cuantos días — se encogió de hombros — no me hace mal cuidarla de vez en cuando, por ejemplo hoy pude haberla traído al restaurante y después un paseo por el parque

— wow si que estás enamorado

Tom frunció el ceño ante su comentario, ¿que tenía que ver que quisiera pasar más tiempo con Pia?

— me refiero a que dudo mucho que al ser otra persona tú te hubieras involucrado tanto en su embarazo y ahora ya con la bebé — continuó

— ¿crees que este mal? — dijo Tom con confusión — no quiero que el piense que quiero tomar decisiones sobre su forma de criar a Pia y mucho menos que no quiero que tenga contacto con su padre y su familia pero

— quieres que también te tome en cuenta para cuidarla o estar con ella ¿no? — Tom asintió un poco avergonzado — igual sabes que pronto volvemos a Liverpool

— lo sé, quiero pasar más tiempo con ella por eso mismo, se escucha egoísta pero es verdad

— ay Tom el amor te pego muy fuerte — le sonrió — Pia se acordara de ti, solo nos vamos 7 quizás 8 días ... la viste nacer, ellas estarán muy bien

— eso espero

La conversación continuó con cosas del trabajo, preparando el viaje a Liverpool y comenzando la estrategia para montar aquella nueva obra que para suerte de Tom estaría en Londres.

Carey apresuraba sus pasos hacia la casa de los Burt, cuando se enteró de que estaba embarazada se aterró de forma sobrenatural pero ahora que tenía a Pia no se imaginaba la vida sin ella, las horas en la universidad le parecían eternas.

— cariño — Celia abrió la puerta — pasa pasa ... la princesita está durmiendo con Aaron

— gracias — ella se adentro — ¿no les da muchas molestias? Puedo conseguir a alguien o pensar en alguna otra persona para que la cuide

— no, por favor nosotros estamos encantados cuidando a nuestra nieta — le indico el camino a la cocina — créeme que es lo mejor que nos pasó y para Matthew también es algo increíble

— me alegra saber que no fue rechazada o que no lo tomaron a mal — le sonrió al señor Burt quien mecía con delicadeza a Pia

— ¿rechazarla? — cuestionaron los dos

— Carey, jamás haríamos algo así — aseguró Aaron

— no tendríamos porque — Celia continuo — las cosas que pasen entre tú y Matt no son nuestro asunto, no te vamos a negar que nos gustaría verlos juntos

Sonrió incomoda, en general estar en esa casa era algo incómodo.

— pero no tendríamos porque rechazar a la pequeña — la mujer le palmeo la mano — y nos la puedes dejar todo el tiempo que desees

— gracias en serio — volvió a sonreír pero un poco más tranquila — si Matt no puede estar tanto tiempo ahora al menos puede estar con ustedes

Después de un café y una charla de el nuevo curso que estaba impartiendo Carey tomó a su pequeña quien estaba encantada en brazos de su madre y partió a su casa.

Cuando llego se encontró con un Tom dormido, tenía papeles encima pero su cuerpo denotaba tranquilidad.

Dejo a Pia cuidadosamente sobre él, la pequeña toco con sus manitas la cara de Tom quien despertó un poco desorientado.

— ¿estoy muerto? — soltó adormilado — porque este angelito no puede vivir en la tierra

— ¡tonto! — sonrió Cay

— oh por Dios si estoy muerto — dijo el inglés— estoy en el cielo con dos Ángeles

— ya Tom, no digas esas cosas — se sonrojó — Pia te extrañaba muchísimo

— y yo la extrañaba a ella — la tomo con cuidado, está sonrió al sentirse segura — ¿verdad mi bebé?

Tom se quedo callado, "mi bebé" le había salido sin pensarlo, solo lo dijo, volteo a ver a Cay con un poco de nerviosismo, ella sonreía con ternura hacia la escena.

— se escuchó muy lindo

— pensé que te enojarías — Tom comento avergonzado

— ¿por qué? Mira no lo digas enfrente de Matthew porque no se realmente cómo vaya a reaccionar pero conmigo no tienes de que preocuparte — se sentó a lado de los dos — aparte has sido parte de su vida desde el primer aliento que dio

— es que ya no veo mi vida sin ustedes dos, está pequeñita me llena de alegría y la verdad su mami es sin problemas el amor de mi vida

— eres tan adorable mi amor — le beso la mejilla — son la felicidad que necesitaba y agradezco que tú hayas aceptado tan fácilmente mi embarazo

— Kam dice que estoy muy enamorado de ti, que si fuera alguien más no hubiera reaccionado del mismo modo — pasó su brazo por la cintura de esta — creo que tiene toda la razón, este amor es mucho más fuerte de lo que alguna vez sentí por alguien más

La chica los abrazo a los dos, su pequeña adoraba a Tom, le gustaba tocarle la cara y verlos juntos la hizo sonreír mucho más, se sentían muy cómodos.