Quarantasette

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Carey abrió los ojos sin poder creer que este día había llegado, ¿como había pasado un año?, su bebé estaba creciendo tan deprisa y cada día hacia que eso se notara, si no era una palabra nueva en su vocabulario, era un gesto o algunos pasitos con ayuda de Tom.

Si bien al enterarse de la noticia de que sería mamá se aterró por completo, aún teniendo a la pequeña Pia en sus brazos pensaba que quizás no sería una buena mamá pero las cosas no salieron tan desastrosas como se imaginó.

Había momentos en los que deseaba saber que le sucedía, cuando se enfermaba y cuando lloraba sin razón aparente pero con ayuda de Diana y Celia logró sacar todo adelante, claro que también estaba la parte de Tom, quien estuvo ahi desde el segundo uno y no se apartó jamás.

Matthew a pesar de saber de la existencia de su hija un poco más tarde logró adaptarse bien, era lo que Cay esperaba que fuera, un gran padre para la pequeña Pia.

— no puedo creer que esta muñequita esté cumpliendo un año — Tom salió con ella en brazos — deja de crecer ¿si?

— tampoco puedo creer que se esté haciendo mayor — Cay le colocó bien uno de sus zapatitos — mañana se irá a la universidad, ¿ves? Te dije

— amor, es su primer año, tampoco cumple 18 — beso su frente — tranquila, vamos que se hace tarde

— no se como lógranos que todo estuviera a tiempo

— solo necesitas dejar que te ayude, soy experto en hacer las situaciones un poco más tranquilas — le guiño

— ¡ay si! El calmado Hiddleston




Matthew insistió tanto en que la fiesta de cumpleaños fuera en su casa que no hubo opción para negarse a ello, su patio estaba decorado con globos rosas y blancos, un pastel de dos pisos con orilla dorada en el centro de la mesa, rodeado de bocadillos de diversos tipos y algunos adornos más que hacían alusión a la princesa que ese día estaba de cumpleaños.

— hola mi amor — Matt se acercó a la cobriza para cargar a su hija — ¿quieres que veamos todos tus adornos?

La bebé asintió como si entendiera de lo que significaba eso, los dos salieron al patio mientras los demás se saludaban entre sí.

— Matthew se lució con todo — le dijo Tom a Cay — es un gran padre

— Tom ...

— no, no, lo digo en buen sentido, me alegra que Pia los tenga a ustedes como ejemplo, sus pilares — le sonrió

— también te tiene a ti, ella vivió contigo muchos primeros momentos y lo agradecemos, las dos — se abrazo a su torso — te amamos

— y yo las amo a ustedes, mucho mucho

Carey ayudo a Celia con los últimos preparativos, atender la puerta cuando está anunciaba un nuevo invitado, Diana, las dos hermanas de Tom, Ben junto con Sophie, Kam, Samuel con su mujer y su nieta, ya que no habría más niños esperaban que al menos ellas dos estuvieran felices con lo que Matthew había organizado.

Pia pasaba de brazos a brazos, todos querían ver a la cumpleañera de cerca, el bonito vestido que había sido regalo de Sophie unos meses atrás le quedaba increíble, bebieron, comieron y las niñas se divirtieron en la pequeña alberca de pelotas que tenían para ellas, Matt hubiera preferido un inflable pero al percatarse de que su hija aún no se sostenía sola borró esa idea de su lista.

— pensé que sería más difícil convencerte — dijo el castaño hacia Cay

— ¿de que? — ella frunció el ceño

— de tener la fiesta aquí, pensé que dirías que Tom ya había contratado algo y que sería como todo un cuento de hadas — rodó los ojos

— Matt, ya hablamos de eso, aparte eres su padre, obvio que te iba a decir que si al ver toda esa ilusión que tenías por organizar su primer cumpleaños

— no estuve ahí cuando nació pero al menos puedo hacer algo por ella ahora — se encogió de hombros — ¿de verdad crees que lo esté disfrutando?

— claro, solo tienes que verla — la señaló en los brazos de Sarah — está encantada con todo, gracias de verdad

— no hay nada que agradecer, por Pia haría cualquier cosa — sonrió

— bueno señor, iré a cambiar a su hija que lleva varias horas con el mismo pañal y sufriremos si no hago eso pronto — se quiso alejar pero la mano de Matt la interrumpió

— nuestra hija — le rectifica

— nuestra hija

Cay asintió y logro llegar hasta la bebé, la hermana de Tom se ofreció para acompañarla así ella también practica como cambiar el pañal de su sobrina.

— es una fiesta tan linda — comentó Sarah con una sonrisa — digna de la princesa

— lo sé, su padre la ama demasiado, no esperaba esto de él— Cay se movía ya mecánicamente — le quité la oportunidad de verla los primeros meses de vida, supongo que ahora las cosas son distintas

— ya no te aflijas por eso, él ahora es parte de la vida de Pia, dudo que aún tenga algún resentimiento al respecto

— Sarah, si te soy honesta no se bien que estoy haciendo, las cosas con mi hija están bien pero en mi vida en general todo está siendo tan extraño— confesó

— ¿ya no estás tan segura de casarte con mi hermano? — la rubia cuestionó angustiada

— no, no es eso, me refiero a que está especie de rivalidad entre ellos, Pia es tan pequeña... hay cosas que quiero explicarle para que nada malo suceda pero se que esto no va a ser posible hasta que tenga más edad — sonaba frustrada

— Cay... no te aflijas por eso todavía, ella entenderá y se le explicará todo cuando sea el momento — le dio una pequeña caricia en el hombro — es pequeña, deja que disfrute del contacto con sus abuelos, con nosotras y te la consideramos nuestra familia, ya entenderá después

— me voy a volver loca, eso es seguro — ambas rieron — y una experta en cambiar pañales

Unos minutos más tarde ambas bajaban ya para cortar el pastel que todo el mundo estaba deseoso por probar, Matthew hizo que la cobriza se acercara junto con la pequeña en brazos, todos entonaron el cumpleaños feliz mientras Pia aplaudía con sus manitas sin entender muy bien la dinámica del suceso, una vez que repartieron el pastel todos volvieron a tomar asiento para continuar charlando.

— Hey princesa — dijo Tom acercándose a su novia — yo no he tenido tanto tiempo con la festejada ¿puedo?

— amor, sabes que si, ella encantada de estar en tus brazos

— ven acá preciosa — Tom extendió sus brazos hacia Pia y ella hizo lo mismo hacia su dirección — ¿por qué eres tan linda?

— pa - pá

Tom abrió los ojos como platos, le acababa de decir papá, cuando noto ya todos los invitados a esa fiesta lo estaban mirando atónitos y en espera de la reacción de Matt que al parecer palideció en ese mismo segundo.

— Matthew, no ...

El castaño salió furioso de su propia casa seguido de Carey, sabía que algo así iba a suceder y temía la reacción de su amigo.

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